La Tecla Fértil

La paraninfia de los utilitis en las redes sociales, somos ignorantes de nuestra verdad

Cervantes hizo del licenciado Vidriera la expresión del delirio psicótico del que teme hacerse añicos, del que teme perder su integridad física. Así Venezuela, acusa la enfermedad del vidrio, que no es otra cosa que el temor a la fragmentación. La fragmentación territorial, la emocional y la fragmentación de partidos. Y así también nos comportamos en nuestra política exterior, como el rey Carlos VI de Alemania, que fue presa de esta enfermedad y que, en sus brotes paranoicos, se acurrucaba en un rincón por creerse de vidrio. Es el rincón de los frágiles, el rincón de la historia.

Frágiles porque el miedo paralizante ha congelado la acción de los gobiernos para ser sustituida por una oferta paupérrima de teatralidad para pazguatos. Frágiles porque la vacuidad y la mentecatada intelectual han enterrado la tracción transformadora de la política. Frágiles porque el narcisismo ha pateado el trasero de la reflexión y del pensamiento crítico. Condenado como estoy al fuego fatuo de los adoradores de las citas de hoja parroquial, y sin propósito de contrición, fue Clemenceau quien advirtió que "en una revolución lo más difícil es salvar la porcelana". Porque es lo primero que se rompe.

En mis artículos, trato de ser directo, sin ofender la militancia de los ciudadanos, solo he tratado de explicar de una manera sencilla que a Juan Guaido le falto fuerza moral para declarar ante Norteamérica el estado de sitio para Venezuela, eso de amagar nunca lo he visto bien, se debe aplicar ruptura de una sola vez. Esto me lo enseñaron los norteamericanos de Alianza para el Progreso en 1975, en el Polideportivo Misael Delgado de la Ciudad de Valencia, Edo Carabobo, cuando estudiaba en la Universidad de Carabobo. De perder un segundo, el grupo contrario se rearma y ocasiona desgaste, como violaciones de los Derechos Humanos. Ahora, mucho más que se encuentra en la Coordinación de Derechos Humanos, la médica Michelle Bachelet.

La quiebra de las expectativas de cientos de miles de personas, confusas ante la complejidad de una crisis de la que no se sentían responsables y, que sin embargo estaban pagando en desempleo y precariedad, fue condición necesaria para la irrupción del Psuv y el Polo Patriótico a lomos de una calculada estrategia mediática que simplificaba las soluciones y repartía las culpas a gusto del espectador indignado, echándole la culpa a sus otros aliados de la vieja Coordinadora Democrática, MUD y el viejo partido pro clasista religiosa, Organización Renovadora Autentica.

La ensayada telegenia y un manejo invasivo de las redes sociales pronto configuraron una fuerza populista de izquierda radical que proponía partir a la sociedad en dos, enfrentando una casta extractiva a un pueblo sufriente que solo podía encontrar genuina representación en la retórica justiciera precisamente del dirigente de Voluntad Popular Juan Guaidó. Seleccionado en este año para dirigir la Asamblea Nacional y quien fue proclamado presidente interino de Venezuela, ejerciendo dos cargos ejecutivos en un solo emisor legislativo.

Connatel aprovechó la oportunidad de que voceros de la oposición sin revisar las informaciones dadas atacaban a ciudadanos de la misma oposición, fdortaleciendo al Sr. Nicolás Maduro Moros, quien ganó las elecciones presidenciales del país ante un pírrico universo de votos, dejando atrás las constantes violaciones y ataques a grupos de venezolanos por parte de cuerpos de seguridad del Estado Venezolano, que, incluye a nuestros indígenas, donde las facciones y corporaciones vienen logrando sus propósitos de alejarlos de su territorio, cedidos por la naturaleza de Dios y en años anteriores confirmados por el fallecido militar, que rigió los destinos venezolanos, Hugo Chávez Frías. Por decir estas notas, confirmadas en el archivo de la nación, cualquier ciudadano se atreve a expresar que como periodistas no podemos expresarnos señalando la verdad y, se nos acusa pertenecer a un cuerpo cubano de seguridad, personajes que en su mediocridad no solo exponen a los autores de dichos artículos, sino al peligro de sí mismos, que olvidan el estricto control que se tiene sobre los medios de comunicación social y las redes sociales. Facebook tiene nuestros registros personales y el Estado Bolivariano tiene copia de ese control que es monitoreada a cada momento y en cada diario nacional hay dos censores de noticias, uno representando a la izquierda y otro a la derecha.

La otra parte de las redes sociales es controlada por medios comunistas, es decir la torta es repartida, y los lectores de las redes sociales siguen la puntilla ante una noticia falsa y le es fácil colocar G2 para dañar, pero, olvidan que el Arco Minero esta representado por empresas multinacionales norteamericanas, asiáticas y chinas, donde ya las perforaciones están a menos de un kilómetro del Salto Ángel, donde hay mucha riqueza minera. Y donde nuestros indios Pemones se encuentran aterrorizados, porque su etnia esta siendo mutilada y cercenada de raíz.

Entonces, me pregunto, ¿Quién es verdaderamente del G2?. De verdad, cuanta ignorancia tenemos los venezolanos de Venezuela.

En una oportunidad, estando de permiso en el liceo Guacara Nocturno de Ciudad Alianza, se presento una comisión de profesores con el cargo de supervisores de la zona educativa, allí tenia ocho horas de clase y ese martes me allegue al IPAS- ME, cuando el director le pidió a los alumnos mi programa de Historia de Venezuela se encontraron que habían anexos sobre la Globalización. Es decir, mis alumnos estaban actualizados sobre la realidad y verdad de Venezuela, luego, el jefe de la Zona Educativa me mando a llamar para felicitarme, el caso es que mis clases, tanto en la Universidad en la Catedra de Ciencias Políticas como el de mis alumnos del Ciclo Diversificado eran la misma, o tenían casi el mismo componente. De allí, me enviaron a especializarme en Investigación Jurídica a través del Instituto Latinoamericano de Investigaciones Jurídicas de la Facultad de Derecho, donde estudié tres años y, entre mis profesores conté con dos premios nobel, Adolfo Pérez Esquivel y Mario Vargas Llosa.

Entonces, no soy yoista por exponer esto, simplemente me alarmo como se difama por las redes sociales y la gente sigue la seguidilla, de verdad, me avergüenza la conciencia política del venezolano y esto ha atrasado todo y la pérdida de los objetivos, con la muerte de nuestros jóvenes.

Sigan pensando y juzgando que los venezolanos, somos del G2. Solo aspiro el respeto por el país y la democracia.



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Emiro Vera Suárez

Profesor en Ciencias Políticas. Orientador Escolar y Filósofo. Especialista en Semántica del Lenguaje jurídico. Escritor. Miembro activo de la Asociación de Escritores del Estado Carabobo. AESCA. Trabajó en los diarios Espectador, Tribuna Popular de Puerto Cabello, y La Calle como coordinador de cultura. ex columnista del Aragüeño

 emvesua@gmail.com

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