Pensar con la cabeza y empujar con el corazón

La entrega de Joaquín Pérez Becerra ¿Estrategia política defensiva? ¿Error revolucionario?

     Ante una jugada política bien planificada, o el aprovechamiento de una circunstancia para la obtención de un dividendo político, nunca nos planteamos las mismas preguntas, ni obtenemos las mismas respuestas. ¿Qué nos preguntamos los revolucionarios de Venezuela y América Latina sobre este hecho de la entrega de Pérez Becerra?, ¿Qué se preguntó el Presidente Chávez?, ¿Qué se preguntó el nuevo gran amigo de Venezuela?, ¿Sobre cuáles respuesta a las interrogantes planteadas estamos actuando, opinando o juzgando?. Obviamente el Presidente Santos conocía que Pérez Becerra se dirigía a Venezuela, dado su poderoso aparato de espionaje, llamado “Operación Europa” y aprovechó la circunstancia para poner en aprietos a Venezuela, dada la campaña mediática desarrollada por el imperialismo norteamericana de acusar de terrorista a la revolución bolivariana.

     Hoy  nadie se cree el cuento del “Código Rojo”, de INTERPOL sobre Pérez Becerra, de haber sido así, lo hubiesen detenido en Alemania o en Suecia, donde este Bolivariano renunció a la ciudadanía Colombiana y adoptó la ciudadanía Sueca, país en donde se refugió como uno de los sobrevivientes de la masacre perpetrada por  los paramilitares y el gobierno colombiano en tiempos de la Unión Patriótica, donde se ahogó en sangre el proceso de pacificación, en donde incluso la esposa de Pérez Becerra fue asesinada.

     El Presidente Chávez no puede poner en riesgo la gran tarea de ganar ampliamente las elecciones del año 2012, aspiramos todos que sea para profundizar definitivamente la revolución bolivariana, y para ello, se hace supremamente necesario disipar cualquier perturbación que sea aprovechada por el enemigo principal y sus aliados.  Nadie se expone políticamente a un riesgo tan grande, con una decisión como esta,  sino es por un objetivo estratégico definido o un momento de sobrevivencia política.

     Sin embargo, cuando el Presidente Santos (Uribe más calculador, frío e inteligente), manifiesta que el Presidente Chávez ante el pedido detención de Pérez Becerra, no titubeó, se refleja una gran vulnerabilidad que debe estar presente en el cálculo político y el Presidente Chávez, no debe darse el lujo de hacerla tan perceptible, ya que, esto conlleva irremediablemente a errores políticos de forma y fondo, como expresado en las últimas líneas del infeliz comunicado de la cancillería venezolana, cuando expresa: " El gobierno ratifica así su compromiso inquebrantable en la lucha contra el terrorismo, la delincuencia y el crimen organizado, en estricto cumplimiento de los compromisos y de la cooperación internacional, bajo los principios de paz, solidaridad y respeto a los derechos humanos". Ese es el discurso  de Colombia, los Estados Unidos y de cualquier gobierno de derecha de América Latina, se percibe un apresuramiento peligroso, que revela el “Síndrome del Toro”, es decir, empujar con la cabeza y pensar con el corazón; y frente a personas como Santos, se hace imprescindible, pensar  con la cabeza y empujar con el corazón, de no hacerlo así, el torero Santos nos puede dar en cualquier momento una estocada mortal.

     Este breve análisis lo planteo, luego de sobreponerme a la tristeza e indignación que me causó la decisión del Presidente, pero que luego, al reflexionar con la serenidad y aplomo que nos debe caracterizar, me parece que fue una respuesta política adecuada en las circunstancia donde Santos tenía el sartén por el mango y el apresuramiento provocó una cadena de errores que ponen en duda el centro de una jugada estratégica mal instrumentada.

     De tal modo que no se trataba de un problema meramente legal, del acatamiento de las normas que rigen las relaciones internacionales, para dirimir si se trataba de una deportación, extradición o cualquier otra figura propia de la jerga diplomática. Tampoco habría que juzgar el asunto solamente como una falta de solidaridad revolucionaria.

     Por otra parte, Santos aún no ha extraditado a Makled y  no desperdiciaría cualquier excusa para no hacerlo, este personaje que pareciera tener realmente muchas cosas que decir de la actuación de algunos funcionarios de alto gobierno,  le permitiría al Presidente sentar un gran precedente contra la corrupción antes  del 2012, y todos aspiramos que si alguien está incurso debe caerle todo el peso de la ley, jugada de ofensiva política que se devolvería contra la gestión gubernamental si este es puesto en manos de los Estados Unidos.

     Contra el Presidente Chávez el imperio y sus lacayos no han podido imprimir una mancha en su conducta ética y política, pero haría mucho daño si alguno de sus inmediatos colaboradores está incurso en hechos como los señalados por Makled. 

   

     lazaroroger@gmail.com



Esta nota ha sido leída aproximadamente 2972 veces.



Roger Lázaro


Visite el perfil de Roger Lázaro para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes: