-
El Libertador y esto quedó plasmado en sus decretos no fue solo defensor del ambiente, sino, de todo recurso natural minero, que de acuerdo a su criterio debía ser propiedad de la república para beneficio de todo el estado.
Frente a las pretensiones del reyezuelo estadounidense, que hoy reivindica la doctrina colonialista "Monroe" y que asume públicamente, que la República Independiente de Venezuela, le devuelva territorio y petróleo que le ha sido robado a los Estados Unidos, aprovechamos esta mentira flagrante y su afán hegemonista para poner de relieve, lo que nuestro Libertador, Simón Bolívar, opinaba sobre el ambiente y los recursos naturales de los países por los que luchaba liberar con su espada redentora.
Hace más de 195 años, el genio del Libertador, puso de manifiesto su preocupación e interés por los temas ambientes de Sudamerica, dirigido a la conservación de bosques, aguas y suelos, al punto de ordenar no solo su conservación, sino, también, su protección mediante la reforestación y el uso racional de la minería
El Decreto de Chuquisaca, dictado por Bolívar, luego de recorrer el Alto Perú,, viendo los estragos de la guerra, donde fundaría luego la República Bolivia, en el marco de la existencia de la Gran Colombia, de la cual formaba parte Venezuela, marcó un hito histórico en materia ambiental(19 de diciembre de 1825)
Fíjense la importancia, histórica y visionaria de este Decreto, si consideramos que:
Las primeras normas globales para la defensa ambiental, en el mundo, surgieron con la Conferencia de Estocolmo en 1972, marcando un hito al reconocer el derecho a un ambiente sano y crear el PNUMA (Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente).
Que nos dice el Decreto en cuestión:
"ordena la plantación de un millón de árboles para preservar las fuentes de agua."
Tal es su signficación que:
"Es considerado uno de los decretos más importantes del siglo XIX por su enfoque en la defensa de los bosques, aguas y suelos, contra los estragos del colonialismo".
Establece, en mi opinión, no sólo la conservación del ambiente, sino, la necesidad de poner la naturaleza al servicio del ser humano.
Para la época, visitaba el Alto Perú, lugar que sirvió a la creación de Bolivia. Bolívar, veía la devastación causada por la guerra y es desde allí, precisamente, en función de poner la naturaleza al servicio de la libertad y las nuevas republicas que surgieran del proceso independentista, donde surge la idea de rescatarla para la su causa y sus seguidores, y ponerla al servicio de los pueblos.
Simón Bolívar no fue solo visionario en materia ambiental, también dejo criterios sentados sobre la minería:
En uno de sus decretos en Colombia, establece:
Artículo lº. Conforme a las leyes, las minas de cualquiera clase, corresponden a la república, cuyo gobierno las concede en propiedad y posesión a los ciudadanos que las pidan, bajo las condiciones expresadas en las leyes y ordenanzas de minas, y con las demás que contiene este decreto.
Pueden ver que se reserva la propiedad de las minas a la República, la cual en determinadas condiciones podría conceder propiedad y posesión sobre las mismas.
Estando consciente el Libertador de que los recursos mineros y naturales en general, habían sido esquilmados por los colonizadores, ahora, por Decreto: los hacía propiedad de la República.
En la parte motivo de esos decretos se contempla:
"Que debe asegurarse la propiedad de las minas, contra cualquier ataque y contra la facilidad de turbarla o perderla"
"En fin, que conviene promover los conocimientos científicos de la minería y de la mecánica, como también difundir el espíritu de asociación y de empresa, para que la minería llegue al alto grado de perfección que se necesita para la prosperidad del estado"
Puede apreciarse que se contempla la explotación de la minería, para la prosperidad en general del estado.
No queda duda de la visión de Libertador de proteger la naturaleza, sino, también los recursos de toda la minería, del suelo y el subsuelo, orientación y tendencia que hoy se ve turbada por grupos minoritarios de venezolanos, que en su afán de llegar al gobierno por cualquier vía, han llegado al extremo de ir contra esta visión histórica de nuestros próceres, ofreciendo sus recursos naturales, para lograr apoyo político e incluso solicitar intervenciones militares, con lo que le dan la espalda a la historia y a su propio país.