Ya hace algún tiempo hice está reflexión y la dejé colgada en el portal, hoy la confirmo; LAS ORGANIZACIONES DEPORTIVAS ESTÁN JUGANDO CON LA INOCENCIA DE LOS PUEBLOS.
La comercialización y el afán por mercantilizar el deporte, ha llevado a los monopolios de la industria deportiva a maltratar el fanatismo a nivel mundial y practican el sadismo, sacando lágrimas y sangre al fanático; que lo moldean a semejanza de lo que le sirve para el consumo y la alienacion, sin importar cuánto dolor causan en este caso al nacionalismo; el mismo método lo usan con el partidismo.
En el caso de Venezuela se inventaron el marketing de vinotinto, para desaparecer el nombre de selección nacional, que es lo propio en todos los deportes practicados como disciplina nacional, convirtiéndose en necesidad según el producto comercial creado, odiando cual sea la disciplina, para aumentar la agresión y la penetración para docmatizar.
Vinotinto es un nombre comercial que desaparece por completo en el fanatismo deportivo, el de Venezuela y más si tomamos en cuenta que somos una patria agredida por el capitalismo mundial, que por nada les interesa visibilizar a una patria que está en construcción, dónde su intención y uso de la dogmatización, va en contra de los valores que debería funcionar en la propuesta.
Sería revolucionario volver a los principios del deporte, para rescatar el valor por la competencia entre hermanos (aunque desde el principio de la historia, se han usado para mostrar fortaleza) y los intereses comerciales no cambien los resultados ni sueños de deportistas que dejan la vida en el intento, ignorando que están siendo utilizados y después de su tiempo útil abandonados a la suerte, con algunas excepciones.
Para hacer un ejercicio imaginemos el juego del día 9-9-25 en Maturin: una euforia delirante, sin pensar que estamos en un foco de ataque y todos los asistentes al estadio, en vez de pensar en la patria y aupar por Venezuela, lo que gritaban en un coro delirante que se oía por toda la nación era "vinotinto" "vinotinto" con éxtasis que hacía pensar, que no estamos pasando por ninguna emergencia y lo que importa es lo que ya no importa, porque perdimos el partido 6 a 3 y se acabó el sueño mundialista, pero son débiles de pensar, que nos queda el de seguir construyendo porque, SIN PATRIA NO QUIERO VIDA.
HAZTE CONCIENCIA.
