Todo está calculado desde siempre, para derrotar de antemano cualquier esfuerzo normal que nosotros podamos desarrollar en las presentes circunstancias, por conseguir una convivencia digna de confianza verdaderamente amistosa con la oposición.

También frustra todo esfuerzo que podamos desplegar por persuadir a la oposición de que no está justificada su opinión despectiva de nosotros. A sus ojos nuestro carácter social no se define por lo que hacemos; esta definido ideológicamente hace ya mucho tiempo y para siempre, hagamos lo que hagamos, mientras no sea rendirnos al capitalismo, para medios como Globovisión será un fracaso porque ya fracasó antes el socialismo, lo repiten una y otra vez intelectuales atrasados y domesticados. Para esta ideología seremos comunistas y terroristas, pertenecemos al campo designados por estas palabras.

Y aquí es donde entra la revolución, lo mejor que podemos hacer es ajustar nuestra política a nuestras creencias revolucionarias sobre la vida de la mujer y del hombre en este mundo, y no moldearlas o disfrazarlas con la esperanza de que podamos persuadir a la oligarquía a dar crédito a nuestras buenas intenciones de la igualdad social. La opción revolucionaria es una opción socialista.

Los revolucionarios no queremos bajar a la tumba, la oposición no quiere bajar a la tumba ¿Qué hay que hacer? Empujarlos a la tumba. Basta ya de medias tintas en las resoluciones tomadas como en el caso de RCTV y otros medios, con la oposición. llevamos 2 años de orgía verbal por RCTV o Globovisión.

Hace dos meses se sugería dialogar con la oposición, la misma que usando los medios de comunicación proponen una política de concesiones incesantes sin que ellos a su vez hagan alguna. La oposición y sus medios le apuestan a la salida de Chávez para que esta ausencia destruya la revolución en Venezuela y Latinoamérica. Cuento más viejo que el saludo, pero siempre vigente, utilizando diversas estrategias con grupos de poder económico aliados de los medios, dentro y fuera del país, con el respaldo de la OEA, SIP, CIDH, ONG y la ONU.

Sin embargo seria un error por nuestra parte, considerar que el presidente Chávez domine por la fuerza a sus adversarios políticos que no solo están en la oposición, me refiero a las estructuras políticas y públicas que no realizan su trabajo. La atención del mundo esta fija en Venezuela de por si, eso es un problema publicitario, ya que todos los medios al servicio del capitalismo están adiestrados en hacer politiquería dándonos siempre una interpretación marxista comunista y culpando a las revoluciones de todos los males.

Por décadas, los gobiernos capitalistas se apropiaron de los medios de comunicación su cuarta arma, igual que el Internet para manipular la desilusión que siguió al derrumbe de la ex URSS, los resentimientos y esperanzas de las naciones socialistas, la frustración de la crisis, la confianza concedida al proceso bolivariano, la inquietud de la gente joven en una época en que la rapidez de los cambios abren una esperanza al socialismo, y la fuerza verbal de interlocutores extranjeros tanto en las naciones industrializadas como en países en vías de desarrollo ayudando a concientizar y desestabilizar a la gente.

Los medios han promovido sediciones, reducido la libertad en todas las naciones progresistas, han influido la relajación emocional generando confusión, distinción de los medios comunicacionales de la extrema derecha en el momento en que la lucha unida por la independencia se extiende, pretenden conspirar proponiendo malestar para la división total de la sociedad, Globovisión esta preparada para el cierre, ya no hay dudas de su propósito, es posible que el canal este negociado desde hace rato como estrategia para una fomentar una contrarrevolución.

Pero lo mas dramático para el proceso es contar con la tolerancia revolucionaria. Increíble, por parte del gobierno que tratan de derribar. Sus métodos conspiran, y su propensión a crear malestar gracias a esas largas oportunidades para explotar no solo los descontentos y los antagonismos, también las esperanzas, los idealismos y la confiada decencia del pueblo revolucionario, imponiendo por la fuerza noticias tergiversadas a sus clientes y a la sociedad. A pesar que el capitalismo es el fracaso globalizado más grande en la historia de la humanidad.

Este es el hecho que, los medios al servicio del capitalismo imperial deben ocultar constantemente, su defensa por una clase minúscula acostumbrada a la explotación. Por eso no desechemos la opción de que Globovisión ya este negociada para promover una contrarrevolución apoyada por la OEA y todas sus dependencias alquiladas por Washington, cada una con resoluciones de derechos humanos y políticos avalados por el gobierno de Obama y su títere la ONU.

Bastaría que Washington desconozca al gobierno de Chávez, para preparar una defensa armada donde se haga realidad lo de socialismo o muerte, pasando por embargos, amenazas de invasión y toda esa cantaleta imperial.

Venceremos. Patria socialista o muerte.

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