J. George Habrar, presidente de la Conferencia “Objetivos y estrategia para mejorar la calidad del ambiente” en la década del setenta, con participación de industriales de América del Norte, Europa y Japón. Además de funcionarios gubernamentales de Estados Unidos y Canadá, las Naciones Unidas, la OCDE, la OTAN y las comunidades europeas. Celebrada en EE.UU.
Dijo, “Todos somos contaminadores del ambiente. Como fabricantes, consumidores, funcionarios públicos o ciudadanos particulares. Cada uno de nosotros en el curso de la actividad diaria contribuimos al deterioro del medio donde vivimos. En el desarrollo de nuestra sociedad urbanizada, Industrializada y tecnológica, llegamos a comprender tardíamente el precio que le exigimos al mundo que nos rodea en lo que se refiere a la contaminación del aire, el suelo, y el agua, condiciones que influyen de manera creciente sobre nuestro bienestar físico y psicológico.
Actualmente, la preocupación por o problemas que azotan nuestro medio es muy grande.” En Venezuela tuvo que llegar a padecer de cortes de luz y escases de agua para que muchos ciudadanos llegaran a comprender que el Fenómeno del Niño es una verdad y que es “Mea Culpa” también, no podemos decir que el Fenómeno del Niño, la descongelación de los glaciales, al escases de agua en muchos países del planeta es únicamente por culpa de los países más industrializados del Mundo, basta con saber que en Brasil se destruyen miles de hectáreas de bosques selváticos que impide la lluvia en esas zonas y sus alrededores, pero en Venezuela no nos quedamos atrás. No hace ni un mes que las plantas de televisión del gobierno nacional nos presentó un video del cineasta Carlos Azpurua, que fue filmado hace 17 años atrás donde nos muestra la destrucción que vienen haciendo los mineros brasileños y venezolanos en las selvas del estado Bolívar, donde estos mineros no sólo destruyen lo bosques sino que contaminan el ambiente, sedimentan los suelos de los afluentes que van a nuestras grande represas de agua, como la es el Guri. Y si pensamos que los productos de esa desforestación y explotación de minas, los diamantes y oro extraídos de esos suelos al menos se quedan en Venezuela o Brasil, estamos bien equivocados, todo va a parar a empresas trasnacionales, tanto la madera como los diamantes y el oro. Estas empresas les pagan una miseria a los mineros y obtienen grandes ganancias, sin que los gobiernos tanto de Brasil y Venezuela les importe nada. Por tanto, es “Mea Culpa” también de que hoy estén los diques sin suficiente agua para abastecer a sus ciudadanos. Por otro lado, fueron miles de personas tanto de la oposición como partidarios del gobierno que se opusieron por distintos motivos a cambiar sus bombillos por los ahorra luz, pero bastó con que viniesen los cortes de luz eléctrica para que el operativo de cambio de bombillos efectuado por las patrullas del PSUV el Fin de Semana antes pasado en caseríos, barrios y urbanizaciones tuviese un rotundo éxito y más bien faltaron bombillos para hacer reemplazos, muchos se quedaron sin cambiarlos. Pero como dice el refrán, “Nadie se acuerda de Santa Bárbara hasta que truena”. Fueron miles los mensajes que se dieron a través de las plantas de TV del gobierno bolivariano sobre la escasez de agua que se nos venía. No obstante, fueron muchos que no les hicieron caso. Hoy se lamentan, y culpan al gobierno nacional de todo lo malo. Pero es qué ¿acaso el gobierno actual es culpable de todo?, ¿el derroche de agua que han venido efectuando muchos habitantes de este país?; ¿es culpa solo del gobierno, el dejar encendido todo los bombillos de tu casas?; ¿es culpa solo del gobierno de Chávez, el tirar basura en nuestro ríos también los es?; ¿Qué los piromaníacos quemen nuestros cerros todos los años? Señores, todos somos culpables de la contaminación de nuestro planeta Tierra y como tales, todos debemos ayudar para evitar que nuestro planeta Tierra sea otro Marte pues quizá en algún tiempo ese planeta llegó a tener vida y paró donde paró por culpa de sus habitantes. ¿Quién quita?. Es hora de tomar consciencia.
Economista y Ecológo
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