Locura con clase

Después de la negación del cáncer a Chávez y la aceptación del cáncer de Forero y Peña Exclusa Amén (así sea), con la aceptación a los que se van detectar a Fiuni y demás POLÍTICOS PRESOS, me lleva a insinuar a quienes escriben en este espacio que lo dirijan a la clase media opositora y de manera auto-critica a la media clase que vive de Chávez, mientras el Comandante se desvive por ella.

Venezuela, Dijo Fidel a propósito de un resultado electoral “no tiene 4 millones de clase media” sino un puñado de loquitos (agregado del Dígalo Ahí), que por andar como siameses con aquellos terminaron creyéndose de la misma clase.

De acá, que las opiniones, reflexiones y mensajes deban estar dirigidos a los sectores disociados de la oposición; A estos locos con clase se les puede curar su anti-chavismo, sin necesidad de prohibirles que vean Globo visión, VeneVision, Tele ven Dat-Tv, Promor etc., o que dejen de oír a la Colomina, ni mucho menos prohibirles que lean los periódicos de Tal-Cual hijoeputa.

Basta con utilizar un lenguaje escrito y explicito como el de Mario Silva y Amorin en la “HOJILLA”, para que esta pobre gente reflexione y deje de pararle a esa minoría de la burguesía venezolana que los tiene locos.

Son muchos los tratamientos que podemos aplicar para que estos loquitos se bajen de esa nube de creerse de clase alta, cuando en realidad son tan pobres y locos como aquellos que no llegamos ni a media clase.

El objetivo es persuadirlos de que no se crean lo que se creen, ni hagan caso a los que siendo lo que son, les hacen creer, en lo que no son.

“Michel Foucault, cuenta un caso que sirve como ejemplo. En una casa de salud había un loco que se creía muerto; por lo tanto se negaba a tomar alimentos. Los médicos temiendo por la vida del enfermo, decidieron seguirlo en el delirio. Introdujeron en la habitación del loco a varias personas vestidas con mortajas y convenientemente maquilladas para que parecieran muertas. Prepararon una mesa con comida y comenzaron a disfrutar de los manjares. Él loco los miraba famélico. Los comensales se mostraban sorprendidos de que el loco permaneciera en la cama y lo persuadieron de que los muertos comen, por lo menos, tanto como los vivos. El loco entro en el juego y acepto comer”

Los aporreistas debemos escribirles a estos locos que se creen de la alta burguesía hasta convencerlos de dos cosas a saber:

Uno.-Que no es Chávez el que los tiene locos sino que ellos están locos por Chávez.

Dos.- Que se necesita estar bien loco para querer salir de Chávez.

Hermes Escalona Acuña

Periódico alternativo DIGALO AHI

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Hermes Escalona

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