Silencio cómplice y bullas clandestinas

"Uno busca lleno de esperanza el camino que los sueños prometieron a sus ansías.

Sabe que la lucha es cruel y es mucha pero lucha y se desangra por la fe que lo empecina.

Uno va arrastrándose entre espinas y en su afán de dar su amor, sufre y se destroza hasta entender que uno se ha quedao sin corazón.

Precio de castigo que uno entrega por un beso que no llega un amor que lo engañó.

Vacío ya de amar y de llorar tanta traición"… (Enrique Santos Discépolo)



Hoy recuerdo con mucha tristeza y emoción -porque hasta me dan ganas de llorar- aquellas conversaciones al lado de mi padre, mi madre, mis abuelos y mis tíos…y mi coñazo de hermanos…cuando se ponían a recordar sus viejos tiempos por allá en los años finales de los 60, y recuerdo como solian rodar algunos lagrimones por aquellos rostros, que para ellos no eran tan viejos, como para mí, niño aun, esos rostros representaban toda una vasta experiencia vivida, es decir, ya estaban demasiados viejos para mi gusto, pero esos adolecentes de entonces, hoy algunos ya convertidos en cadáveres, siempre decían una frase, que pienso que era la que estaba de moda para esos tiempos: "LA VIDA ES UN TANGO".

Y pareciera que los vientos de esos tiempos han arrastrado muchos pantanos para estos tiempos, en donde los de entonces ya no somos los mismos, y en donde pareciera que la complicidad por parecer lo que no eres, es la estrategia con mas prestancia en los momentos, es decir, hacerte y presentarte como un traidor, es la moda del momento.

Hay recuerdos que muchas veces es preferible olvidar por los dolores que causan, y momentos en que los recuerdos suelen dejar huellas mucho más profundas que el mismo hecho como tal; y de esos recuerdos que dejan huellas imborrables en unos el que más me dejó cicatrices fue el de ALBERTO LOVERA, cuando yo contaba con seis (6) años de edad y a esa edad ya uno forma parte de lo que me ha dado por llamar la GENERACION ESPONJA, y es que a esa edad todas las cosas las absorbemos, pero gracias a dios que de esas absorciones de conocimientos y de posibles tantas ARRECHERAS reprimidas, que para entonces no sabía cómo llamarlas, ni que nombre darles, han aflorado en mi ser más las nobles, como lo son el amor a mis padres y a la PATRIA, y pienso que eso me ha llevado a lo que he sido, soy y seguiré siendo; un rebelde fiel y leal a lo que considero que es lo justo y CHÁVEZ es el camino, CHÁVEZ es la razón, sin CHÁVEZ no habrá PATRIA ni REVOLUCIÓN.

Luego entonces pienso y me digo… ¿Por qué no se aplica el artículo 120 del código penal?...estas personas de la oposición, al menos los mas jóvenes, no saben de las cosas que hicieron sus progenitores en el pasado, por lo tanto, llamar a este gobierno dictadura, no es más que un mero formalismo de actuación y de desconocimiento de las causas que los mueven a decir estupideces, y por eso lo que ellos proclaman en una BULLA CLANDESTINA de insurrección, lo ocultan con un SILENCIO COMPLICE los que en el pasado, torturaban y mataban a sus adversarios políticos, es decir, están extrapolando acciones de represión de su pasado reciente, para presentarlos como acciones ejecutadas por este proceso de cambios profundos, pero nuestro mayor problema es que se lo estamos permitiendo, sin que los dirigentes y los encargados de contar nuestras realidades en esta revolución se hacen cómplices silenciosos de las traiciones, que en ese pasado del cual están acusando a este gobierno, se pagaba con la vida, es decir, por lo que murieron muchos valientes, hoy lo gritan clandestinamente los vástagos de la traición y permanecen sin castigo y a eso ello le llaman valor. ¡Morderán el polvo! De la derrota en la batalla por el honor de los mártires caídos y HUGO RAFAEL CHÁVEZ FRIAS será el guía de la victoria final.

Hasta la victoria; siempre

CHÁVEZ, SOCIALISMO O MUERTE

¡VENCEREMOS!

cabacote@gmail.com


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Jesús (Chúa) Espinoza


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