El Poder Popular y las Líneas Estratégicas del PSUV (I)

He venido en el curso de estos días publicando unas reflexiones sobre las Líneas Estratégicas del Plan de Acción Política del PSUV. Publique primeramente una reflexión sobre la estrategia 3 y luego preparé una nota con el interés de comentar lo que debería hacerse para atender la propuesta que tiene por objeto activar “las patrullas socialistas del PSUV”[i] para que través de esta activación logre conformarse los “movimientos locales en torno a las bases de patrullas y círculos de luchas populares y buen vivir”.

Esta propuesta se inscribe en el marco de la estrategia 4 que intenta hacer del PSUV una “Plataforma del Desarrollo y Fortalecimiento del Poder Popular”. La línea es  interesante, estratégica y efectivamente se corresponde con una de los puntos neurálgicos del proyecto bolivariano contenido en la Constitución y desarrollado ampliamente en varios instrumentos jurídicos entre los cuales se destacan: Ley Orgánica de los Consejos Comunales, Ley Orgánica de las Comunas, Ley Orgánica del Consejo Federal de Gobierno y el Reglamento de la Ley Orgánica del Consejo Federal de Gobierno. Todo lo que se haga por el Fortalecimiento del Poder Popular es ofrecerle al proyecto bolivariano seguridad, pertinencia, consistencia, legitimidad y sobre todo, significa darle en la madre al proyecto no escrito que tiene la oligarquía venezolana con sus operadores de la oposición.

El PSUV retoma el asunto del Poder Popular consciente de un “descuidada de esta tarea” y como se ha dicho; el fortalecimiento del Poder Popular es un aspecto estratégico para el proceso bolivariano y como objetivo, su logro le devolverá definitivamente solidez, solvencia y consistencia al socialismo del Siglo XXI para dejar atrás las marcas o lunares del socialismo del siglo XX.

Toda esta propuesta del Poder Popular se explica y justifica a partir de la democracia participativa, que como también se ha anunciado marca la diferencia entre la IV y V República. Se piensa entonces que lo protagónico, tiene plena y absoluta justificación entre nosotros porque va al objetivo del proyecto. Sabemos que nos comunica y para dónde nos conduce. Aun partiendo de ese presupuesto (sabemos qué es y para dónde nos conduce), vale la pena revisarnos y reflexionar sobre el sentido, rumbos asumidos, “tarea descuidada”, confusiones y malos entendidos. Este tema ha sido objeto de análisis por algunos intelectuales nuestros que es importante considerar. Marta Harnecker muy concretamente en varios documentos publicados en aporrea y rebelión ha insistido en la necesidad de colocar una frontera entre la situación del partido como instancia de dirección política y el movimiento comunitario, que cobra sentido y expresión a través de los Consejos Comunales y Comunas. La “politización” de las masas no debe asumirse como una partidización[ii] o trabajar en el proceso de organización de las comunidades en Consejos Comunales y Comunas y asumirlo como una invasión.

Por supuesto, no se está manifestando que el partido debe estar o permanecer ausente de ese proceso, debe animarlo, promoverlo y auparlo, pero la organización de las comunidades y el fortalecimiento del Poder Popular responde al principio de democracia participativa y protagónica y no al objetivo de partidización de toda la sociedad porque eso es casi imposible. Se trata de politización y de profundizar esa iniciativa que surgió con el proceso bolivariano y ha sido tan potente, que el 13-A, no hubiese sido posible sin esta primera y sorpresiva señal de politización de los excluidos para mantener viva su esperanza.

A pesar de ser una línea que se coloca justo en el centro neurálgico de la propuesta del Socialismo del Siglo XXI; el documento de las Líneas Estratégicas no trata el asunto desde la perspectiva del Poder Popular y la participación protagónica. El tema en el documento está enmarcado como un elemento del partido y creo que por ahí no tiene mucho futuro  el fortalecimiento del Poder Popular. En una parte de las líneas y donde se desarrolla la  estrategia 4, se recoge  la consigna del pueblo legislador con cierto sesgo:

“Esta agenda legislativa, en buena parte, deberá surgir desde la iniciativa popular discutida en las bases de las patrullas y Círculos de Luchas Populares y del Buen Vivir, liderizada por el partido y otras fuerzas políticas y sociales de la Revolución”. Las Bases de las Patrullas y los Círculos de Luchas son instancia que serán creadas por las patrullas y uno tiene entonces que pensar en los Consejos Comunales y en el objeto de otras leyes que tienen la intención del impulsar el Poder Popular.  Se asume por su contenido y objeto, que estas leyes se formularon para promover e ir institucionalizando el Poder Popular como aspecto emblemático y central del proyecto, en tanto conduce a la organización y politización de los excluidos.

evaristomarcano@cantv.net



[ii]  En varios de los trabajos publicados por Marta este tema se discute a profundidad, pero puede verse particularmente: De los Consejos Comunales a las Comunas, Construyendo el Socialismo del Siglo XXI, publicado en abril del año 2009 y está disponible en Aporrea y Rebelión.



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Evaristo Marcano Marín


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