Mire lo que es el capitalismo

El capitalismo es el sistema económico fundado en el capital (dinero) como relación social básica de producción. En el capitalismo los individuos privados y las empresas, empleando trabajadores asalariados, llevan a cabo la producción y el intercambio de bienes o de servicios, con el propósito de producir y acumular la mayor cantidad de ganancias u otro beneficio de interés propio. También se denomina capitalismo o sociedad capitalista a todo el orden social, político y jurídico originado en la civilización occidental y basada en aquel sistema económico. Existe una referencia en el origen etimológico de la palabra capitalismo a la idea de capital, y estas referencias son codependientes: quienes invierten, crean o adquieren capital y permanecen como legítimos propietarios (capitalistas) durante el proceso de producción; la rentabilidad del capital invertido en un libre mercado de productos y servicios es el eje central de la vida económica.

        Una de las interpretaciones más difundidas señala que en el capitalismo, como sistema económico, predomina el capital sobre el trabajo como elemento de producción y creador de riqueza a pesar, muchas veces de la explotación del hombre por el hombre. El control privado de los bienes de capital sobre otros factores económicos tiene la característica de hacer posible negociar con las propiedades y sus intereses a través de rentas, inversiones, etc. En las sociedades capitalistas se entiende muchas veces el capitalismo como un modelo económico en el cual la distribución, la producción y los precios de los bienes y servicios son determinados en la mayoría de las veces por alguna forma de libre mercado dominada por empresas oligopólicas. Generalmente, el capitalismo se considera un sistema económico en el cual el dominio de la propiedad privada sobre los medios de producción desempeña un papel fundamental en el desarrollo de una sociedad capitalista que explota sin escrúpulos a las grandes masas dependientes del trabajo asalariado. Es importante comprender lo que se entiende por propiedad privada en el capitalismo ya que existen múltiples opiniones, a pesar de que este es uno de los principios básicos del capitalismo: otorga influencia social a quienes detentan la propiedad de los medios de producción (o en este caso el capital), la burguesía, dando lugar a una relación jerárquica de funciones entre el empleador y el empleado. Esto crea a su vez una sociedad de clases (lucha de clases) en relación con el éxito o fracaso económico en el mercado de consumo, lo que influye en el resto de la estructura social según la variable de capital acumulada; por tal razón en el capitalismo la pertenencia a una clase social es movible y no estática.

        Sobre la propiedad privada, el capitalismo establece que los recursos invertidos por los prestadores de capital para la producción social, deben estar en manos de las empresas y personas particulares que los adquieran. De esta forma a los particulares se les facilita el uso, empleo y control de los recursos que utilicen en sus labores productivas, de los que, a fines empresariales, podrán usar como mejor les parezca. La libertad de empresa propone que todas las empresas sean libres de conseguir recursos económicos y transformarlos en una nueva mercancía o servicio que será ofrecido en el mercado que éstas dispongan. A su vez, son libres de escoger el negocio que deseen desarrollar y el momento para entrar o salir de éste. La libertad de elección se aplica a las empresas, los trabajadores y los consumidores, pues la empresa puede manejar sus recursos como crea conveniente, los trabajadores pueden realizar un trabajo cualquiera que esté dentro de sus capacidades y los consumidores son mayormente, obligados a escoger lo que deben consumir, buscando que el producto escogido cumpla con sus necesidades y se encuentre dentro de los límites de su ingreso. El mercado, por medio de las leyes de la oferta y la demanda, intencionalmente creadas, regula los precios según los cuales se intercambian las mercancías (bienes y servicios). Cada uno de los actores del mercado actúa según su propio interés; por ejemplo, el capitalista, quien posee los recursos y el capital, busca la maximización del beneficio propio por medio de la acumulación indiscriminada y reproducción de los recursos, del capital; los trabajadores, quienes trabajan por la recompensa material que reciben (el salario) y, por último, los consumidores, quienes buscan obtener la mayor satisfacción o utilidad adquiriendo lo que le obligan a comprar al menor precio posible.

        Los críticos del capitalismo le responsabilizan de generar numerosas desigualdades sociales. Pero los críticos del capitalismo señalaron desde finales del siglo XIX que tales avances se obtuvieron por un lado a costa del colonialismo, que permitió el desarrollo económico de las metrópolis, sin tomar en cuenta a la población mayoritariamente excluida y por otro lado gracias a la creencia de una mejor convivencia en el capitalismo, que daba la impresión de ser la solución a todos los problemas. Otras críticas al capitalismo provienen de los movimientos antiglobalización, que denuncian al modelo económico capitalista y las empresas transnacionales como el responsable de las desigualdades entre el Primer Mundo y el Tercer Mundo, teniendo el tercer mundo una economía dependiente del primero. Defensores del capitalismo afirman que este sistema puede organizarse a sí mismo como un sistema complejo sin necesidad de un mecanismo de planeamiento o guía externa, o sea que nadie controle sus movimientos.

El poder popular en nuestro país debe fijar posición con respecto al verdadero significado de este término ya que pertenecemos en cuerpo y alma al cambio radical que nos convierte en verdaderos patriotas revolucionarias que defenderán, ante todo, todo los espacios soberanos que envuelven todos nuestros límites territoriales. Así vemos, por ejemplo, que América Latina cuenta con 10% de la población mundial, y sólo con el 8,2% de los diarios: la mitad de los que circulan en el Tercer Mundo. La propiedad de sus medios está sumamente concentrada en muy pocas manos y que se conoce como la oligarquía. Así ocurre con las más de cinco mil emisoras AM de la región, y con los casi dos millares de emisoras de televisión. La proporción de emisoras de servicio público o alternativas es insignificante. En 1998 los países más desarrollados, que sólo cuentan con el 15% de los habitantes del planeta, tienen 88% de los usuarios de Internet. Estados Unidos, con sólo el 5% de la población mundial, aloja más del 50% de usuarios. América Latina y el Caribe sólo cuentan con un porcentaje de 0,8% de usuarios de la Red en relación a su población regional, según el Informe sobre Desarrollo Humano de la ONU 1999.

        Los latinoamericanos y caribeños debemos ampliar esfuerzos para educar a las audiencias en el uso discriminativo y racional de los medios. Exigir que la propiedad de la mayoría de éstos sea social, o por lo menos de nacionales o de latinoamericanos. Debemos crear regímenes de libre circulación y comercio de los bienes culturales producidos en la región. Establecer acuerdos entre nuestros países para costear y emplear conjuntamente las tecnologías de transmisión, tales como satélites de comunicación y la fibra óptica, y ampliar drásticamente nuestras capacidades y medios en lo relativo a la informática, de la cual dependerá en medida creciente la comunicación del futuro.

Los medios de comunicación, que en nuestro país son bastantes pero en pocas manos, divulgan lo que consideran de menor importancia sólo con el código lingüístico. Ideología y política casi no se mezclan en letra impresa o en emisión radial. La potenciación del mensaje culmina con el código Rey de la publicidad, reforzada por la música, la entonación, la gestualidad, el vestuario, la escenografía y los metacódigos mágicos del montaje, los efectos especiales y la seducción subliminal, aplicados también a la propaganda política.

Debemos manejar las posibilidades de la integración y potenciación de códigos para la creación de mensajes sobre nuestra realidad hacia la asunción de nuestra verdadera identidad nacional o regional. Fomentar una educación que permita la decodificación de los mensajes y la crítica de la ideología latente en ellos. Defender el castellano, el portugués y las diversas lenguas foráneas o indígenas que forman parte de las identidades latinoamericanas y caribeñas.

        El Proyecto Nacional Simón Bolívar es la antítesis del Capitalismo, porque este parte de la búsqueda y riqueza a cualquier costo mientras que el proyecto parte de la esencia humana como base original de convivencia universal. Este documento define el Primer Plan Socialista del Desarrollo Económico y Social de la Nación para el período 2007 – 2013.

A partir del 2 de febrero de 1999 se inició un proceso de cambios en Venezuela, orientado hacia la construcción de lo que se conoce ahora como la Patria Grande a través de las siguientes directrices y la crítica al sistema capitalista:

Nueva Ética Socialista

“Propone la refundación de la Nación Venezolana, la cual hunde sus raíces en la fusión de los valores y principios más avanzados de las corrientes humanistas del socialismo y de la herencia histórica del pensamiento de Simón Bolívar”.

El Capitalismo no cree en tradicionalismos ni humanismos algunos, sólo se ocupa del movimiento del capital monetario.

La Suprema Felicidad Social

“A partir de la construcción de una estructura social incluyente, un nuevo modelo social, productivo, humanista y endógeno, se persigue que todos vivamos en similares condiciones, rumbo a lo que decía El Libertador: “La Suprema Felicidad Social”.

El Capitalismo tiene en la industria militar, su brazo armado para defender sus propios intereses con la venta de equipos a otras naciones y con el uso ellos donde les toque crear alguna guerra como excusa.

Democracia Protagónica Revolucionaria

“Para esta nueva fase de la Revolución Bolivariana se consolidará la organización social, tal de transformar su debilidad individual en fuerza colectiva, reforzando la independencia, la libertad y el poder originario del individuo”.

El Capitalismo practica la participación representativa para evitar que la mayoría protagonice algún reclamo por sus derechos.

Modelo Productivo Socialista

“Con el fin de lograr trabajo con significado, se buscará la eliminación de su división social, de su estructura jerárquica y de la disyuntiva entre la satisfacción de las necesidades humanas y la producción de riqueza subordinada a la reproducción del capital”.

El Capitalismo permite la estratificación social para lograr la división y disminuir los intentos de reivindicaciones sociales.

Nueva Geopolítica Nacional

“La modificación de la estructura socio-territorial de Venezuela persigue la articulación interna del modelo productivo, a través de un desarrollo territorial desconcentrado, definido por ejes integradores, regiones programa, un sistema de ciudades interconectadas y un ambiente sustentable”.

El Capitalismo permite el latifundio como forma de frenar la soberanía agroalimentaria y así aplicar políticas agrícolas en beneficio de las empresas privadas alineadas con la explotación de los recursos naturales.

Venezuela: Potencia Energética Mundial

“El acervo energético del país posibilita una estrategia que combina el uso soberano del recurso con la integración regional y mundial. El petróleo continuará siendo decisivo para la captación de recursos del exterior, la generación de inversiones productivas internas, la satisfacción de las propias necesidades de energía y la consolidación del Modelo Productivo Socialista”.

El Capitalismo permite la explotación desmesurada de los recursos energéticos de cualquier nación para filtrar las grandes ganancias a costa de la población económicamente en desventaja.

Nueva Geopolítica Internacional

“La construcción de un mundo multipolar implica la creación de nuevos polos de poder que representen el quiebre de la hegemonía unipolar, en la búsqueda de la justicia social, la solidaridad y las garantías de paz, bajo la profundización del diálogo fraterno entre los pueblos, su autodeterminación y el respeto de las libertades de pensamiento”.

El Capitalismo conquista, invade y ataca intereses nacionales con el fin de debilitar las economías y lograr un esquema de dependencia que da origen a los llamados países del tercer mundo.

Para concluir, es necesario saber que todo sistema político, social o económico, debe pasar por la aprobación mayoritaria de la población que vive el día a día sus propias necesidades. Si se permite que un sistema capitalista decida qué vender, a quién vender y en cuánto vender, estaríamos negándonos a nosotros mismos la oportunidad de alcanzar la igualdad y la justicia social. 

luiseolmedo@hotmail.com



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