El capitalismo, el socialismo, el cristianismo, la Política son creencias. Todos tenemos el derecho a tener, compartir y hasta defender nuestro sistema de creencias y nuestras creaciones.
El preámbulo de la Constitución Bolivariana de Venezuela dice: “El pueblo de Venezuela, en ejercicio de sus poderes creadores e invocando la protección de Dios…”; Nuestra Carta Magna parte de la idea que existe un Dios que protege; no dice soy de la religión tal o cual, invoca la protección de Dios.
Chávez quien se declaró Bolivariano, Robinsoniano, Zamorano y Cristiano, jamás dijo que la REVOLUCIÓN BOLIVARIANA (lean Revolución Bolivariana, no revolución marxista o leninista), fuese “atea”. El 13 de abril de 2002, crucifijo en mano Chávez perdonó y llamó a la conciliación. Durante su enfermedad Chávez expresó su “FE” en el Santo Cristo de la Grita, igualmente demostró su “FE”, en un santo no católico, pero si un Santo del Pueblo: José Gregorio Hernández. Quien en vida fue un excelente médico, atendía las dolencias de los pobres, dio clases universitarias, trajo el primer microscopio a Venezuela y ante todo fiel creyente en Dios.
Ahora montan un escándalo pues la Señora María Uribe, leyó un poema de su creación, titulado “Chávez Nuestro”, en alusión al “Padre Nuestro”; ¿Acaso Chávez no fue una figura paterna para muchos venezolanos?. Una frase que se escucha mucho es “Chávez le abrió los ojos al pueblo”, ¿abrir los ojos no es ver la luz, salir de la oscuridad?. Me gusta de ese “Chávez Nuestro”, que invoca no al pan, invoca la Luz, de Chávez, para no caer en la senda del capitalismo, que sería negar el pan o la arepa aunque estén en abundancia.
Yo me pregunto: ¿Los últimos 15 años, en cuál país vivieron los autodenominados “chavistas críticos” que ven socialdemócratas por todos lados?; ¿Se les olvida que la religión, para Marx, es “el suspiro de los oprimidos, el corazón de los descorazonados, el espíritu de los abatidos. La religión es el opio del pueblo”. ¿Por qué la Conferencia Episcopal Venezolana hace mutis por el foro las veces que Chávez es satanizado pública y privadamente por la dirigencia y la base opositora, cada vez que le dicen “el mandingo” o “el finado”?; ¿Según la CEV, es válido, satanizar a un hermano pero no reconocer su santidad?.
(*) La autora es licenciada en Ciencias Políticas y Magister en Psicología Social.