Rivera Lugo denuncia al derecho penal del enemigo en la Isla del Encanto

El Catedrático de la Universidad Eugenio María de Hostos en Mayagüez, Puerto Rico, propulsor de las tesis del “Comunismo Jurídico” (Inspirado en sus fundamentos he cometido la osadía de denominarla “Ius –Comunismo”), ha criticado racional y objetivamente al nuevo código penal de carácter colonial que ha aprobado la asamblea legislativa, de carácter colonial también, de nuestra perla caribeña robada por los Marines Yanquis, Borinquén, su nombre indígena Caribe-Taíno, el cual debe prevalecer. El código penal Puertoriqueño, está impregnado del neo-fascismo post- autoatentado de las torres gemelas de New York, cuya manifestación en las ciencias jurídicas es la denominada y aberrante teoría del “Derecho Penal del Enemigo” (DPE), en donde todo el mundo es sospechoso, más que sospechoso culpable.

PREVIO

Antes de proseguir y entrar en análisis de la magistral y acertada criticas del Profesor Rivera Lugo, a quien catalogo de “Jibaro Valiente, Irreverente y Presumible”, como se autodefiniera el salsero popular Marvin Santiago (Lo de irreverente se lo agregué), para ubicarnos en contexto, por un lado que es el derecho penal del enemigo y su manifestación practica, y quien es Carlos Rivera Lugo, satanizados por un par de autores Españoles, con apoyo de burócratas Cubanos, que inmerecidamente les dieron el premio al ¿”Pensamiento Crítico”?, dado por el estado bolivariano, el año pasado.

El derecho penal del enemigo tiene que ver con el fascismo o bonapartismo (La cara “dura” de la misma moneda llamada capitalismo) del Imperialismo actual de “única superpotencia” o de la “Globalización Neoliberal”. Una vez caído el muro de Berlín o eliminada la amenaza de la URSS, el capitalismo presumió de ser no un sistema más, sino “el sistema” y cantó alegremente “fin de la historia”, “fin de las ideologías”, solo habría capitalismo per secula seculorum. Esta actitud, obligó al imperialismo yanqui, al menos en apariencia, adoptar la cara “buena” de la moneda capitalista, y vimos como inmediatamente a la Casa Blanca, en 1992, llegaron los demócratas con Bill Clinton, quien tomo unas series de medidas de carácter de “fin de la historia”, y empezaron a desclasificar (Muy pocos, pero empezaron) documentos secretos de actuaciones imperiales de la CIA y otros organismos estatales de USA; pero si veíamos, que el aparato militar, sobretodo el nuclear, el de las armas de destrucción masiva, jamás dejo de funcionar, producir, ampliándose y mejorarse, cuestión que era contradictoria con las tesis de “fin de la historia”, era evidente que quien de verdad manda en Washington, que radican en New York, los ricos banqueros judíos-norteamericanos, para nada creían en esas tesis de fin de las ideologías y las luchas de clase, y se preparaban para reprimir al mundo, cuando este despertase de la ilusión

Si bien, a la caída del muro de Berlín quedamos a tientas, sobretodo en los primeros años, mucho más temprano que tarde, nos dimos cuenta de la gran farsa, y la primera acción, que marca “el fin del fin de la historia”, es la acción de “el pueblo de Seattle”, en el propio seno del imperio en una reunión del G-7, Banco Mundial y FMI, un 10 de noviembre de 1999, 10 años exactos de la caída del muro de Berlín, 10 años duró “el día del gobierno del diablo al final de los tiempos”.

Para justificar la represión mundial e instaurar el bonapartismo o el neofascismo, USA utilizó el atentado a las torres gemelas, el 11 de septiembre del 2001, y así emitió el decreto imperial de guerra a muerte en contra del género humano, el progreso y la comuna; y fue el Cesar de turno, George Bush, hijo, a quien le tocó decir: “Quien no está conmigo está en contra mía”.

Este hecho, prefabricado, como lo fue la quema del Maine, en el puerto de La Habana, al final del siglo XIX, que dio inicio a la guerra USA-España, el ataque Japonés de Pearl Harbor, conocido por la inteligencia gringa, querían crear un estado de conmoción para que el pueblo norteamericano, que veía la segunda guerra mundial como algo ajeno, se incorporase activamente, y el incidente, también pre-fabricado, de la Bahía de Tonkín, para justificar la agresión a Vietnam en los 60. Este hecho confeccionado, el de las torres gemelas, repito, ha justificado las invasiones a Afganistán, Irak, las agresiones a Venezuela, Bolivia y Ecuador, los golpes de estado de Honduras y Paraguay, el asedio a Cuba, Corea del Norte e Irán, y ahora, la nueva modalidad de agresión yanqui, el resurgimiento de la piratería anglosajona, como lo vimos en Libia y lo estamos viendo ahora en Siria. Y en materia jurídica, estamos asistiendo a la ley patriota (Patriot Act) modelo legal de este neo-bonapartismo o neo-fascismo, en donde instituciones de más de 300 años, como el habeas corpus, quedan derogadas y se regresa a los juicios inquisitoriales de la edad media, en donde la tortura es un método “normal” de interrogación y en donde todos, sobretodo los que no son poder (99%), más que sospechosos, son culpables. Este neofascismo imperial global, dio origen al bodrio del “Derecho Penal del Enemigo” que el Profesor Carlos Rivera Lugo, denuncia, en el colonizado Borinquén precioso, acogido por una asamblea legislativa de corte colonial, en su “nuevo” Código Penal.

Con respecto al Profesor Carlos Rivera Lugo, el mismo, ha hecho varios escritos publicados en “Rebelión.Org”, en donde ha hablado muy acertadamente de lo que denomina “El Comunismo Jurídico”, reivindicando el comunismo como única opción válida para salvar a la humanidad y su implicación en el derecho, pero “francotiradores intelectuales” desde Madrid y La Habana, se han dado a la tarea de desprestigiar sus tesis, siendo ellos de la naturaleza de la burocracia socialista, conservadora y consciente o “inconscientemente” jalan la brasa hacia el capitalismo, son reformistas y/o revisionistas, contrarios a una revolución radical y consecuente; y por ello atacan, por supuesto, sin ninguna base seria y valida, a no ser que sean sandeces, como eso de que “los comunistas lo somos porque queremos dejar de luchar” y no “porque nos guste luchar toda la vida”; cuando hay razones para luchar, que importa que nos agarre toda una vida en la lucha, y el que se canse de luchar, creo que es honesto decir que está cansado, y se vaya para su casa, y no salir con la deshonestidad de “las condiciones no están dadas” o “las condiciones otras”.

LA CRITICA EN SI AL DERECHO PENAL DEL ENEMIGO INMERSO EN EL CODIGO PENAL PUERTORIQUEÑO POR PARTE DEL PROFESOR CARLOS RIVERA LUGO

En si los elementos de la tesis ultraderechista del “Derecho Penal del Enemigo”, en el nuevo código penal de carácter colonial Puertorriqueño, están los artículos: 297, el cual prohíbe cualquier expresión que implique protesta que de cualquier manera “perturbe”, “interrumpa” o “impida” las actividades de la Asamblea Legislativa de Borinquén; 247; tipifica como delito toda protesta que obstruya el acceso o afecte las labores regulares en instituciones de enseñanzas (Universidades, Liceos, Escuelas, etc.), centros de salud (Hospitales, clínicas, dispensarios, módulos, etc.), y el 200, el cual prohíbe toda protesta contra obras de construcción o movimientos de tierras que hayan sido autorizados pertinentemente por el gobierno.

Es lamentable que cuando veo estas críticas del “Jibarito valiente y presumible” me provoca comerme la lengua, porque cualquier cosa que diga, estaría escupiendo para arriba, porque en la Venezuela “Bolivariana Revolucionaria”, existen prohibiciones de carácter del derecho del enemigo muy análogas a estas del legislativo colonial Borinqueño; a excepción de las prohibiciones de construcción, aunque en Ciudad Guayana, Estado Bolívar, en donde la Corporación Venezolana de Guayana (CVG), se ha convertido en el principal latifundista urbano, aplica de hecho, la represión, a las protestas de las organizaciones civiles de los sin techo que buscan vivienda e invaden y protestan por el otorgamiento de tierras lomitos a súper millonarios consorcios de la construcción. Pero tanto en sedes de organismos públicos y hasta en las calles es delito, de hasta 6 años de prisión, obstruir las labores, impedir el acceso a estos sitios y la invasión de terrenos impulsadas por gente sin techo, es un delito, que se paga hasta con 8 años de prisión; y la Asamblea Nacional “chavista”, creó un delito, que ya existía en la democracia representativa neoyorquina (Puntofijismo), pero lo amplió y la agravó que es la “Difamación Corporativa”, que prácticamente penaliza las críticas al legislativo. Igualmente tenemos una ley anti-secuestro, que es calco de una ley Colombiana de la “seguridad democrática” del Uribesantismo o Santismouribismo que es el modelo del derecho penal del enemigo por excelencia en Nuestramérica, al cual los gringos ya lo están exportando para México, Honduras, Guatemala y Costa Rica; y está en proceso de ejecución una ley de desarme que emula a una ley de igual tenor a una que logro imponerle a Salvador Allende la derecha en Chile, previo al golpe de Pinochet que le facilitó al dictador entrar tranquilo a los barrios obreros de Santiago de Chile a masacrar a las masas, sin sufrir ninguna baja; este “desarme”, al cual incorrectamente se le asocia a la paz (Es el falso lenguaje del DPE, el mundo al revés), también tiene factura del derecho penal del enemigo este desarme, ya que solo se hace en los barrios pobres y para nada en las ricas urbanizaciones del este Caraqueño o “barrios rosas” del país, por donde las comisiones de desarme no se acercan ni por error, y es precisamente en estas zonas en donde se han detectado los arsenales de armas sofisticadas más grandes, de donde precisamente parte la conspiración en contra del gobierno revolucionario de Chávez.

Ahora bien, todas estas leyes, en donde ya no existe el elemento represivo puntual, el célebre bien jurídico a proteger, como era en los códigos penales clásicos, sino el delito es ser pueblo (99%), no ser de los ricos y privilegiados (1%) como es la finalidad del DPE, todas estas leyes se hacen, estando despenalizados o sancionados con penas irrisorias, el terrorismo y la manipulación mediática de los grandes medios de comunicación, la especulación financiera, conducta lesiva que puede estafar y quebrar a un país entero, la especulación con bienes y servicios, que encarece la vida y la convierte en un infierno, las acciones subversivas y golpistas de la derecha, como fueron todos perdonados, o no judicializados, por el 11-Abril 2002, el paro petrolero golpista de diciembre 2002 y enero, febrero del 2003 y las guarimbas (Acciones de saboteo con fines desestabilizadores) del resto del año 2003 y parte del 2004. Aparte que las lesiones al medio ambiente, al medio ambiente laboral y las violaciones a leyes de salud y laborales y hasta la evasión de impuesto, los castigos son meras multas (No hay cárcel), en donde los ricos tienen todos los recursos jurídicos del mundo y dilatan la sanción para cuando la rana eche pelos.

Esta crítica es necesaria y pertinente porque los gobiernos denominados progresistas (Centro-izquierda), en Nuestramérica están “echando por la borda” (“Botando la bola”, decimos en Venezuela), una oportunidad de oro, que como Bolívar, al decir de Pablo Neruda, despierta cada 100 años, cuando despiertan los pueblos; y el siglo XXI, inesperada y gratamente, nos ha sorprendido con un “despertar de Bolívar”, con un “despertar de los pueblos”, que si no aprovechamos este envión revolucionario, tendremos que esperar tres o cuatro generaciones más para que vuelva; y precisamente, en donde se ha desperdiciado más tiempo y oportunidades, ha sido en Venezuela que entre el 11-Abril-2002 y el 15-Agosto-2004, se logró derrotar a la derecha imperialista, en su más grande ofensiva contra-revolucionaria, militar, económica y políticamente, no obstante los resultados, meramente de corte asistencialismo social, han sido bien magros para lo que se hubiese podido avanzar, tan poco se ha hecho que hoy la oposición venezolana cuya naturaleza es derechista y pro-yanqui, es más una ultra-derecha lacaya y entreguista que una derecha nacional clásica, oposición, repito que ha resucitado y hoy nos vuelve a disputar el poder por la vía electoral, y para justificar ese estancamiento, que es producto de la falta de una ideología radical verdadera (En donde haya armonía teoría-practica) y de revolucionarios competentes en el gobierno, la táctica del avestruz ha sido cobijarse en un excesivo culto a la personalidad, lo que he denominado el “Neo-Caudillismo” del cual escribiré posterior al 7 de octubre.

Estas críticas no son para favorecer a la derecha o apoyar el retroceso que implicaría el regreso de un gobierno lacayo imperial a Caracas, como maniqueamente lo vocifera la “burocracia roja, rojita” (“Derecha endógena” o “pumalacas”, se le dice por estos lados); preferimos mil veces un gobierno progresista inconsecuente e incoherente, antes que un que un gobierno imperialista, volveríamos a ser colonia gringa; además esta discusión, estaría fuera de lugar seria inoportuna e impertinente porque de reinstaurarse la oposición pitiyanqui y mayamera en Miraflores, el rigor del derecho penal del enemigo recaería sobre todos los revolucionarios, ya no estaríamos discutiendo si esta ley es mejor o menos buena sino que anduviéramos por hospitales y cementerios buscando a nuestros muertos y en las penitenciarías para ver si nos dejarían ver a un familiar o camaradas preso, con el agravante que el próximo preso o desaparecido seriamos nosotros mismos, porque la derecha de regresar si es verdad que no va a perder tiempo, para nada, como lo hemos perdido nosotros, aniquilaría todo este despertar de Bolívar.

Ahora todas estas leyes con factura DPE, existen

¿QUE HAY QUE HACER ANTE EL DERECHO PENAL DEL ENEMIGO (DPE)?

El problema del DPE, es político, más bien Económico-Político, porque es creado por la clase mundial gobernante que detenta, de verdad, verdad el poder político, aunque no se vea por ningún lado, a veces, aunque su manifestación es legal; el DPE, son cuerpos de leyes o una ley resumen cual es el caso de los códigos penales; esta tara socio-política solo desaparecerá cuando se instaure el comunismo en toda el plano tierra, y en la medida que esto suceda irá disminuyendo-desapareciendo.

Ahora bien, instaurar el comunismo en toda la tierra, no es soplar y hacer botella, es un proceso revolucionario, en unas oportunidades más intensa que en otras, en donde se le va quitando poder a la burguesía y el pueblo va copando esos espacios, y ese proceso revolucionario es de la naturaleza de una guerra, en donde unas veces priva mas lo político y en otras veces brilla la guerra en todo su esplendor, pero cuando priva lo político, no significa que hay paz, sino que continua la guerra pero por otros medios. Ahora, como ya las celebres tesis de la toma del poder político, el cual aunque no indispensable importante (Importantísimo), como condición sine quan non para instaurar el comunismo en sus dos etapas (La primera es la etapa socialista), ya que está demostrado que no es suficiente la toma del poder político para hacer una revolución transformadora, que se requiere una revolución social, económica, militar y hasta cultural, aunque tener el gobierno, como ayuda, aun “botando la bola”; se debe ir haciendo planteamientos de derogación de leyes capitalistas, como estas del derecho penal del enemigo por leyes o figuras del comunismo.

Por ejemplo en el caso de Puerto Rico que es una colonia yanqui, la lucha por la derogación de articulados del código penal como los descritos por el Profesor Rivera Lugo, que van dirigido a sancionar a una clase entera que es mayoritaria dentro de la sociedad y de hecho prohíbe tanto la organización como la protesta y la sindicalización y la lucha sindical, gremial o estudiantil y la instauración de leyes permisivas con la libertad social y los derechos de la población, gremios, trabajadores y estudiantes, pasa irremediablemente por enfrentar y confrontar al colonialismo gringo; igualmente en Venezuela, que existe un gobierno de los catalogados como progresistas; la lucha por la eliminación de las invasiones con fines de tener vivienda de los sin techos, que es un problema social, así como las tomas de oficinas gubernamentales o la calle (Hasta 6 años de prisión en cárcel de régimen cerrado), pasa irremediablemente por enfrentar a la burocracia chavista y pedir radicalización del proceso bolivariano revolucionario.

La lucha por derogación de leyes injustas y violatorias de derechos fundamentales y la instauración de leyes permisivas y progresistas, aunque técnicamente hablando son jurídicas, pero está implícita en la lucha por el poder político. Ahora lo que si no puede hacer un comunista jamás so pena de prevaricación (O traición) en su lucha, es no luchar por derogaciones de leyes por ser esta de un estado burgués y entonces habrá que esperar que se tome el poder político para cambiarlas. Eso aparte de ser traición, es un comodismo que muchas veces esconde una cobardía y/o debilidad para no confrontar Magistrados, Gobernantes, jefes policiales y ministros, “pasar agachado” porque se antepone intereses personales a intereses colectivos, como ese de que “luchamos para dejar de luchar” o “no queremos luchar toda la vida”. No le podemos dejar el foro a la derecha, los comunistas tienen que estar presente en el foro, vigilando que policías y fiscales, aun en gobierno supuestamente de izquierda, apliquen torturas o desaparezcan personas, tal y como lo hace el imperialismo yanqui en la cárcel de Guantánamo, una cárcel modelo del sistema del Derecho Penal del Enemigo; que magistralmente denuncia Rivera Lugo. No podemos permitir que en los códigos civiles y mercantiles solo prevalezcan las sociedades privadas comerciales sino que tenemos luchar por la cogestión y la autogestión y otras formas de modo de producir de carácter horizontal o circular y no vertical o jerárquico lineal; y para ello, sería una irresponsabilidad o quizás una complacencia (A veces vemos cara pero no corazones), esperar la “toma del poder político” para hacerlo.

Ahora, que ha debido hacer un gobierno progresista en materia de leyes o aun sin tomar el poder político que debe hacer una organización o grupo de vanguardia político social en la sociedad en materia de leyes; debe ir derogando o disminuyendo la penalidad alta (O grave) en los delitos comunes, que son los únicos que persigue la sociedad burguesa, a titulo de coartada (Los principales ladrones y asesinos son ellos), por un lado, y por el otro, ir penalizando o aumentando el rigor (O gravedad) de las penas en los delitos de cuello blanco o que solo son susceptible de ser cometidos por gente de poder o control. Claro está, este no es un problema únicamente judicial o legal, es un problema integral (Espiritual, económico, político, social, militar y cultural), en donde la despenalización-penalización, ya mencionada, debe ir acompañadas con un plan de producción nacional, en donde incluya lograr la soberanía alimentaria y la industrialización, aparte de una campaña mediática espiritual-cultural, en donde se inviertan los valores de la sociedad burguesa y se eduque al niño en el sentido que el verdadero ladrón es quien acapara los medios de producción y somete al hambre y necesidades a las grandes mayorías, que los bienes y la producción es de todos, es un producto social, claro está y debe irse trabajando para que eso sea así y no un mero slogan, como suelen hacerlo los gobiernos progresistas en Nuestramérica, y hablo con conocimiento de causa por Venezuela.

EN DONDE ESTA LO MALO Y LO BUENO QUE ES LO RACIONAL

Producto de la era de la guerra fría, han quedado por ahí muchos, a los que en Venezuela llamamos “ni-ni”, es decir ni estoy con la URSS ni estoy con USA, ni con el capitalismo ni con el comunismo; y aunque quedan muy pocos de esa era, queda algo pero que es la cultura ni-ni.

Que quiero decir con lo anterior, que hay muchos “imparciales” o “estudiosos” que dicen que si se expropia la burguesía o se le reprime, se hace lo mismo que ellos hacían, inclusive, llegan a decir que muchas veces cuando se castiga a personas que aunque son del pueblo, eran fichas o activistas de partidos burgueses, entonces ya descalifican al gobierno revolucionario por ser igual de represivo que el burgués y hasta llegan a la insensatez de ponerlo al mismo nivel, no tan rápido supuesto imparcial o ni-ni.

Antes de hacer una crítica se debe analizar a quien se penaliza, para que se penaliza y por qué se penaliza. No es lo mismo la burguesía cuando acapara los medios de comunicación y se apropia de ellos, para manipular las mentes y los corazones, justificando el robo que implica la propiedad privada y la apropiación de los medios de producción y el ladronismo que significa el robo del trabajo ajeno, y no solo eso, sino que utiliza los medios de comunicación para adormecer a las mentes y los corazones o distorsionarlos, al no transmitir para nada la realidad social o que esta se debata abierta y honestamente sino que o la esconde, o la transmite sesgadamente o simplemente impulsa la nimiedad, lo novelesco, para que la gente se distraiga y no piense en los malos gobiernos burgueses y se insurrecciones.

La revolución, lo que hace con los medios, aparte de impedir que la burguesía siga envenenado al pueblo con sus mensajes intoxicados para que vea la otra cara de la moneda y para que participe en la construcción de una comunicación popular y alternativa. Es decir es un acto de liberación, un acto de libertad mediática. 

Asimismo, este caso se da con las tierras, en los casos de los latifundios y los terratenientes y terrófagos, que por estos lados hay muchos; y con las empresas tanto las fabricas como las de servicio, en donde las mal llamada expropiaciones (Propongo que se denominen “rescates” o “liberaciones”), en donde una oligarquía y una burguesía se ha venido apropiando indebidamente de tierras y empresas para enriquecimiento personal y en muchos casos de tierras es con fines de “engorde” (Especulación inmobiliaria), cuando esa tierras o empresas se expropian o se rescatan para el beneficio de todo el pueblo, se está haciendo una reivindicación social; por supuesto, en este caso el ladrón va a chillar y echar el cuento al revés, el ladrón va a gritar “ahí viene el ladrón a expropiarme”, todo un mundo al revés. Ahora lo peor de todo esto es que he visto a gente del pueblo, personas que no tienen ni donde caerse muerto, en las acciones saboteadoras que impulsan estos verdaderos ladrones y entonces viene la policía y pone orden, y entonces inmediatamente salen los “librepensadores” los ni-ni, a cantar una supuesta imparcialidad y “justicia”, condenando la “represión gubernamental”. La verdad que los procesos revolucionarios no son ni para timoratos ni para cobardes ni pusilánimes, se requiere cabeza y cojones bien puestos.

Es muy distinto cuando, la policía, tribunales y leyes de la burguesía desalojan a una comunidad entera, a la cual la desheredan, la convierten en unos desplazados y parias de la tierra, a cuando un gobierno revolucionario, expropia (Rescata, libera) un pedazo de tierra a unos latifundistas y se apropia de ella para repartirla entre campesinos sin tierra y con fines de ponerla a producir. Lo primero narrado es un acto de injusticia que ofende al colectivo, es malo, es criminal y debe actuar la vindicta social para reponer lo quitado, lo agredido, ya que es un delito de lesa humanidad, lo segundo narrado es un acto de liberación de reposición de justicia social, es bueno y merece canticos de acción de gracia, loas y poemas.


franciscosierracorrales@gmail.com



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Francisco Sierra Corrales


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