"La experiencia es la enfermedad

que ofrece el menor peligro de contagio"

Oliverio Girondo

El mundo se encuentra prácticamente contra la pared, acosado por la pandemia; lamentablemente tiene en Donald Trump su bocón mayor, quien lejos de aportar en la solución, lo que ha hecho es asumir las riendas de regar tantas falsedades que, al menor soplido se caen totalmente desmentidas, no quedándole otra, recurrir nuevamente al aparato mediático para seguir inventando y de esta manera continuar pescando incautos, y otros no tan cándidos, pero le sirven, como títeres en esta lucha de la información. Sin embargo, al no tener la razón, siempre se van estrellando contra la verdad; como es el caso de la amenazante pandemia, presente en el mínimo rincón del planeta, y en el cual supuestamente los EE. UU, debería tener la experiencia y recursos para enfrentarla.

En las últimas horas, se ha presentado lo que podemos llamar el estado de alarma, antes el recrudecimiento de este terrible mal en algunos de los países más industrializados del mundo. En los Estados Unidos, el jefe de gabinete del Presidente estadounidense Donald Trump, Mark Meadows, durante una entrevista con la cadena CNN, salió, como se dice en la jerga criolla: con la bandera blanca en alto, cuando declaró: "No vamos a controlar la pandemia, vamos a controlar el hecho de que consigamos vacunas, terapias y otras formas de mitigarla" Es decir, están tirando la toalla antes la escandalosa cifra de contagios; solamente el viernes 23 pasaron de 85 mil, lo que provocó la reacción del candidato a la relección Donald Trump, tan fuera de foco, como uno de sus antecesores George W. Bush, en los tristes días de sus periodos de gobierno; al considerar estúpido seguir haciendo tantos test de COVID-19, porque eso le da a los medios de comunicación para hablar antes la cercanía de las elecciones

La sirena la encendió la canciller alemana Angela Merkel, cuando al comenzar una conferencia advirtió ¡Nos esperan meses muy, muy difíciles! Para más adelante recalcar: "Mi convicción fundamental no ha cambiado, sólo que hoy me resulta aún más urgente: no somos impotentes ante el virus, nuestro comportamiento decide cuánto y cuán rápido se propaga. Y lo que tenemos que hacer ahora todos es reducir contactos. Reunirnos con mucha menos gente"

El mayor número de contagios recae en los últimos días en los países antes mencionados, además encontramos: Francia, Inglaterra, Italia, Rusia, Brasil y España, con cifras muy altas de muertos y sin ninguna esperanza de aminorar en los próximos meses, como lo dejan ver las declaraciones de los representantes y responsables directos de Estados Unidos y Alemania. Todo deja ver, lo equivocado que estaban los derechistas y desquiciados mandatarios del Brasil y EUA, cuando uno pronosticó alegremente una simple gripecita, y por el otro lado su guía, llamó a no pararle, como quien dice (bolas) al asunto, despreciando el único recurso disponible en el momento–práctico– el tapabocas.

Antes esta realidad y experiencia vivida, en parte despreciada y por la otra difícil de enfrentar por parte de países capitalistas, donde el poder del dinero es lo primero, Venezuela se encuentra batallando en medio de un asedio permanente, bloqueada, amenazada y de paso con una oposición, a pesar de encontrarse seriamente golpeada y en permanente huida no deja de arremeter y de utilizar los descalificativos que se les antoja contra el Presidente Nicolás Maduro, quien sigue demostrando la capacidad y valentía para resistir y conducir a un pueblo amplio y generoso, constantemente bombardeado por cuanto medio se presta a esto fines. No por simple casualidad un amigo, cuando le hablé del peligro del COVID–19 me salió con una respuesta muy despreciativa y cargada de odio ¡Eso, es pura paja de Maduro! hace poco me lo conseguí y con verle el rostro me imaginé, que no andaba bien; la pandemia se ha llevado dos de sus familiares, entre ellos un hermano. Lo único que hice fue darle el pésame y callar, su reacción fue de una persona resignada y equivocada. Esta experiencia nos dice: ¡ACATAMOS LAS RECOMENDACIONES O LA PANDEMIA NOS ATRAPA!