Siendo yo estudiante de un liceo oficial, allá a finales de los años ’70, varios compañeros militábamos en un grupo de izquierda y nos relacionábamos con diversos grupitos y partidos de izquierda, entre ellos se encontraban los compas de Bandera Roja.
Cualquier actividad que se fuese a realizar, debíamos hacerla con el mayor sigilo para que BR no se enterara, porque era inevitable que sería saboteada o buscarían la forma de crear un clima de zozobra para “buscar al muertico”. Nosotros le llamábamos a la política de BR: “la política del muertico” porque inevitablemente los compas hacían el enorme esfuerzo de crear alguna situación para que hubiese algún muerto que llevaría inexorablemente a otra manifestación que generaría otro muerto y así sucesivamente.
Actualmente lo que vemos en algunas calles del este de la ciudad de Caracas, se asemeja a lo que viví yo en mi adolescencia en un liceo oficial, y, ¡oh maravilla.. están en cuerpo presente los de Bandera Roja y como antaño buscando su muertico! quienes se decían revolucionarios se han cuadrado hoy abiertamente con la derecha más radical en Venezuela.
Por algo siempre se afirma que los extremos se tocan.
La política del muertico parece ser la estrategia de este grupúsculo que no ha logrado entender que lo que se vive en estos momentos es un proceso que busca el mayor bienestar posible para las inmensas mayorías, este grupúsculo sólo puede existir en constante oposición contra quien sea y buscará alianzas donde sea para existir políticamente.
Sabemos, porque ya hemos vivido esta situación aquí en Venezuela, que los muertos siempre los pone el pueblo, nunca son de la oligarquía o de aquellos dirigentes, que cobardemente, mandan al frente a niños y jóvenes para que les hagan el mandado, mientras ellos se encuentran jugando golf, comiendo en algún restaurante del este de la ciudad o brindando declaraciones oportunas y alejados del lugar de los acontecimientos en sus medios de (in)comunicación.
Siempre es lo mismo.
Infelices aquellos políticos que pretenden llevar al país a caminos ya recorridos… de consecuencias conocidas… el pueblo ya los conoce y ¡No Volverán!
Ya el Presidente lo advirtió (atención a todos los medios de (in)comunicación); que se tomen un calmante y cojan mínimo, porque sino la Revolución le aplicará el mínimo.
No se puede tolerar otro intento de golpe, hay que aplicar la Constitución y las leyes, que para eso existen y fueron votadas como jamás nunca lo fue en Venezuela.
El camino es el socialismo, como única alternativa verdadera para lograr una mayor justicia social para el pueblo, aquellos que no estén de acuerdo se les respeta su opinión, pero la mayoría es la que decide…y este pueblo ya decidió!!
Sabemos que el verdadero peligro de todo el escándalo por rctfuiste, es que sirva de ejemplo para otros pueblos de América Latina. Los oligarcas y el imperio NO son intocables.
Esa es la lucha que se libra hoy, que el ejemplo de Venezuela no se riegue por América, por eso acuden a los hijos de papi y mami aquellos que no se atreven a dar la cara…
Ahora mas que nunca…
