¿Por qué la unidad de Colombia con Venezuela? La respuesta es sencilla: porque compartimos dos mil doscientos kilómetros cuadrados de frontera. En segundo lugar, porque tenemos raíces históricas comunes. Simón Bolívar unificó el nombre de ambas naciones en uno solo: La Gran Colombia.
Venezuela no está sola. Tiene excelentes relaciones con el resto de las naciones de América del Sur, a excepción de Colombia. Países como Brasil, Ecuador, Bolivia, Chile, Argentina, Uruguay, Paraguay, conforman la gran unificación de la América Latina unida, en el marco del ALBA, planteada por nuestro gran líder y unificador de los países americanos, nuestro Comandante Presidente Hugo Rafael Chávez Frías.
¿Por qué Colombia? Porque nuestro Libertador Simón Bolívar planteó en su Proyecto Integracionista en primer lugar la alianza con Colombia, la de sus sueños, a quien amó, a su pueblo, con una oligarquía mezquina, pero un pueblo batallador y Patriota, que entendió la idea libertaria del Genio de la América, como lo era liberar a nuestras naciones colonizadas del Imperio español.
Para Bolívar, el Padre de la Patria, Colombia era fundamental por su cercanía, sus raíces comunes con nuestro país, a diferencia de Brasil, con un idioma cuya raíz era el portugués, Colombia significaba la cercanía, la frontera, la vecindad, los mismas desventuras, el mismo colonizador y el idioma similar: el castellano.
Irónicamente, ahora Brasil también es fundamental en la unificación. Ya ni siquiera el idioma nos separa. Somos una sola América del Sur. El porteñol no es barrera para la unificación latinoamericana. Brasil, a través de su Presidente Luis Inacio Lula Da Silva, unificará una vez más la tierra de Bolívar y de Santander.
Es la demostración más fehaciente que Venezuela se conectará de nuevo con Colombia, gracias a las buenas acciones de Lula con Santos. Se abrirá de nuevo la frontera colombo venezolana, como una prueba de inicio de nuevas y más respetuosas relaciones.
Lo más importante que nuestro Presidente exige es respeto y buenas relaciones con nuestro país. Que no existan declaraciones absurdas, calumniosas, sino que cada una de ellas sea cuidadosa del respeto a un país vecino.
Abonemos el camino por las mejores relaciones entre ambos países bolivarianos, que Dios Todopoderoso mejore nuestras relaciones bilaterales, es necesario para Latinoamérica, para el ALBA y para el mundo.
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