Batalla final: vencer las colas

Si algo prevalecerá de nuestra historia moderna será sin lugar a dudas que el episodio de "las colas"; un fenómeno social y económico que nació por una variedad de factores, reconociendo el enorme malestar y los estragos causados en el comportamiento de buena parte de nuestra población, que vio de golpe y porrazo disminuir su poder adquisitivo y entrabamientos para obtener los productos indispensables en su dieta diaria.

Lo que fue una "oportunidad" política para la oposición y por supuesto una "debilidad" para el gobierno, poco rédito le ha brindado a una incongruente y radical MUD, que no define una estrategia coherente con el manifiesto clamor popular de soluciones a sus necesidades inmediatas. Esta incoherente oposición se opone a todo, incluso a ponerse de acuerdo entre ellos, lo cual ha generado desconfianza entre sus seguidores, que ya no le acompañan en sus convocatorias como antes lo hicieron de manera masiva.

El fracaso de la convocatoria para organizar un referéndum revocatorio, fue una "crónica de una muerte anunciada", por las indecisiones y saboteos intestinos de sus miembros por la lucha presidencial que los agobia, sin que se separaran solo por mandato expreso de sus financistas externos. Ellos siguen y seguirán sin ponerse de acuerdo, pero dificulta un posible Dialogo para la Paz con el gobierno,

Sin embargo el malestar de las colas y desabastecimiento persiste y encrespa a todos, salvo a los que hacen negocio con el mal ajeno, pues no tienen color político y juegan en ambos lados de acuerdo a su conveniencia. Este tema requiere de varios elementos para su solución; el gobierno implementó su Agenda Económica con sus 15 motores para impulsarla; apoyados en la Gran Misión de Abastecimiento Soberano, con siete lineamientos que dirigen el propio presidente Nicolás Maduro y el G/J Padrino López, caracterizando la unión cívico militar para ello.

Ahora bien, si la población no convalida lo que hace la oposición tampoco defiende mayoritariamente al gobierno; sigue con rabia por lo que padece, responsabilizando al gobierno por no darle respuesta inmediata y positiva a sus problemas particulares, aun con los CLAP, los operativos que se realizan con las OLP y demás beneficios de las grandes misiones. Los llamados de la dirigencia del proceso no llegan a la mayoría de la población llana, no hay difusión de los mensajes en el campo de guerra; en las colas los oposicionistas vociferan culpas al gobierno, aunque reconocen que sus líderes de la MUD nada hacen por ellos. El grueso de la cola no opina o lo hace entre dientes, no se atreven a defender las acciones positivas del gobierno; igual sucede en los buses "rojitos" que facilita el transporte de esta población, buses hechos en revolución, donde se transportan de manera gratuita muchos de ellos, pero esto no lo mencionan para no desdecir lo que pregonan.

Es por ello que hacemos un llamado a tomar iniciativas propagandísticas, de calle, en las colas, en los transportes colectivos; implementando acciones propagandísticas que expliquen lo que sucede. Igualmente los partidos de la Revolución deben exigir a la dirigencia comunal hacer presencia en estos escenarios; en ellos podrán palpar lo que dice el pueblo, podrán a su vez hacer control de daños y denunciar actividades de ilegalidad y Bachaqueo. Así complementaremos las acciones positivas que realiza el alto gobierno y fortalecerán el poder popular que es en definitiva quienes dictarán las pautas sociales y políticas para el buen vivir pregonado.



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Henry Hernández Armas

Analista social, experto en Imagen Corporativa, Relaciones Públicas, Estudios Sociales.

 hernandezarmashenry@gmail.com

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