Hoy me atrevo a escribir después de tanto tiempo, la verdad lo me motiva desde lo mas profundo de mi corazón humano, cristiano; a expresar algunas reflexiones en un contexto complejo que gira entre mil millones de cosas, la burla, el odio, el desconcierto y lo peor de todo la falta de fe y el amor al prójimo.
Quiero iniciar haciendo la primera reflexión sobre como la política mundial se ha convertido en un instrumento de guerra en el mundo en varios matices, es locura milenaria del más fuerte contra el mas débil, del mas rico contra el pobre, del culto contra el ignorante, del rubio, blanco contra el afrodescendiente, el migrante, el africano, el palestino, el afgano, el latinoamericano, eso que hoy se dice en términos sumisos e injustos calificativos que humilla al ser humano desde su apariencia, clase social, credo, región, la hipocresía del derecho humano, de la políticas públicas que se ejercen en las hoy ( seudo-democracias) en el globo, esas que hoy reprimen el sentido de la vida misma, aquello que niega toda verdad, toda claridad y coherencia del accionar social, cual esclavitud real en todo ámbito, tal vez algunas excepciones.
Pero es allí donde esas culturas, sociedades, estados, quieren tener una voz diferente, esas que promueven el amor por el prójimo, la igualdad, la fe en el día a día, el que trabaja la tierra, el que educa en los hogares y escuelas, aquellos que priorizan a los mas vulnerables, esos que invierten capital material y humano en el crecimiento sustentable en toda área viva, esa que hoy es pisoteada por el demonio convertido e potencias a través de las guerras bélicas, comunicacionales ( televisión, apps, redes sociales) además de usar sus modelos "democráticos" invadiendo tierras, robando recursos, además de pa persecución, la tortura y la soberbia conjuntamente llena de avaricia y resentimiento hacia a aquellos pueblos que luchan por su autodeterminación y soberanía.
La persecución contra los que promueven la palabra viva de Dios, y a quienes distorsionan con doctrinas banales para dominar masas y justificar praxis que quiebran la fibra den sentir espiritual en el hombre, en la mujer, en aquello que se oscurece dentro de la rabia, la humillación y la pobreza mental, aceptando leyes que violan toda realidad, que pone en tela de juicio lo que es verdadero, como se pisotea la dignidad, la enseñanza de nuestro Dios verdadero, más allá de cada sentido, de cada entendimiento, basado en estudios científicos, que en el mundo moderno siguen colocando la existencia real de una fuerza sobrenatural, de un profeta que vino a lavar nuestros pecados, de tener la fe que mueva con sencillez la fibra den entendimiento en el mundo. No vengo aquí, a juzgar, quiero solo colocar en contexto lo que se ve, lo que se respira, lo que se palpa, donde hay hambre, miseria, muerte, violaciones del verdadero derecho, a sonreír, a expresar una idea diferente a la tuya, a rezar, orara, trabajar, construir, leer, escribir, ayudar con un plato de comida, con una palabra de aliento, una mano a sincera, solo esperando que se levante de las penumbras.
Un mundo convulsionado, que solo coloca su fe en el hombre, en lo material, el Facebook, Twitter, Tik, Tok, en la moda, el vicio, el odio, la envidia, sin preservar los más importante, lo esencial, la fe en uno mismo, en la palabra, en la acción, en la visión, esperando que llegue la salvación, sin arrepentirse o redimirse como persona, como hijo, hija, padre, madre, esposo, esposa, amigo, Pastor, siervo, sacerdote, predicador o sencillamente ese ente fundamental que inicie ese cambio verdadero en la humanidad.
Seguramente me señalen de fanático, de loco o un absurdo más, pero este mundo pervertido hoy necesita mas de Dios, de Jehová, de tu fe, de tu humildad, de que asumas con gallardía la vestidura de la responsabilidad, que hoy los políticos, dirigentes, luchadores sociales, de religiosos se coloquen la mano en el corazón y cabeza, y liberen el verdadero amor por quien hoy están allí, ese campesino, ese obrero, esa mujer lastimada por no usar un velo, por aquellos que hoy reclaman justicia, pero con la diversidad de pensamiento, respetando las dotrinas que hoy deberían estudiarse, y colocar en practica en el mundo pluripolar y multicultural, el capitalismo, socialismo, solo debemos de una vez por todas mirar con claridad lo que ocurre.
Hoy la fe debe cambiar el sentido de la sociedad mundial, es necesario el respeto y dejarnos de señalizaciones, las soberanías, las autodeterminaciones de los pueblos son vitales en este cabio. Ya basta de tanto odio.
La luz debe reinar sobre la oscuridad.
