"Resulta y acontece" como suele decir el amigo Eduardo Mendoza que ahora los opositores "escuálidos" de la Revolución Bolivariana sí creen a pie juntillas y con fe de carbonero en la palabra contenida en los libros de la "Colección Bicentenario" (que el Estado obsequia a los estudiantes del sistema público de educación, en todas las modalidades del nivel primario y secundario), cuando apenas días atrás les parecía un horror porque dizque ideologizaban. Y como ellos se creen científicos en la tradición heredada del positivismo y no dialécticos, aspiran que sus hijos tengan como decía Gastón Bachelard un proceso limpio de polvo y paja en la formación de un espíritu científico, sin obstáculos epistemológicos, siendo uno de éstos el lenguaje (aunque por ahí dicen que la lengua es el castigo del cuerpo).
Recordemos que como los niños y jóvenes presentan dificultades para la comprensión y elaboración de conceptos científicos (pero ya se ve que los adultos también) el poeta e investigador francés postulador de la psicología dinámica ofrece cinco vías para describir ese proceso, a saber, (1) Los conocimientos previos, (2) el obstáculo verbal, (3) el peligro de la explicación por la utilidad, (4) el conocimiento general, (5) el obstáculo animista… (www.redalyc.org/pdf/).
Escoja el posible lector cuál de tal numeración es el que más aplica para el caso particular, en lo personal como hemos señalado ya nos inclinamos por el segundo (obstáculo verbal) y el tercero (explicación por la utilidad), sin embargo otros pueden señalar otro o todos los anteriores.
La anécdota que nos resultó hasta hilarante fue prender el televisor esta mañana y ver aquí en Barquisimeto cómo celebraba un periodista de PROMAR TV que la colección de libros bicentenario (Sociales 4to y 5To Grados) trae un mapa conceptual sugiriendo que para la convocatoria de la Asamblea Nacional Constituyente la nación debía aprobarla mediante referendo consultivo; se trata de un ex diputado al antiguo Congreso Nacional por Convergencia, luego militante de Primero Justicia hasta recalar en Avanzada Progresista.
Aunque fue defenestrado como candidato apenas meses atrás a la actual AN por el Gobernador don Henri Falcón (que si tuviera dignidad al menos no le hablaría más); se llama José Luís Yépez Rodríguez. Pero sigue siendo gran opositor, convirtiendo su programa de opinión en una especie de ventana con un equilibrio precario entre sus propios pareceres y los de sus invitados, casi todos de su misma tendencia; frente a los cuales se siente extasiado. En cambio, cuando invita a algún chavista para disimular su parcialidad será, pone cara de disgusto y constantemente manda a corte ladeando la mirada, como chivo en camión.
Esta gente tan ilustrada, concluí, confunde, porque así conviene a sus intereses, conceptos de orden jurídico-políticos poco desarrollados en la experiencia histórica concreta en Venezuela y que hace parte del saber común, que es propio de los maestros de escuela primaria, con sentencias del Tribunal Supremo de Justicia, instancia encargada de resolver conflictos de interpretación; ¿luego entonces padecen el peligro de explicación por utilidad?
Tal debilidad conceptual de la colección bicentenario, se interpreta como un indicador de incoherencia con la filosofía política del tipo democracia directa y el legado del pensamiento del comandante Hugo Chávez, base ontológica, epistemológica y metodológica en que se apoya la Revolución Bolivariano (eso es parte del conocimiento general, dado que lo específico de la convocatoria al proceso constituyente en Venezuela es inédito de acuerdo a lo dispuesto en los artículos 347, 48 y 49 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, misma que la oposición rechazara en 1999 y aboliera en 2002 con "La Carmonada" y ahora hipócritamente dicen amar y defender, pero eso no les causa risitas).
