Pero no quiero que diga la gente que María Cristina nos quiere gobernar

…y yo le sigo, le sigo la corriente

Con el típico grito de las manos blancas no tardan en exacerbarse los ánimos de los neo fascistas tropicales nuestros (¿?) coreando el “con mi María Corina no te metas” mientras regalan claveles en cualquier esquina caraqueña o en una que otra plaza bolívar, aunque otro grupo en la acera de enfrente en un orgásmico gritico deje escapar un “te queremos Enrique” como recordando aquellos días de abril donde a brinco rabioso y con pasión freudiana se le manifestaba excelso  amor a Carmona Estanga, hoy de vacaciones en Colombia en mejores condiciones que las de Julián Conrado –triste la paradoja, pero paradoja al fin-.

     Que Manuela ni que ocho cuartos, al diablo Joaquina Sánchez o Luisa Cáceres, que importa Josefa Camejo, o Juana Ramírez ahora ya está aquí con nosotros la maricory directamente de Washington porque acaba de aparecer en el celuloide de la política nacional la nueva abanderada como globo de ensayo del Pentágono: María Corina Machado, tal como si se tratara de una nueva campaña de gaitorei –Roberto Malaver dixit-.

     María Corina nos quiere gobernar… y ya muchos  que consideran a la MUD como prótesis política le siguen, le siguen la corriente, pero bajo el cuidado casi quirúrgico de aquellos que no quieren que diga la gente  que María  Corina  nos quiere gobernar, especialmente Ramos Allup, que no le teme a sublevaciones de lechuguines y petrimetres. o el vino tinto Ismael que ya casi que finiquita un “negocio” de por lo menos cuatro gobernaciones y no precisamente “al precio que ve en pantalla” sino que este es el secreto para llevarse a la tumba fría: 9.000.000 de dólares como para gritar a brinco rabioso la nueva consigna de la franquicia vinotinto ¡podemos hacer posible el negocio electoral!.

     A María Corina le debe resultar mejor iniciar una campaña para democratizar el botox o municipalizar los hilos de plata para tensar el rostro, no de las señoras aristócratas sino más bien de Juanita la que lava o Berta la que plancha, en una especie de Misión Lancome, María Cristina debe resultar perfecta para ello… pero para  la presidencia no, por eso es que debería estar pensando en correr la arruga, a menos que el rostro de democracia que quiera sea la ya vetusta hija de punto fijo sin rubor o con rubor y patas de gallo.

     María Cristina nos quiere gobernar y  todo un caterva de precandidatos que también nos quieren gobernar como emulando el cuento de Aquiles Nazoa, la fiesta de los animales. La verdad, deberían gobernarse ellos porque  ni su alma los  soporta. Representan, eso sí, la mejor expresión de la letrinizacion de la política verbi gratia Ismael que ha hecho suya ya del refranero latinoamericano aquello de amor de puta y convite de tabernero siempre te cuestan dinero, de allí que ya conciba a varios Estados en una especie de oferta electoral, como para decir te dejo Anzoateguia tanto el kilo.

     Lo cierto es que María Corina, nos quiere gobernar, lo malo es que pese a su ya arrugada foto con Bush lo que va es restando y en la MUD, apenas algunos le siguen, le siguen la corriente.

  espanel7@gmail.com



Esta nota ha sido leída aproximadamente 2887 veces.



Nelson España

Miembro del Frente Antiimperialista de la Zona Sur - Anzoátegui

 espanel7@gmail.com

Visite el perfil de Nelson España para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter



Nelson España

Nelson España

Más artículos de este autor