Permítanme ser tan concluyente en el título, para tratar el tema del aprovechamiento especulativo del crédito, de la divisa extranjera y el lavado de dinero negro, por los Bancos Privados, causantes también de la inflación y desabastecimientos, además de ser, el camino esmerilado para los corruptos.
Pensé titular el artículo, con la famosa frase que define al Banco Privado. La de Bertold Brecht “Es menos delito robar un Banco, que fundarlo”.
Pero me detuvo el recordar, que aunque esa frase es conocida por todo el mundo, no alcanzó a concientizar a los pueblos, sobre el rol de los Bancos Privados, en la sustentación del sistema Capitalista y su incidencia sobre los sufrimientos de la humanidad.
Estos, los Bancos Privados, que son la espina dorsal del sistema capitalista y que roban permanentemente al pueblo, distorsionan el uso del crédito, especulan con lo peor del sistema: las rentas parasitarias.
Influyen además, decididamente, en el desabastecimiento, la inflación y demás males actuales, de la economía Venezolana.
En una carta que le envié a Michael Moore, le relataba el dicho de un amigo : "depositar mi dinero en un banco privado, propiedad de otros ciudadanos iguales que yo, es tan inteligente, como enviar a mi joven esposa, a pasar la noche en el dormitorio del vecino, para que me la cuide.
Me parece increíblemente estúpido, que nuestros bienes, representados por el dinero, los manejen los dueños de los bancos privados, finalmente personas como tú y como yo, en vez de que estén exclusivamente en manos y garantía del Estado, que nos representa a todos. Y que debería utilizarlo para el beneficio de todos.”
Y en el caso puntual de la Venezuela Bolivariana de hoy, se hace imprescindible analizar, la tremenda contradicción, de que el pueblo venezolano en su conjunto, como propietario del petróleo de su subsuelo, es el principal financista de los Bancos Privados.
No creo necesario, abundar en la explicación del absurdo que significa en este tiempo, la existencia de los Bancos Privados.
La actual crisis mundial en pleno desarrollo, es una crisis de la Banca Privada, que cometió mil desaguisados en materia financiera, exacerbada por el libertinaje neoliberal. Esto le permitió obtener ganancias monstruosas, a costa de la economía de los pueblos y que ahora para recuperarse de lo que ellos mismos provocaron, los Bancos Privados condenan en Europa a los pueblos, a sacrificios inauditos.
Venezuela es un país en camino al Socialismo Bolivariano, no debería dudar en estatizar urgentemente la Banca Privada, para que esta no siga distorsionando la economía.
Para evitar, que a través de las vinculaciones de sangre de la Banca Privada, en primer lugar con la Banca Internacional del Imperio Anglo Yanqui y luego con la oligarquía nacional, con los ricos del sistema, de quien es socia y” pata financiera”, no utilice esa distorsión, para volcar al pueblo llano venezolano, contra el Gobierno Bolivariano.
La Banca Privada empieza por sostener financieramente, al aparato de los comerciantes monopolistas privados, que regulan en Venezuela los precios y la inflación.
Además, la Banca Privada se apoya en el crédito de consumo, de sus tarjetas de crédito, con las cuales ejerce el poder del chantaje, sobre el afán consumidor de la clase media en especial, además de obtener ganancias obscenas con las mismas.
Cierra así el circulo vicioso del sistema capitalista de consumismo, que comienza con el marketing de la publicidad, que vende “ necesidades innecesarias” y sigue con el “dinero inventado” de la tarjeta, con sus intereses rentísticos para el capital parasitario y lo completa, con la cadena de frustraciones, que produce en quienes, como los pobres, la mayoría de la población, no acceden al crédito, con la facilidad de la Clase Media y termina por dirigir esas frustraciones , contra la ideología socialista del Gobierno, de la mano de los políticos de la oligarquía.
Si la Banca Nacional del Estado Bolivariano, fuera la exclusiva Banca, que maneje las finanzas y el crédito en el País, otra seria las posibilidades de regular y mantener los precios, evitando la inflación, el crédito se dirigiría a los productos realmente necesarios, a los intereses mayoritarios de la población venezolana y no a los espurios intereses privados, de un grupo pequeño de oligarcas.
Finalmente a esta altura, es necesario tener en cuenta que gracias a las acciones tomadas por el Comandante Chávez, en los pasos que ya dio, en materia de Bancos, la Banca Privada Venezolana, no tiene actualmente la capacidad organizativa y de consenso, como para oponerse a la nacionalización.
Compañeros del Gobierno Bolivariano, atrévanse a dar este paso. Aseguraría incluso las elecciones del 8 D.
Afectuosamente
Hersh Zakheim
vakhitova.liliana@speedy.com.ar
