Maduro: ¡Despierta y reacciona!

El Presidente Maduro, a finales de 2014, nos llenaba de buenas expectativas, anunciándonos que: “El año 2015 será el año del cambio de la conciencia y modelo económico venezolano, será el año del gran cambio económico-productivo, la gran transformación de la economía”, indicaba el Presidente Maduro desde el Teatro de la Academia Militar, aquí en Caracas. La realidad ha sido, pasada ya la mitad del año, que este 2015, lo recordaremos como el de la desesperanza y el retorno de la era neoliberal hegemónica en la economía venezolana, ha sido un año de total retroceso de los grandes avances que impulsó nuestro Comandante Chávez en lo económico. La supremacía del sector privado en la economía, solo ha constreñido a los sectores populares a comprar lo necesario para su consumo alimentario; aquellos grandes logros, impulsados por nuestro Comandante Infinito, que permitieron a nuestro pueblo poder acceder a bienes inaccesibles antes de la llegada de la Revolución Bolivariana, como equipos electrodomésticos, equipos de computación, celulares, vehículos, entre otros; en estos dos últimos años, hemos sido testigos presenciales de cuán difícil es, para nuestro pueblo, poder acceder a los mismos, lo que viene resultando en una involución en el gran logro de nuestra Revolución: la Democratización del consumo de bienes básicos y esenciales para garantizarse un nivel de vida aceptable.

El imperialismo, cuando opta por la guerra económica, tenía bien claro el objetivo de borrar todo vestigio de mejora social, alcanzada en estos últimos quince años de Revolución Bolivariana. Tan claro estaban, que si le preguntáramos a nuestro pueblo sobre esa época dorada, muchísimos compatriotas no alcanzarían a recordar en qué los benefició nuestra Revolución, en cuánto de su vida actual, influyó ese proceso social de largo alcance impulsado por nuestro Comandante Hugo Chávez. Nefasta, ha sido la conducción económica del gabinete del Presidente Maduro en esa materia y eso, indudablemente, el pueblo castigará en su debida oportunidad, habida cuenta, la reticencia del camarada Maduro en dar un Golpe de Timón en esa vital materia. Peor aún, cuando el mismísimo Presidente Maduro, está consciente de lo errático que ha sido en esa materia: “No podemos excusarnos de la guerra económica, los errores que hemos cometido o que estemos cometiendo todavía (…) Tenemos que estar claros en la guerra que hay, y la estrategia es rectificar los errores de modelo, de gestión. Los errores de dirección que hemos tenido en importantes empresas, unidades productivas en el campo venezolano que están en manos de la Revolución Bolivariana. Y cuando digo esto, lo digo con absoluta responsabilidad y conocimiento detallado de qué estoy diciendo” (http://laiguana.tv/articulos/2916-las-declaraciones-del-presidente-maduro-sobre-errores-en-lucha-contra-guerra-economica-esto-admitio , 29-12-2014).

Desconocemos las causas que conllevan al camarada Presidente Maduro a literalmente: “sacarle el cuerpo” al tema económico, a no tomar decisiones radicales que permitan erradicar la guerra económica y, mientras ello no ocurre, acertadamente, la burguesía parasitaria ataca con mayor ferocidad al pueblo venezolano por la vía del incremento exponencial de los precios de vitales productos alimentarios y de saneamiento personal; tal el caso, de la carne que ya se cotiza en Bs 7.400,00 en algunas carnicería, sin pudor alguno. Semanas atrás, fuimos testigos de cómo la Procter & Gamble dolarizaba sus precios, a tal extremo, que la propia ministra de la mujer, camarada Gladys Requena, tuvo que pronunciarse en rechazo a la pretensión de dicha empresa de vender las toallas sanitarias post parto y tampones en un supuesto precio “justo”, que de justo no tenía nada, de 1340 y 1480 bolívares respectivamente. En la misma línea de ataque, no podía quedar por fuera Lorenzo Mendoza quien de inmediato se activó elevando su atún margarita con remarcajes de precios de 205 Bs la lata de 140 gramos y de Bs 255 la de 184 gramos, mientras reiteraba su exigencia de más dólares y menospreciaba la solicitud de sus trabajadores y trabajadoras de empresas Polar, por discutir su contrato colectivo. Mientras Mario en La Hojilla, hacía público el enorme gasto (Bs 7.200,00 millones) ejecutado por Mendoza, tan solo en este primer semestre del año, en función de proyectar su imagen como eventual candidato presidencial y, en contra del Gobierno Revolucionario del Presidente Maduro. Asimismo, el imperialismo reubicaba en naciones hermanas como Ecuador, Brasil y Bolivia, sus agentes de la derecha venezolana (Primero Justicia y Voluntad Popular) con suficientes dólares, para intentar desestabilizar y generar violencia en esas hermanas Repúblicas.

El panorama no es nada alentador, si de pronosticar los resultados de las parlamentarias de este año se trata. Siempre que tratamos de analizar situaciones análogas, recurrimos a lo ocurrido al pueblo del entonces Estado Bolivariano de Miranda. Era entonces gobernador, el camarada Diosdado Cabello, más de doscientas obras que seguramente hubieran beneficiado al pueblo mirandino no fueron ejecutadas con prontitud sino dejadas al último año de gobierno. Ese dejar, para el último año de gestión, esa obras, le permitió al hoy gobernador ausente de Miranda, Capriles Radonsky, llegar a la gobernación y hundir ese Estado en la mayor de las negligencias, pues, desde entonces se dedicó fue a viajar y viajar, a costilla del pueblo mirandino. Dejar decisiones trascendentes para una última oportunidad, para semanas antes del proceso electoral, es una decisión errónea y garrafal. Quienes asesoran al Presidente Maduro en esa misma línea, obvian que, de la rabia y el descontento contenido, solo devienen la desesperanza y la abstención de participar en los asuntos públicos, como bien lo refleja la última encuesta de Hinterlaces, hecha pública por José Vicente en su muy visto programa dominguero, que ubica en un 76 por ciento la intención de voto cuando meses atrás, lo ubicaba por encima del 80 por ciento. Y, la abstención no solo refleja descontento para un sector de la política nacional, sino para ambos que se disputan el liderazgo de nuestro pueblo; castigando más, como se demostró en el proceso electoral de la reforma, al sector revolucionario.

Retomar la política, pero en el ámbito de la economía, es la exigencia más urgente que reclama nuestro pueblo al Presidente Maduro. Retomar el sendero trazado por nuestro Comandante Chávez, para atacar las acechanzas imperialistas y sus agentes de la derecha y la burguesía parasitaria, sin otorgarles un tantico así de chiquito, de confianza por sus muy buenas intenciones que manifiesten tener, en la solución de los problemas que hoy aquejan nuestra economía. Medidas radicales reclamamos a nuestro Gobierno, que de cada ofensiva que lancen contra nuestro pueblo, se les arrebate en correspondencia, la cuota de poder que hayan alcanzado obtener en desmedro del poder popular. En épocas de ofensiva imperialista, a nivel del continente nuestro americano, debemos ser campeones en la solidaridad con el hermano Rafael Correa que hoy recibe los avatares de la contrarrevolución fascista en la patria ecuatoriana, como ayer la recibimos nosotros. La República Bolivariana de Venezuela, casada como está, en los ideales de hermandad y solidaridad que propugnaran nuestros padres libertadores: Simón Bolívar y Hugo Chávez, debe colocarse a la cabeza del estandarte solidario con el pueblo y gobierno ecuatoriano, encabezado por el hermano Rafael Correa. Ese intento de Golpe, no puede tener otro destino sino el que corrió en abril de 2002, febrero de 2014 y 2015 en nuestra Venezuela Bolivariana. La mayor muestra de solidaridad y hermandad que podemos darle al pueblo de Ecuador, no es otra sino la que nos recomendara Robert, con su verbo encendido y su trabajo constante por la Revolución Bolivariana: “Nuestra prioridad no es un cargo!, es hacer irreversible la revolución y los logros del pueblo”, esa debe ser la prioridad de nuestro Gobierno, camarada Maduro. Asuma, que no solo es el Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, sino que, también, es el líder de una Revolución en curso, Antiimperialista y Socialista…

 

Caracas, 21-06-2015



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Henry Escalante


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