El estado de Israel es, sin duda, un estado genocida. Lo que no es cierto es que es ahora cuando ha empezado el exterminio palestino. El genocida estado de Israel viene matando palestinos desde su misma fundación (invención por parte de los ingleses). Ha habido continuidad, y así hemos visto cómo año tras año Palestina reduce su tamaño cada vez más, mientras sus habitantes son asesinados, muertos por inanición, humillados y privados de cualquier derecho humano.
Escribo este artículo, pues siento un enorme malestar por lo que está ocurriendo en palestina, por el genocidio del pueblo palestino, por el enorme féretro en el que se ha convertido Gaza. No se trata solo de cifras, aunque las que da el Ministerio de Sanidad de Palestina revelan el inimaginable horror que allí se está viviendo y que el mundo está permitiendo día a día: más de 52000 muertos; más de 118000 heridos; más de 18000 menores asesinados; más de 2200 familias aniquiladas; más de 41000 menores que ya no tienen padres, que han quedado en la orfandad; más de 12000 masacres; la mayoría de los muertos son mujeres y niños, y mucho, mucho más. Pero como dije, aunque los números son esclarecedores, no se trata solo de números, sino de lo que hay detrás de ellos. Hay una parte del mundo, esa conocida con el mote de "Occidente" que, junto a Israel, se cree dueños del mundo y, por tanto, con el derecho de arrasar con países enteros, acabar a sangre y fuego con sus poblaciones a las que dan menos valor que a los animales. También, obviamente, esos números reflejan la enorme maldad, la perversidad, la ignominia, la falta de vergüenza, de moral, de sentido humano, de la menor pizca de humanidad de todos los gobiernos de esos países. Bajo esas fachadas de desarrollados se esconden verdaderos carniceros, bárbaros, asesinos implacables, demonios peores que los que pudo imaginar Dante, hipócritas sin ninguna moral, piltrafas disfrazadas de seres humanos.
Ahora, y después de que el Anaranjado ofreciera a los gazatíes sacarlos de sus tierras y llevarlos a vivir a otro sitio "mejor para ellos donde pudieran ser felices", e Israel anunciara una ofensiva enorme sobre lo que queda en pie en Gaza, vienen algunos funcionarios de ese basural político europeo a empezar a pronunciarse tímidamente sobre el exceso israelí e incluso empiezan a llamar genocidio a lo que ha hecho y hace el estado de Israel en Palestina. Lo hacen porque saben que la historia les va a reclamar este genocidio, entonces dan un salto adelante como para decir "yo no apoyé ese genocidio", "yo nunca apoyé lo que hacía Israel", etc. Pues sí, sí lo apoyaron y lo siguen apoyando. El pueblo de Palestina está indefenso y, mientras tanto, Estados Unidos enviaba y sigue enviando armas y dinero a Israel, al matón. Y así mismo ese estado genocida recibió el apoyo de los estados europeos.
Para mí todos son culpables, desde el estado genocida de Israel, con Netanyahu a la cabeza, pasando por los estados europeos "Occidente" y todos los que pudiendo haber hecho algo no lo hicieron (estados árabes), hasta todos aquellos que apoyaron de una forma u otra al estado de Israel (aunque sea dándole la razón). Así, valga la comparación, hicieron en Venezuela con Guaidó, lo apoyaron, se entusiasmaron, hasta salieron la calle y, cuando se dieron cuenta de la farsa, empezaron a darse la vuelta y a decir que nunca lo habían apoyado, y que ese hombre era un ladrón y un payaso.
Aunque ya he escrito artículos acerca de esto, sentía la necesidad de pronunciarme, porque el malestar que esta situación me produce es enorme y no logro entender cómo es posible que el mundo no se pare para detener este genocidio. No debería haber actividad alguna hasta detener este genocidio. ¿Han visto a los niños gazatíes con las ollas vacías en las manos pidiendo comida desesperados? ¿Existe suficiente castigo para un crimen de esta magnitud?
Por último, pienso en mi país, Venezuela, bajo las mal llamadas sanciones, bajo el bloqueo económico-financiero, me pregunto cuántas muertes habrá provocado tales "sanciones" y tal bloqueo de venezolanos por falta de acceso a una salud pública de calidad, por falta de acceso a medicinas, por la baja en los programas de alimentación y otros programas sociales.
PD: imagine el lector el malestar que me causa el genocidio palestino, que el título Féretro palestino se me vino a la cabeza en estado de duermevela, estando yo más dormido que despierto.
