Dicen que artículos irreverentes como este ponen en juego mi reputación pero irreverencia y franqueza son defectos que no deseo corregir. Algunos reprimidos se ríen porque yo soy diferente, pues yo me río porque todos ellos son iguales (robots estandar). Soy marxista pero a la vez un socialista liberal anticonservador que defiendo profundamente el libre desenvolvimiento de la personalidad de los seres humanos; o sea que transitando hacia una futura sociedad ideal e igualitaria, pienso que debemos respetar que la gente sienta, viva y se exprese como quiera siempre que no afecte el derecho ajeno. Por tal motivo no me opongo a los concursos de belleza, ni a misses, ni a modelos y en mi andar por la TV extranjera, compartí pantalla con varias venezolanas dedicadas a esta glamorosa profesión.
Ver video en YouTube: Jesús Silva invitado al Miss Venezuela - https://youtu.be/4gaoD9hzp4o
Los intelectuales tenemos aprecio por cosas que pudieran parecer superficiales como la belleza de la mujer. Nótese el caso de Donald Trump que saltó de la presidencia del Miss Universo a la de EEUU. La Real Academia Española dice que belleza es la perfección de las formas que complace a la vista o al oído. Entonces existe belleza en gran cantidad de elementos como la música, la pintura, la literatura, entre otros (se me ocurre que cuando escribo, construyo belleza literaria, sobre todo haciendo poemas que algún día publicaré).
Desde mediados del siglo XX hasta nuestros tiempos, los concursos de belleza femenina han captado la atención de millones de televidentes. Contrario a las críticas de gente prejuiciosa, envidiosa o puritana, este tipo de belleza pudiera ser aprovechada positivamente para la sociedad si se promueve como "belleza con propósito", por ejemplo: recaudar fondos para fines benéficos, mejorar modales de las participantes, fundar empresas que generen empleos, masificar mensajes educativos hacia los seguidores de estos eventos (contra promiscuidad sin protección, drogadicción, embarazo precoz, racismo, violencia doméstica, etc).
Tal como lo evidencia el primer video, varias veces estuve como invitado en la academia del Miss Venezuela, la última vez fue para hacer un reportaje en TV de Europa. Allí presencié como niñas y adolescentes, autorizadas por sus padres, son entrenadas para ser modelos y misses (cada una tiene estilo propio). Lo mejor de esto es que reciben cursos integrales que contribuyen a elevar su comportamiento social. Todo esto me parece favorable a una sociedad libre y democrática.
Ver video: Jesús Silva entrevista a ganadora del Miss Earth internacional - https://youtu.be/Yq7UkWF-HTM
Opino que priorizar mensajes educativos en los concursos de belleza, los liberaría de feministas ortodoxas que los comparan con eventos para la cosificación o explotación sexual de la mujer. Mostrar en TV que esas muchachas son pensantes, estudian, trabajan y aportan a la sociedad sería realmente favorable al interés social. Muchas de estas chicas han encontrado en eventos así una llave para escapar de la pobreza y ser exitosas en TV (no me importa si muchas de ellas no son chavistas). Pues en 2017 la hegemonía del Miss Venezuela comienza a estar en duda con la celebración del Miss Earth en nuestro país.
Quizás no estemos lejos de una época en que la sociedad criolla con menos prejuicios y críticas impertinentes apoye la celebración de un certamen como: "Miss Venezuela Chavista" donde nuestras camaradas revolucionarias, socialistas y antiimperialistas puedan exhibir sus mejores atributos intelectuales y físicos por una buena causa.
Creo que ya vamos hacia allá porque veo destacadas damas chavistas en la ANC pareciéndose al prototipo estético femenino capitalista con nuevas y protuberantes siliconas. Estas respetables camaradas deberían desinhibirse y apoyar abiertamente lo que yo aquí escribo.
