Por qué un territorio del suroccidente de Venezuela a 600 kms de la capital, con una población que no supera los 900 mil habitantes y un padrón electoral de poca relevancia, después del 21N se ha convertido en el epicentro de la política venezolana y por qué el chavismo parece dispuesto a cualquier cosa por reconquistar los favores de los electores de ese territorio.
El simbolismo de esta región para el chavismo tiene que ver con muchas cosas. Además de ser la tierra donde nació Hugo Chávez, forma parte del gentilicio llanero que Chávez exaltó siempre y lo más importante de todo, forma parte del conjunto de los estados que, desde la llegada de Chávez a Miraflores (1998), mantuvieron marcada preferencia electoral favorable al chavismo y sus candidaturas ("voto duro chavista") y lo último pero no menos importante, allí resultaron favorecidos con el voto familiares directos del expresidente Chávez (padre y hermanos), hasta la jornada del 21N.
Pero lo que ocurre en Barinas ahora con el evento electoral pautado para el 9E, dónde se elegirá el sustituto de Argenis Chávez en la gobernación, deja ver cómo el chavismo en el poder se fortalece ante una oposición no solo fragmentada y sin liderazgo, sino con carencia de dirigentes y programas que ofrezcan alternativas de gobierno creíbles.
No es casual que el chavismo haya postulado a un candidato "sobrecalificado" para el cargo. Cualquier político experimentado se negaría a ofrecer su nombre para una elección de provincia después de haber ejercido la Vicepresidencia de la República (durante 3 años) y de allí pasar a la Cancillería del país y ejercer esta función por 4 años. Pero a pesar de los importantes cargos ejercidos por el internacionalista Jorge Alberto Arreaza Montserrat, lo que queda claro es que este "cuadro" del chavismo no responde a los estereotipos tradicionales del político profesional.
Si bien Arreaza Montserrat se inició en política de la mano de Chávez, como consecuencia directa de los vínculos con el Presidente, al ser su yerno, es después de la partida física del Comandante cuando mayores responsabilidades políticas ha desempeñado este internacionalista de profesión. Y han sido en estas funciones donde ha demostrado sus cualidades, capacidades y competencias en el cumplimiento de las exigente tareas que los cargos le han impuesto, especialmente considerando los tiempos difíciles que ha vivido Venezuela desde la partida de Hugo Chávez y con las sanciones impuestas por EE UU y sus aliados.
Por otro lado, la contraparte opositora no tiene ni las personas, ni las organizaciones, ni programas que puedan ofrecer a Barinas verdaderas opciones para enfrentar la dura realidad de los pueblos que ocupan estos territorios. Un síntoma de esto es la postulación de uno de los avezados políticos de oposición, Claudio Fermín, quien confiesa que su candidatura responde a la necesidad de frenar en Barinas a la corriente extremista que en los últimos años ha apostado al golpismo, las sanciones y la intervención extranjera en Venezuela en las filas opositoras. La derecha extremista acusa a Fermín de ser ficha del chavismo para dividir a la oposición, no asumen el estruendoso fracaso del extremismo opositor.
Los pronósticos no solo dan ganador al candidato del PSUV, sino que abren un abanico de posibilidades para que el Partido gobernante (PSUV) y su dirigencia asuman que el chavismo demanda renovación y cambios, no sólo en Barinas y en territorios alejados de la capital sino en el país todo.
Hoy Barinas es el estado consentido del gobierno nacional y las respuestas a tantas necesidades, que durante mucho tiempo se postergaron, comenzaron a llegar inusitadamente después del 21N. Tenía el chavismo que perder el favor de los votantes para reaccionar ante tanta desidia de los dirigentes regionales. Me atrevo a asegurar que muchas de las respuestas que se dan hoy en Barinas, solo se logran con apoyo extraordinario del gobierno nacional, pero lastimosamente este apoyo solo ha llegado en estas circunstancias electorales.
Seguros estamos del triunfo de Jorge Arreaza en la gobernación el 9E y de la victoria del chavismo en Barinas. El extremismo opositor que ha apostado a la insurrección, la violencia y la intervención extranjera en la Patria de Bolívar no pasará.
Éxitos a Jorge en la nueva responsabilidad que después del 9E le corresponderá, la primera ocasión en la que ejercerá un cargo de elección popular. Quien quita que después de haber pasado por la Vicepresidencia y la Cancillería, en un tiempo no muy lejano llegue a Miraflores y quien dice que no a ocupar cargo de alta responsabilidad, elegido por el pueblo.
