Cómo dice mi comandante, defenderemos nuestra Patria de quien quiera venir a mancillarla y hasta de quienes en su avaricia, egoísmo e ignorancia han olvidado su origen y pretenden entregarla a las fieras extranjeras que sólo quieren echar mano de todo cuanto tenemos.
Pobre idiota, aquel que cree que de un bombazo injerencista, le salvará su doble nacionalidad o su notable herencia extranjera. Idiotas, que no entienden que su única garantía de vida y libertad en este país, se las ha proporcionado este gobierno y que si no jodieran tanto, hasta ellos estarían mejor. Tienen 14 años echando vaina, sirviendo a unos traidores a quienes les importan un comino, tratando de que los reconozcan más allá de ser simples lacayos.
No disfrutan ni sus mejores momentos, porque en su disociación sólo ven infelicidad. Por qué no terminan de irse demasiado y nos dejan construyendo el mejor país del mundo con el amor y la alegría que caracteriza al chavismo! Claro, es que no se han dado cuenta que el único defecto que tiene este hermoso país son ellos, que con sus caras arrugadas y amargadas y con sus acciones destructoras afean el paisaje.
Váyanse demasiado, porque han demostrado que con lo que han llenado su mente y su corazón solo les alcanza para trabajar, aún siendo profesionales, tercerizados de los gringos o los europeos. La creatividad deformada que les inspira, solo les permite pensar en destruir, por eso atentan contra las obras, la vida y la paz de los venezolanos.
Váyanse a buscar sus sueños dónde les de la gana y llévense su mala fe y los cascos que se han colocado para causar disturbios aquí, porque allá donde van, no los quieren, los desprecian por traidores. Pidan la nueva nacionalidad, pero mal podrían jurarle fidelidad a ningún patria cuando en efecto han traicionaron la suya. E su nuevo lugar, hagan lo que saben hacer: traicionar y lamer las botas al gringo.
Váyanse demasiado y pónganse sus orejas de Mickey, visiten los parques y cuando se les acabe el dinero, no busquen pensiones, ni barrio adentro, ni PDVAL ni Mercal, porque fuera de las fronteras de este país, en las tierras que ustedes, añoran no están ni Chávez ni Maduro. Es decir, no hay revolución.
Feliz viaje. Váyanse demasiado y bien lejos, pero tengan mucho cuidado porque a donde van, la guerra está más cerca porque se la llevan puesta.
*Profesora UNESR
mirlasand15@gmail.com
