Desde 1999 se ha puesto de moda el término apátrida, el Presidente Chávez lo puso en la palestra pública al denunciar todas las políticas entreguistas de la llamada Cuarta República, en la cual literalmente había regalado el País a la Oligarquía de los Estados Unidos de América. No obstante es menester revisar la terminología para ver si existen o no, si es una ucronía o simplemente habladurías que no sirven para alimentar a los herbívoros (paja de la mala).
Apátrida: se dice de la persona que no tiene patria, por carecer de nacionalidad legal o por tener unas ideas internacionalistas. Dicho de una Persona que no tiene nacionalidad. (Definición del Larousse y de la Real Academia Española).
Con esta definición entonces habría dos supuestos de hecho, el primero que legalmente no tengas una nacionalidad y esto no es algo descabellado, una vez conocí un apátrida por allí en el año 2000 en el entonces Centro de Reeducación y Trabajo Artesanal El Paraíso, Cárcel de la Planta, estaba empezando a estudiar derecho en la Universidad Católica Andrés Bello y hacía trabajo voluntario, era un reo nacido en Montenegro, de etnia albano-kosovar y acababa la OTAN de bombardear a la otrora Yugoslavia y “balcanizó”-valga la redundancia- toda aquella región que convivía en sana paz; recuerdo la cara de aquella pobre víctima del narcotráfico y la guerra, cuando le di la noticia que su país había sido anexado por Serbia.
El Pueblo Judío antes de 1948 eran un ejemplo vivo de un apátrida, por cuanto en ningún lugar de Europa los querían, es harto conocido el genocidio que hizo Alemania, pero muy pocos conocen el colaboracionismo de casi todos los gobiernos ocupados con aquella maquinaria de la muerte, es decir, millones de judíos franceses, belgas, holandeses, italianos, etc. fueron entregados a los nazis para que los incineraran en un fogón, sin contar la cantidad de pogromos habituales en aquellas latitudes “civilizadas”, representaciones de aquel drama lo vemos en el Violinista Sobre el Tejado.
Muchos pueblos son apátridas hoy en día, el Pueblo Kurdo, el Pueblo Catalán que implora por decidir en las urnas y no con el señor AK47 su independencia, el Pueblo Palestino que paradójicamente los oprobia el Estado de Israel desde aquella Al Nakbah de 1948.
En el segundo supuesto de hecho de la definición, está el que escoge no tener patria, por cuanto sus ideas no se lo permiten, es decir su visión internacionalista hace que una frontera o límite no sea impedimento para considerar a su vecino o al Mundo parte de su Patria, en este sentido podríamos decir que El Libertador Simón Bolívar murió apátrida, por cuanto su creación en Angostura, de Colombia la Grande, fue destruida por los oligarcas de la Nueva Granada y los traidores del Ejército Libertador encabezados por Páez. Deberían (el que no lo ha hecho por supuesto) leer el Diario de Bucaramanga, donde el General de Colombia Luis Perú Delacroix se voló la cabeza de un tiro en su Francia natal, por haber quedado apátrida, desgarrador aquel testamento.
Muchos que pelearon la Guerra Civil Española, quedaron sin Patria, George Orwell era inglés y peleó por la República, combatió el totalitarismo y al fascismo, así como muchos compatriotas hoy venezolanos que no soportaron el hambre y la humillación de una dictadura franquista, quedaron sin País, Venezuela los adoptó porque es una buena madre, ha tenido en su regazo a protestantes, católicos, judíos, musulmanes, maronitas, ortodoxos, espiritistas, santeros, ateos, gnósticos, entre otros muchos.
Ahora bien, se ha visto actitudes de algunos líderes opositores pidiendo una intervención extranjera en Venezuela, eso no es nuevo, el burgués Antonio Matos pidió unos reales prestados a los ingleses para derrocar a Cipriano Castro, lo cual fue una empresa fracasada, sin embargo este aprendiz de montonero al menos tuvo la decencia (a pesar de ir al campo de batalla con un parasol) de comandar, él mismo, un ejército bien apertrechado con fusiles de repetición y ametralladoras, cosa inimaginable con uno de estos niñitos mimados de la MUD que mandan a morir a niños y mendigos.
Los líderes opositores a pesar de su afinidad con los Estados Unidos de América, no comparten los ideales de esa gran nación, el americano –así es la nacionalidad oficial para no entrar en discusiones bizantinas- es independiente, individual, franco, etnocéntrico, patriota muchos llegan al chovinismo, entre otras atribuciones propias de una sociedad donde la gente trabaja y mucho, ningún muchacho y no tan muchacho de la MUD ha trabajado en su vida, sino pregúntenle a Ramos Allud que es el que tiene las manos más callosas de todos, de tanto prender el motor fundido.
El fin de esta oposición es entregar el País a grupos económicos internacionales, que les darán las sobras del festín llamado La República Bolivariana de Venezuela, en detrimento del Pueblo Venezolano legítimo dueño de esta tierra, lo que los hace apátrida por cuanto donde esté su dinero robado, birlado y cochino será su país.
