El semita por excelencia y padre de todos los Mensajeros, Abraham (P) germinó su linaje al profeta Jacob, en donde tuvo el privilegio que Dios, lo tildó como Israel, mientras su docena de hijos fueron mejor conocidos como las doce tribus de Israel. Todas las diferentes y santificadas biblias, más el único sagrado Corán, certifican que Dios, les otorgó privilegios a los semitas primordialmente e hijos del Profeta Israel, territorio conocido como Palestina. En aquel entonces aún no existían las religiones judías, cristianas o musulmanas, los semitas eran Haniff, seguidores del Mensajero Ibrahim (P). En conclusión la tierra prometida era exclusivamente a los semitas Haniff, herederos de los hijos de Israel (Jacob).
De donde carajo estos obtusos sionistas o inclusive judíos, llevan décadas insultando las inteligencias de los gentiles, proclamándose que Palestina, es el supuesto territorio que Dios, les prometió a estos supuestos bonitos catires ojos azules. El usurpado, repoblado y genocida estado de Israel, fue y es el último colonialismo europeo.
Los elegidos que tuvieron hace miles de años atrás el privilegio y designado pueblo de Dios, dejaron de existir, pero aún hay muchos semitas, mientras los Haniff, se extinguieron. Aun en este momento no militaba el judaísmo, cristianismo y mucho menos islamismo, los únicos sobrevivientes son sus razas ya que no exciten los Haniff, solo quedaban los semitas.
Irónicamente, la inminente e indetenible escamoteo del estado terrorista de israel, gracia a la marioneta Netanyahu, es la única nación en este mundo donde se prohíbe los exámenes de ADN, curiosamente ningún primer ministros israelí fue, es o será de la raza semita, más del 98 % de los judíos israelíes, igualmente no representa esta raza, pero sorprendentemente el 99 % de los originarios y refugiados dentro de sus raíces en tierra palestinos, son semitas puros. Los verdaderos nativos y únicos sobrevivientes, a quienes se les fue prometido este territorio, por su raza les pertenece. El judaísmo aún no estaba, solo había creyente del mensajero Abraham (P) otros rebeldes siguieron sólo a su esposa Sara y los que nunca faltan los idólatras.
El profeta Israel (Jacob) el único mortal que Dios, lo apodó, debería estar cansado y molesto en su tumba, viendo como profanan este noble nombre que Dios le proclamó. Mientras el estado de Israel representa sin ninguna duda una amenaza a los verdaderos herederos de esta tierra prometida. Luego después de miles de años vino Moisés, (P) allí la inmensa mayoría de los Haniff y semitas se actualizaron a la segunda religión monoteístas, la judía. Otros miles de años transcurrieron surgió el Mesías, (P) la inmensa mayoría de los semitas judíos se actualizaron a semitas cristianos, 620 pasaron y el ultimo mensajero de Dios, Muhammad (P) actualizo a la inmensa mayoría a los semitas judíos y cristianos al islamismo. Desde los territorios de los semitas, herederos de los mensajeros y profetas de Dios, y de allí se exportó las escrituras sagradas, la cuna de la civilización, hacia la humanidad, en donde casi la mitad de la población mundial, es monoteístas.
La tierra prometida fue a los semitas e hijos del profeta de Dios, (Jacob) Israel, mientras el estado de Israel es lo opuesto ya que representa a los luciferinos. Millones de judíos no reconocen a israel, y casualmente si a Palestina. Rechazan contundentemente al sionismo y mucho más sus rituales satánicos.
El estado de Israel, solo desprestigia al noble nombre de Jacob, sus rituales satánicos denigra a la religión judía, el sionismo solo desacredita a la hermana mayor monoteísta, mientras el genocida Netanyahu, menoscaba al mismo estado de Israel. Nada en este mundo podría detener la extinción interna de Israel, en el presente o futuro cercano, es insostenible. En pleno siglo XXI, aún persisten y persisten con el colonialismo salvaje y genocida, pero muy bien documentada. En este territorio deberían coexistir como en las demás naciones del mundo. Ningún judío fuera de israel se proclama superior y que todos los demás sean inferiores, mientras este en este usurpado territorio aceptaría tener este inaceptable y extremadamente racista práctica y derecho sobrehumano, seria indudablemente e indiscutiblemente diagnosticado, " Positivo en racismo.
El estado de Israel representa el mal en la tierra, mientras el profeta Israel, fue un hombre de Dios.