Bastante urticaria ha levantado entre los dueños y mercenarios del periodismo de RCN (Radio Casa de Nariño, dicen con gracia los grafitos en las calles de Bogotá), la determinación del gobierno del Presidente Chávez de no renovar más la concesión en el espacio radioelectrico a ese bodrio conocido como Radio Caracas Televisión (RCTV), del que es propietario un fulano Granier, artista de la mentira, la manipulación y distorsion de la realidad social y política venezolana, para favorecer la codicia y el poder de las camarillas plutocraticas que se creen propietarias de toda la nación bolivariana.
Por supuesto, el sarpullido se ha hecho evidente en la Casa de Gobierno de Bogotá, enfrascada por esta época en una brutal campaña con glifosato, contra Rafael Correa, el nuevo Presidente de Ecuador, para impedir que haga efectivo a partir del 15 de enero su Programa de gobierno mediante la convocatoria de una Asamblea Constituyente, la cancelación de la base gringa de Manta (Plan Colombia), la no firma del TLC y el no involucramiento en el conflicto interno de Colombia, empezando por no considerar como terrorista a la guerrilla de las FARC, expresión de la resistencia campesina a la violencia narcoparamilitar auspiciada por mister Uribe Velez y su mister Freddy Padilla, segun se concluye de sus últimas declaraciones periodisticas para destacar su servicio incondiconal al Pentagono y el Comando Sur de USA. Ni mandado a fabricar para que se vaya a Irak con los nuevos planes de Bush.
La expresiva aflicción de RCN y sus "estrellas periodísticas" adobadas con mucha soltura erotica, asi como el farisaico lamento de las camarillas políticas del Estado mafioso, alude a un supuesto golpe brutal a la libertad de prensa y opinión con la determinación del gobierno bolivariano, reelecto en la persona del Presidente Chávez.
Extrañamente, el remilgo derechista fue acompañado por la inconformidad de ciertos "izquierdistas" pragmaticos de Bogota, que impugnaron la oportuna y necesaria medida de Miraflores. Salieron a rasgarse las vestiduras no obstante ser humillados y desconocidos por la maquinaria mediatica narcoparamilitar. Da pena estos "izquierdistas" de pacotilla.
Todos ellos se arropan en una distorsionada versión de la libertad de prensa y opinion, en la que solo cuentan los puntos de vista de minorias sociales retrogradas.
El ataque de RCN, que es el de Ardila Lule un reconocido gerifalte de los grupos grupos financieros colombianos, contra el Presidente Chávez, para defender a RCTV, su hermano gemelo de Caracas, no tiene un proposito distinto que el de resaltar las bondades de su mentirosa libertad de prensa.
La "libertad de prensa" que tienen en la cabeza los señores Granier y Ardila Lule es la más completa transgresión de la realidad de nuestras sociedades.
Para estos trogloditas, habitantes de la caverna neoliberal, el mundo no es más que su fantasmática mercantil. Todo lo reducen a la oferta y la demanda, a la libertad de empresa, a la globalización imperialista, a las privatizaciones, a las ganancias, a la codicia, a Macmundo, y pare de contar.
Según RCN en Colombia vivimos el paraiso total. La libertad de prensa es absoluta, siempre y cuando no se aparte de sus paradigmas sagrados.
Por supuesto, la realidad es otra, diamentralmente distinta. En Colombia solo se publica y difunde lo que conviene a la casta narcoparamilitar hegemónica. Quien se atreva a discrepar es asesinado, como ha ocurrido con cientos de periodistas independientes, o desaparecido, o torturado o encarcelado, utilizando falsos testimonios, como sucede con Fredy Muñoz Altamiranda, el corresponsal de Telesur, prisionero de la Fiscalia, en un repugnante montaje judicial y político, para impedir, precisamente, el aire fresco del canal bolivariano que cada vez conquista mas a los colombianos, no obstante el cerco y la censura narcoparauribista.
En la Colombia de RCN, El Tiempo, Cambio, Semana y demas pulpos del toxico mediatico, no existe la realidad de la otorgada impunidad paramilitar, la corrupción del uribismo con el presupuesto público, el Estado mafioso, la pobreza de milllones, el desempleo, la insalubridad, millones de desplazados por los escuadrones de la muerte y el Ejercito, el conflicto interno, la resistencia campesina, la narcoeconomia, la narcoparapolitica, los presos políticos y la oposición democrática y revolucionaria. Eso es un invento de disfuncionales y frustrados.
Estos temas son vedados para la fantasiosa "libertad de prensa" oficial.
Es la misma "libertad" alegada por Granier para perpetuar su monopolio de RCTV, utilizada para mentir y calumniar, para engañar sobre los logros de la revolución bolivariana y la gestión del Presidente Chávez.
RCN y RCTV corren lagrimas de cocodrilo por la "libertad de prensa" de minorias oligarquicas, impopulares y profundamente antidemocraticas y retrogradas.
Es por eso que el pueblo de colombia, por supuesto el de Venezuela, aplauden y apoyan entusiastas, la medida tomada por el gobierno de la República Bolivariana de Venezuela para profudnizar la revolución y aligerar la construcción del Socialismo del siglo XXI, que tanto paniquea a las mafias colombianas y su caudillo de papel en la Casa de Nariño. Saben que tienen sus dias contadas y la historia les prepara el juicio que les corresponde, como criminales que son.
duque188@yahoo.es