Mi palabra

La vanguardia roja tocada por el Covid–19, la opositora desaparecida

"La adversidad vuelve sabio al hombre"

Séneca

Desde el inicio de este proceso revolucionario (el 2 de febrero de 1999) los ataques no han cesado un instante, y en medio de esa adversidad las fuerzas del pueblo han salido avante, con una vanguardia siempre presente con la moral y la dignidad en alto, empezando por el Comandante Hugo Chávez, y ahora Nicolás Maduro, quienes han enseñado el camino sin desmayar un instante haciendo lo posible e imposible por apartar los obstáculos puestos por una oposición sin ningún sentido de patria.

Ese peligroso vericueto sigue existiendo, pero entre más dificultades presenta, sirve para aprender a luchar y renovar el amor a la patria, siguiendo el ejemplo decoroso, dejado, como herencia por el Libertador Simón Bolívar, quien, antes cualquier traición la enfrentó con gallardía para dejar un mensaje, como prueba inequívoca de su sapiencia aprendida en el mismo combate diario por la libertad: " A mis enemigos los combato, desde lejos con mi pluma, y de cerca con mi espada" Su vida fue muy corta, pero en medio de una grandeza imborrable, a pesar de los nuevos detractores.

Todo el que se lanza a desafiar el peligro, que significa enfrentar el capitalismo, y más aún el imperialismo en sus nuevas mutaciones, debe tener conciencia del escabroso recorrido, muchas veces sin retorno; por eso la vanguardia de un movimiento por la liberación, siempre se lleva los primeros tropezones, marcando una abismal diferencia entre los que aparentan jugar ese papel en la oposición, como la que hace vida en nuestro país, bajo un libreto previamente diseñado por el imperialismo, al ser atraídos por los dólares, cumpliendo su triste papel de mercenarios o mensajeros tarifados con la vergüenza en la suela de los calzados.

¿Dónde están los dirigentes de la oposición? La respuesta se la oí a un preocupado señor, en una cola para aprovisionar el vehículo de gasolina ¡Aquí no hay oposición! Esto es tan cierto, como su sinceridad al hablar. La oposición en Venezuela es Trump, y sus títeres, porque ni siquiera el autoproclamado da señales de respirar en algún sitio del país; todo quedó en las redes sociales –Twitter– y no es raro que termine ahogado en el gorjeo del pajarito enjaulado; a todo pillo y traidor la justicia lo atrapa en el momento, que más conviene.

Lo que nadie puede negar, es la presencia de la vanguardia revolucionaria en el más apartado rincón del país. Diosdado, Tareck El Aissami, Darío Vivas, Omar Prieto, Carolys Hernández, Gerardo Márquez, Fidel Madroñero y hace pocas horas el gobernador de Miranda, Héctor Rodríguez, anunció haber dado positivo al coronavirus. Todos se encuentran enfrentando un nuevo peligro, precisamente por estar al lado del pueblo, ejerciendo su verdadera función de dirigente comprometido con el destino del país, formando parte de la aguerrida VANGUARDIA. A todas esas adversidades se enfrentan los que luchan por una causa tan noble, como es ver libre a la patria de las garras del imperialismo. Pronto los veremos en su trinchera de combate, porque los revolucionarios de verdad, no se amilanan, ni siquiera en los momentos de mayor dificultad; y así, como le pido a mi gran amigo Jesús de Nazaret, cuidar y proteger a los opositores, es lógico que pida por la salud de este grupo de valientes patriotas, antes un momento inesperado producto de una pandemia, el cual asecha a la humanidad.

¡QUEDATE EN LA CASA! ¡USA EL TAPABOCA, EL ÚNICO SALVAVIDA POR LOS MOMENTOS!



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Narciso Torrealba


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