De lo ya sabido en Occidente y de lo narrado e interpretado por Occidente acerca de otras culturas. En Antropología,"emic" y "etic" son dos perspectivas para estudiar la cultura y el comportamiento. La perspectiva emic se enfoca a la comprensión de una cultura desde el punto de vista de los miembros que la viven, mientras que la perspectiva etic se enfoca al análisis de esa cultura desde una perspectiva externa y pretendidamente objetiva.
La IA no puede adoptar la perspectiva emic. iría contra su propia naturaleza, como el escorpión si no clava su aguijón.
Desde luego la IA es una aplicación más útil que los buscadores comunes. Mucho más completa que la Wikipedia y que cualquier otra fuente de información víctimas de esta nueva tecnología. Ahora solo queda esperar algo, si no imposible, sí muy improbable: una IA que abarque a todas y las supere.
La IA, la occidental, la de la globalización, la del pensamiento anglosajón predominante, no es neutra. Lo dice ella misma. Ahora la competición está declarada entre la "nuestra" y las demás: la IA china, la IA rusa, la IA coreana del norte, la IA arábiga o islámica. Lo que quiere decir es que nada nuevo puede esperarse más allá de lo que circula como verdades y fundamentos del modelo sistémico que la ha creado. Ahora solo queda esperar algo que, si no imposible, parece aún utópico: una IA capaz de contener todas las visiones del mundo sin absorberlas en una sola.
En epistemología, racionalismo, cultura, economía, sociología, medicina… la IA de cada firmamento organizativo, se expresará en términos ya conocidos en ese universo del "saber". Lo único que hay que hacer, estando seguros de que a cualquier pregunta, a cualquier materia que se le someta a su consideración, responderá de acuerdo a los parámetros trabajados desde hace siglos o milenios. La IA de todo occidente ha sido entrenada en su mayoría con textos, valores y estructuras del pensamiento occidental. Y aun cuando incluye textos de otras culturas, los incorpora desde una lógica clasificatoria, no vivencial; como objetos de estudio, no como sujetos de saber.
Eso significa que, aunque no lo parezca, piensa desde un lugar que no es inocente: es el de siglos de supremacía cultural, racionalismo ilustrado, colonialismo epistemológico y orden económico liberal. Lo dice ella misma…
Cuando la IA que manejamos ahora habla de democracia, justicia o desarrollo, lo hace desde esa tradición, validando sus conceptos y excluyendo, muchas veces sin saberlo, otras formas de entender el mundo. ¿Puede la IA captar la circularidad del tiempo en las culturas indígenas? ¿El pensamiento no dual del Tao? ¿La justicia como armonía y no como equilibrio contractual social? No. Porque su estructura no lo permite. No por malicia, sino por diseño.
La historia, la matemática, la ciencia, la medicina, la economía, la cultura, el arte... que se enseñan en loscentros de enseñanza y en las universidades de todo el orbe occidental,no han de variar gran cosa en las naciones que pertenecen a esa cultura. Y, por supuesto, excluyen otros relatos históricos, otras matemáticas, otras Medicinas, otras Economías, otras ciencias, otras ideas. No esperemos que respondan con claves marxistas, o de Medicina tradicional china, de Medicina ayurvédica (India), de Medicina unani (árabe-islámica), de Medicina tradicional africana, de sistemas de curación en Australia, Nueva Zelanda, América Latina, ni otras Matemáticas. Sólo, eventualmente,será citado todo esode pasada, como mera curiosidad y, con certeza, con actitud crítica o incluso despectiva. Lo que muy pronto descubrí en la Enciclopedia Espasa española.
Para que la IA que utilizamos sea un Oráculo, un centro de sabiduría universal, no un centro de saber acotado, una enciclopedia casi equivalente a la epistemología que hay en la Biblioteca Vaticana a la que no tenemos acceso, tendremos que esperar a que el mito de Prometeo, la promesa del Árbol de la Vida o el mito de la Edad de Oro se hagan realidad...
