El enemigo es experto en desviar la atención hacia los temas que le convienen, para tratar de neutralizar las ofensivas del pueblo en defensa de la revolución.
No es casual que luego de la gran movilización del pueblo venezolano en defensa de la revolución, el enemigo se dedique a mutilar imágenes religiosas para echarnos la culpa.
Yo lamento que nuestros diputados hayan caído en la trampa de discutir ese tema, en vez de proponer otro escenario distinto como por ejemplo las plazas bolívar de cada pueblo.
No es que no sea importante pronunciarse al respecto y condenar esa barbaridad pero, dejar que el enemigo se posicione del foro, es otra cosa.
Espero que eso se corrija porque de lo contrario, la MUD se va a salir con la suya y cada vez que el pueblo se movilice, ellos van a maniobrar para poner sobre el tapete otra discusión.
No olvidemos que detrás de la MUD está una mesa de guerra sucia que dicta la agenda y esta vez ellos tuvieron éxito. Crearon una situación muy sensible y lograron desviar el debate hacia su terreno.
La verdad de los altares está contaminada pero la imaginería popular es otra cosa que debe respetarse y con eso no se juega. Esta vez, nuestros diputados adolecieron de astucia para darles una buena patada en el culo a la oposición tracalera.
Soto Rojas debe saber que la MUD solo juega con los naipes marcados.
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