Lo pongo en forma de interrogante, porque leo por la prensa que al fin, en Venezuela, se han percatado de que existe una tendencia al Cambio Climático y se tomaran medidas, que se anuncian, pero no se concretan para mitigarlo.

No es un tema novedoso, la misma Organización de las Naciones Unidas, con suficiente antelación advirtió, sobre sus posibles efectos:

Visión general creada por IA

"La ONU ha estado advirtiendo al mundo sobre el cambio climático desde hace varias décadas, con un enfoque más marcado a partir de la década de 1970 y formalmente a través de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) en 1992.

Por supuesto, como aquí vivimos oficialmente de improvisación en improvisación, no nos damos cuenta de ser oportunas advertencias, sino, como dicen en el Oriente Venezuela, cuando ya tenemos la tragedia encima.

Particularmente, en nuestro país acontecimientos como los que vienen serán mucho más graves porque se ha desmantelado una institución como el Ministerio de Ambiente, que suena poco en el ámbito nacional, casi no existe, cuando antes tenía presencia a nivel nacional no solo atendiendo calamidades sino, activa en Foros, Conferencias y Congresos, donde se abordaba por especialistas el tema Ambiental y las posibles consecuencias del Cambio Climático. Incluso en la Defensoría del Pueblo, existió una Dirección Ambiental, que hoy prácticamente, también desapareció.

No me vengan ahora, a decir, que por fin se han dado cuenta de los que nos viene por el Cambio Climático, cuando aquí, en nuestro territorio, ya hemos y estamos viendo sus efecto.

¿Es que acaso la Tragedia de Vargas, 1999, que por cierto se desató en los inicios de la presidencia del Comandante Hugo Chávez, no fue producto del Cambio Climático?

Así reseñaron los medios:

El deslave fue causado por fuertes lluvias que provocaron inundaciones y deslizamientos de tierra, arrasando con poblaciones enteras en el estado Vargas (actualmente estado La Guaira). La tragedia dejó un saldo de miles de damnificados y un número indeterminado de víctimas, siendo considerada como una de las peores catástrofes naturales en la historia de Venezuela.

Otros titulares decían:

"El día que la montaña se tragó al mar…" Hace 25 años Venezuela vivió una de las peores catástrofes de su historia"

Yo, que integre lo que se llamaba en esa época el CUFAN, en representación de la Defensoría del Pueblo puedo dar Fe de la magnitud de la tragedia y que hasta hoy, que escribo esta reflexión, se desconoce el número de muertos que ocasionó.

Antes de la Tragedia de Vargas, había ocurrido, la del Limón en el Estado Aragua (1987), de la cual la prensa regional y nacional señaló.

"El Limón (Estado Aragua) se desbordó, causando inundaciones y deslizamientos de tierra que arrasaron barrios como El Progreso y Mata Seca. Se estima que hubo alrededor de 100 muertos, cientos de desaparecidos, 300 heridos y miles de damnificados".

Y luego, más reciente la de Tejerías, Estado Aragua (2022)

"Hubo más de 50 fallecidos e incontables desaparecidos producto del deslizamiento que arrastró sedimentos, árboles, vehículos y acabó con una gran cantidad de viviendas de la zona. En este caso se habló del desbordamiento de una quebrada llamado "Los Patos"

Ambos han sido desastres naturales donde la mano del Cambio Climático está presente, pero lo que ha faltado en la Planificación, con especialistas de la materia para abordarlos y tomar las medidas oportunas que puedan mitigar nuevas tragedias.

Y si revisáramos con más cuidado y hubiese en el país un organismo técnico que monitoreara estas calamidades, seguro encontraríamos que hay más, de menor magnitud, pero que advierten, evidentemente, sobre lo que nos viene.

Por tanto, lo importante en la situación actual, no es declarar, sino, actuar: dotar a los organismos que existen de la tecnología adecuada, para monitorear; Hacer diagnósticos de las zonas de riesgo, una especie de mapeo al respecto; Convocar a los Especialistas del tópico que los hay en la vida civil y militar y Aunar esfuerzos con las Universidades, para hacer un frente común, que pueda abordar cualquier situación, que a futuro se presente. La interacción con organismos internacionales especializados, no debería desestimarse.

Dejo allí para la reflexión, algunas líneas de trabajo que pueden implementarse para enfrentar una situación que prácticamente es inevitable, porque la mano del hombre, tiene que ver mucho con los cambios que se están presentando y que nos afectan a nivel mundial.