La Quinta Columna

En una situación de confrontación bélica, se usa  la expresión QUINTA COLUMNA para identificar a “toda persona o grupo de personas ubicadas dentro de un bando, que, por algunas de sus acciones, pareciera mantener lealtades al bando enemigo”. Esta actitud, se cree, pudiera ser debido a motivos de naturaleza religiosa, étnica o ideológica. ¿Existe una Quinta Columna en Venezuela? ¿Quiénes son? Veamos.

Hoy día, nuestro país está siendo víctima de un ataque despiadado por parte del imperio yanqui. Simplemente porque tenemos las reservas petroleras más cuantiosas del planeta Tierra, porque tenemos hierro, aluminio, gas, uranio, coltán, oro, diamantes, fosfato, titanio, plomo, así como importantísimas reservas de agua, entre otras muchas cosas. Y, por si fuera poco, un pueblo, liderado por nuestro Comandante Chávez, que decidió, de manera soberana, ser dueño absoluto y protagonista del destino de nuestro país, de nuestras riquezas, sin tutela imperialista, como sucede en otros países.

Esta situación tenemos que verla en términos reales: por una parte un pueblo decidido a ser libre, independiente y soberano. Y por otra parte, un imperio que jamás se resignará a no poder meter sus garras en nuestro suelo patrio.

Bajo este escenario de confrontación, la sana lógica nos dice que todo el pueblo venezolano, la nación entera, sin distingos de ninguna naturaleza, debería estar de unido en la defensa de nuestra soberanía y nuestras riquezas, frente a cualquier agresión externa, venga de donde venga. Esto parece sencillo de entender. Sin embargo, en nuestro país existe un pequeño grupo de individuos, en su gran mayoría de clase pudiente  (¿por qué será?), que no piensa así. Este grupo trabaja para entregar nuestras riquezas al imperio gringo. Sus acciones así lo demuestran.

Bueno, dadas estas características, este grupo califica plenamente como la  QUINTA COLUMNA del impero yanqui. Saboteando, guarimbeando, confundiendo gente, mal poniendo a Venezuela fuera del país. Son verdaderos traidores y como tales, deben ser calificados y algún  día enjuiciados. Ese grupo de apátridas, por cierto, son en su mayoría, dueños de medios de comunicación, banqueros y empresarios (¿por qué será?),

Hacer oposición al gobierno es y debe ser normal en cualquier democracia. Presentar una propuesta de gobierno, ir a elecciones, medirse y ganar o perder  es lo normal en cualquier  país demócrata. En Francia, Italia, España o Suecia, por ejemplo, existen gobiernos con fuertes y aguerridos partidos de oposición, con posiciones ideológicas enfrentadas. En Inglaterra, por ejemplo, gobierno y oposición “se caen a piña” en el Parlamento, pero allí, en esos países, todos coinciden plenamente en la defensa de sus soberanías, sin la menor discusión, desde las cúpulas partidistas, hasta la militancia y los ni-ni, pasando por las jerarquías de las diferentes organizaciones religiosas. Impensable sería en Suecia, por ejemplo, ver a la oposición solicitando una “invasión yanqui”, porque no les gusta las políticas del gobierno de turno. Una oposición en cualquiera de estos países antes mencionados, jamás pudiera ser calificada de QUINTA COLUMNA. Muy al contrario de la nuestra.

En nuestro país queremos una oposición patriota. Sin embargo, la gran mayoría de la cúpula de la oposición venezolana, no el pueblo, no está pensando en ganar elecciones democráticamente. Sólo trabajan en la traición. No han logrado diseñar una propuesta de gobierno que atraiga la atención del pueblo, además de no contar con un liderazgo nacional atractivo. Por eso volverán  a perder el próximo 26S. Qué bueno sería que esa oposición seria, democrática, patriota, se deslindara de la oposición traidora, apátrida y guarimbera.

Para ganar elecciones hay que tener propuestas y liderazgos políticos, entre otras cualidades.

Saben que en septiembre volverán a perder, porque el PSUV cuenta con estos dos componentes importantes, además de un tercero: Propuesta, Liderazgo y Maquinaria.

Por eso recurren a ideas perversas como la traición, transformándose en los QUINTA COLUMNAS del imperio yanqui. Están trabajando a la sombra, orquestando algún evento impactante en nuestro país, que conmocione la opinión nacional e internacional, preparando el terreno para una intervención yanqui. ¡Sueñan con una intervención yanqui! No están trabajando en el activismo partidista de calle. Están trabajando en la oscuridad, “como todo traidor”, preparando el terreno con algún fin inconfesable. Se percibe en  el ambiente. Se sienten vientos en el panorama político que presagian tormenta: Chávez Abarca, el show del embajador Hoyos en la OEA, la presencia militar gringa en Costa Rica, el video en CNN, la necrofoto de El Nacional, el tema de la inseguridad como ataque mediático de la oposición, son síntomas de que alguna tormenta se aproxima. ¡Ojo pelao!

Esto hay que analizarlo  muy seriamente. Porque los traidores venden hasta su madre, si es necesario. No tienen escrúpulos ni limitaciones éticas o afectivas que los aten. Sólo los mueve el dinero y el odio al Comandante. Y esto es muy peligroso, por cuanto traspasa lo racional en el ser humano.

¿Qué debemos hacer nosotros?

Primeramente no debemos cantar victoria antes de tiempo. Sólo dedicarnos a hacer el trabajo. Cada quien en la tarea asignada. Los gobernantes a hacer el buen gobierno. El PSUV y demás aliados, haciendo el trabajo organizativo. La maquinaria partidista con las patrullas el frente, haciendo el trabajo de calle. Los patrulleros haciendo nuestro trabajo del uno por diez.

Fortalecer la acción de gobierno de manera contundente, que se sienta y llegue a las clases más necesitadas. Aquí los alcaldes y gobernadores tienen un papel estelar en la primera línea de batalla, conjuntamente con nuestros candidatos y candidatas a la AN. Son los que están en todos los  municipios y  parroquias del país y conocen los problemas en cada rincón de cada comunidad. No resolver un problema social o de servicio público oportunamente puede convertirse en votos menos. Cuidado con el desencanto. O ganamos el 26S con más de dos tercios o perdemos la revolución con Chávez, gobernadores y alcaldes. Ya le pasó una vez en Nicaragua a Daniel Ortega. Historia reciente. La mejor propaganda de campaña es un buen gobierno.

El 26S votaremos por la Permanencia del Comandante Chávez liderando el proyecto revolucionario en Venezuela, más allá de los candidatos y candidatas, que deben contar con todo nuestro apoyo. El mundo entero tiene los ojos puestos en Venezuela.



Jorgetejera2010@gmail.com


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Jorge Tejera

Trabaja en ALCALDÍA GIRARDOT-ARAGUA Estudió en UNIVERSIDAD DE AIX-MARSEILLE-III, FRANCIA Vive en Maracay, estado Aragua

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