La suerte de los venezolanos con programas de televisión como La Hojilla, Dando y Dando, Como ustedes pueden ver, El Kiosco Veraz i otros que desnudan bacalaos i escuálidos

“Quien nos hace reír es un cómico,

quien nos hace pensar y luego reír,

es un humorista”

Georg P. Burns



Todos los grandes hombres i pensadores de la humanidad, desde Platón, pasando por Kant, Anatole France o Bernard Shaw, para citar poquísimos, han tenido el humor, como muestra de una gran inteligencia i comprensión de la vida i de la historia. Las anécdotas abundan, de esa picardía creativa o genial i cuando se hace un chiste, de calidad intelectual, no las vulgaridades comunes, el entendimiento entre contendores pierde agresividad i pone felicidad en la existencia. En estos 7 años de gobierno revolucionario bolivariano, la oposición –que no es oposición política ni intelectual, sino furia i deseos de venganza de los desplazados del poder i los privilegios- no tienen ni siquiera vestigios de humor con el cual matizar sus mentiras, estupideces e insultos; pero proporcionan sí, abundante material para divertirnos, refutando sus idioteces, con una dosis estupenda de rechazo que, por tratarse de estupideces, se les combate siempre con excelente humor. Ya no puedo dejar de dedicarme a saber día i hora de esos programas. Aunque trabajo bastante de noche hasta la madrugada, siempre interrumpo unas horas para ver LA HOJILLA, porque no solamente me informa verazmente, sino que aprendo mucho de historia patria i me divierto de verdad, cuando hace ver el ridículo de basuras como Miguelito Rodríguez –el lame suela del Chulo Granier-, ese engendro de carne i confusión mental insultante, como es la Bicha; o los cientos de disociados como Ledezma, Enrique Mendoza, Roberto Giusti, Kiko, Carlos Fernándes, Carla Angola, Nitu Pérez Osuna i en fin, las brujas de la televisión, incluyendo a una pretendida “astróloga” que piensa en estupideces i quiere predecir el futuro, siendo sencillamente una farsante. Aclaro que a ellos no los veo (como en Maracaibo a D’Arienzo i Juan Carlos Fernández) sino en los videos que proyectan los programas nombrados. En Maracaibo, veo a estos dos energúmenos en videos en LA RED. Entrar a sus programas, es recibir basura televisiva.



Mario Silva, Alberto Nolia i su compañera la seria i excelente periodista A.Díaz, los formidables Roberto Hernández Montoya i Roberto Malaver i el gran periodista, constituyente i diputado Earle Herrera (cuyos libros leo hace años) i otros programas de opinión, (i con colaboradores como Escarrá, Eva Golinger, Aranguibel, etc.) bastan para acabar, ridiculizar i rechazar junto con el pueblo venezolano, todos los movimientos conspirativos, disociadores, ridículos e irrealizables intentos de la oposición que no tiene una sola idea, sino salir de Chávez, mientras la evolución del país, i su progreso en todos los sentidos, realmente los tiene locos, porque desprecian la patria i a su pueblo, ahora un pueblo distinto i maravilloso. I no faltan los estúpidos del exterior, como ese supuesto grafólogo que piensa que un hombre de 80 años, no puede firmar como lo hace Fidel Castro. Conozco i he conocido muchas personas de edades más avanzadas que no solamente firman sino que pintan, dibujan, tienen oficios finos como de relojeros, etc., cuyos trazos al escribir son firmes i elegantes, yo entre ellos. Tengo 77 años i no solamente mi firma a todo el que me ve autografiar un libro o firmar un documento, o jóvenes que señalan la supuesta belleza, calidad i rapidez de mi firma, sino que hombres como el rector que me graduó de médico, el Dr. José Hernández D’Empaire (muerto a los 96 años), los pintores Tomás Golding, Luis Alfredo López Méndez, Vitaliano Rossi, (mis grandes amigos) o mi hermano Armando muerto a los 84 años, son ejemplos que conozco de haber firmado igual que cuando jóvenes, hasta los últimos años o días de su vida. Este señor, puede haber estudiado grafología, pero lamentablemente es bruto o vendido. Si hubiese sido quien escribe, un delincuente, habría tenido éxito, pues puedo hacer la firma de cualquiera, con pocos intentos i entre ellas hago exactamente igual i una vez lo hice en televisión, la firma del Libertador Simón Bolívar; también la del presidente Chávez o las que me proponga hacer. Parece que escuálidos o tarados hai hasta en las más escasa o extrañas profesiones.

Por estas consideraciones es por lo cual, programas como los citados tienen tanto éxito. Primero porque cada refutación que hacen a las mentiras estúpidas que “inventa” la oposición, son contundentes, pulverizan las falsedades, entierran a los embusteros, sino porque al mismo tiempo hai una ironía fina, un humorismo de altura, una oportunidad de causar buen humor o risa que, creo que necesitan cada día de las burradas llenas de odio que hacen los periodistas lacayos de sus amos, e indirectamente del imperio. Por ejemplo, Mario Silva se divierte con la mayúscula estupidez que seguro no salió del pueblo sino de un “intelectual de oposición” de penar que el cambio de bombillos de luz fría, era para poner micrófonos i cámaras en las casas de los barrios, para espiar ¿Espiar qué? ¿En cual centro receptor de información, se puede estar escuchando o viendo millones de hogares “socialistas” todo el tiempo? I si es con periódicos, revistas, libros, etc., que la “ofensiva de oposición” quiere taladrar o derrumbar la “idealización chavista”, con una serenidad o un toque de decente burla, Earle Herrera, magnífico periodista, constituyente, diputado i humorista (de los que hacen pensar i luego reír) en su Kiosco Veraz, a veces con participación de un hombre serio de verdad pero sabe transformarse en humorista como el abogado Aranguibel, no solamente descubren las ridiculeces de los opositores escuálidos i radicales, sino que sus respuestas a bravuconadas o disparates, son definitivas. Me divertí mucho cuando Aranguibel hacía de partidario de la mediocridad i brutalidad del candidato opositor a Chávez, creía seguir teniendo vigencia en la política nacional, i lucía la franela negra con la palabra fraude.

Del mismo modo disfruto del programa Dando y Dando, cuando ese simpático i formidable periodista Alberto Nolia i su acompañante la periodista Díaz, refutan los hechos, las acusaciones i los disparates ¡Porque siempre hai disparates! de la oposición; razonando i golpeando con fuerza i decencia, a los hechos que comentan. A Nolia lo escucho igualmente en Los Papeles de Mandinga, i dejo para el final de este artículo a mis tocayos, Roberto Hernández Montoya i Roberto Malaver, a quienes leo en APORREA i en Panorama, porque ellos sencillamente son dos intelectuales que tienen la certeza humorística de criticar con especial gracia, humor, fortaleza didáctica, talento de verdad, a tanto falso intelectual que hai en la oposición, i a los verdaderos intelectuales que han perdido la sindéresis, han olvidado los conocimientos i se han extraviado en los caminos de la historia universal i la historia de Venezuela, no sabemos si porque la edad empieza a jugar con el Alzheimer o porque los billetes verdes son irresistibles, cuando se van alejando las fuentes de trabajo o económicas con el paso de los años. Como ustedes pueden ver, es para mí, un programa delicioso, orientador i del humor de más categoría. No tengo que hacer citas de lo que en ese espacio encuentro, porque aunque ellos están en el menos del 2% que los escuálidos daban a VTV i cada vez los “saca del aire” Enrique Mendoza con su recogedor de basura, creo que son muchísimos los venezolanos que no se pierden de la mejor “página” de humor de altura de nuestra televisión. Todos estos programas, incluyendo también a La Réplica, con el escritor Néstor Francia –humorista también- i su compañera Padrón, programa cuyo horario los sábados no me permite verlos sino de vez en cuando, nos mantienen al día de la auténtica realidad del país en todos sus aspectos, comunicándonos valiosa i veraz información, en forma divertida i amena.

robertojjm@hotmail.com





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Roberto Jiménez Maggiolo


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