Preparó su pensado discurso y mientras lo dictaba, cada palabra que salía de su interior la disfrutaba como si fueran bocanadas de un buen habano de la era del dictador Fidel Castro, a quien jamás en fotografía quiso ver y, estas salían de sus reseca boca, con un ahora diferente en comparación pues, La Habana, la actual es un peladero de chivos con líderes truncados sin cordura y sin luz a diario, tal como actúan los comunistas que mejor ejemplo de incapacidad reciente lo tienen con Boric en Chile que, puso al pueblo a padecer de necesidades hasta más no poder e, hizo el peor gobierno que ejerció como un político mediocre que pasará al basurero de la Historia como un títere inoperante y pretendía que otra comunista igual o peor que él ganará las elecciones pasadas, hay que tenerlas en ese círculo de ilusorios.
Pero él -Trump- un magnánimo explotador de dificultades que las hace a diario por muy mal que se vea: se acepta sin chistar como si estuviera entre un recital de ciegos y mudos a su favor que, a la larga se saldrá con la suya como el mejor presidente que ha pasado por La Casa Blanca en años y, he ahí sus razones for now:
"Buenas noches, Estados Unidos. Hace once meses heredé un desastre, y lo estoy arreglando". Verdad es que sí Biden como lo dijo, no le hubiera dejado ese desastre de incomidades políticas y económicas, jamás se hubiera enfurecido actuando poniendo cada cosa en su lugar y, además el país invadido de extranjeros como indocumentados que no se puede decir este es bueno, pues no y no. Malo, malo y, eso le repugna, pero tuvo que empezar por limpiar la casa como hace un recién mudado para poder vivir bien y en paz y, eso no es todo que todo lo malo se debe a ese ahora expresidente que entre lo malo es lo más malo que pudo haber gobernado a Estados Unidos que, ni dios los salvaba de ese desastre potencialmente existencial y, llegó él solo él que de lo contrario: El Tren de Aragua y el Cártel de los Soles fueran dueño de Estados Unidos -se dan cuenta. Indirectamente soltó algo.
De Maduro antes de la intervención dijo de todo, pero después no lo expresó, lo consideró sin importancia al pensar que ese era su problema y no del pueblo de EEUU que, ya se enterarán a su debido tiempo que para todo hay tiempo y, por ahora no más fuego al fogón y, más que estamos en el mes de la Navidades y allá con hallacas y, eso dejó bocabierta a Marco Rubio y, le molestó por él y por MCM que tiene una fractura de vértebra cervical por lo que sufre de ese mal por ir Oslo por su nobel. Por lo que en lo adelante no la verán pronto actuando oculta en Venezuela, dedicada 100% a su guerra de oscuridades libertarias contra el "dictador" Maduro. "O él o yo es su consigna".
Y de ahí en adelante no dejó de culpar al expresidente Biden de esto, de aquello y de lo demás presente y por venir, por lo que lavo sus manos con mucha calma y lo hizo mejor que Poncio Pilato, actuando como todo un presidente que todo lo hace bien por las malas y por las buenas que, no dijo. Pero sí lo pensó que, perdió el Premio Nobel con la líder venezolana que no admira, pero la comprende, la alaba y la respeta que, posiblemente Biden tuvo algo que ver con eso y mucho más, pero que seguirá adelante y que no deja de pensar en El Mar Caribe que sus esperanzas están entretejidas persiguiendo lanchas que siempre tratarán -quiérase o no, llevan drogas para su país, pero que ahora por él no llegarán más nunca.
En alguna parte pensó salirse del discurso, pero no lo leyó eso de: Pueblo americano prepárense que lo que viene es bailar joropo parejo, por lo que hay que comprar alpargatas en Venezuela que como Venezuela es de él en lo adelante el joropo y alpargatas serán gringas, pero que con todo y eso, el mejor país del mundo es Estados Unidos y él como su presidente que no le temblarán las manos para salir de lo malo y, que a Venezuela la tiene y la tendrá siempre en su mira por mar, aire y tierra , aunque pensó decir, que no le gustan los maracuchos porque hablan atravesado, pero que el lago de Maracaibo lo baña de cariño y algún día piensa quitarle el puente si se portan mal con él.
