Crítica ácida

Mercenarios colombo-USA terror en incertidumbre haitiano-venezolana

Totalmente vencidos en su sinrazón, derrotados antes y después de compromisos comiciales, en nuestro caso por la futura mega elección del 21 de noviembre, un simple análisis comparativo de la consternación terrorista tramada y darle intensa cobertura mediática, convence al más desavisado y desinformado ciudadano o ciudadana de cualquier edad, que detrás de los sucesos políticos criminales en Haití y Venezuela con horas de diferencia, está la mano peluda y homicida de la ultra derecha de mente estrecha y orate, con su gente de debería ir legalmente presa, defendiendo el derecho ciudadano a la existencia, y no su actuación patibularia de amotinamientos preparados, a costa de incitar anormalidades en la vida diaria.

15 ex militares colombianos, cifra que reconoce el gobierno de Duque, y dos estadounidenses presentados por fuentes policiales de Haití, la nación cuna de las libertades y la liberación de esclavos en América hace más de dos siglos. Los mercenarios colombo gringos serían 26 de Colombia, capturados por el pueblo haitiano y la policía, tipos involucrados en el asesinato del presidente de Haití, hiriendo a la esposa que fue secuestrada con la excusa hollywoodense de "salvarle la vida" en un hospital de Miami. Los súpermen y batmen, apestosos mundiales en política, hacen de las suyas.

Si en los territorios conquistados en el "nuevo continente" hay pueblos abandonados casi desde la llegada del despelote colonialista español, completamente obtusos a la hora de gobernar, uno de los más perjudicados fue la isla Quisqueya, en lenguaje nativo "madre de todas las tierras", bautizada por los bárbaros como "La Española", comarca abandonada por los incapaces conquistadores, a merced de bucaneros franceses e hispanos. Es la historia lastimera de la región que hoy conocemos como República Dominicana y Haití, "descubiertos" en Diciembre de 1492 en supuesto proceso civilizatorio bajo los signos mortales: la espada y la cruz.

Hay coincidencia en la injerencia extranjera en Haití y Venezuela, que toma forma al conocer que nuestra ministra para las Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Carmen Meléndez, denunció como la derecha venezolana actúa con complicidad internacional en la planificación, suministro de armas y apoyo comunicacional a los grupos delictivos que operan en Caracas, y a estas alturas financiamiento estructurando sistemáticamente ataques a nuestra sociedad, amedrentando, hiriendo y asesinando a gente inocente. Haití está ocupada por fuerzas yanquis desde un terremoto o calamidad natural, Venezuela se ha negado a correr la misma suerte sugerida en el deslave en 1999, que arrasó parte del Litoral Central.

En la repetición que observamos acerca de la historia de pueblos valientes que se sacuden de los imperialismos dominantes, a pesar de haber desaparecido a sus etnias como en el caso de la isla madre de todas las tierras en la región hoy y siempre haitiano dominicana, o en la Venezuela liberada por Bolívar como ejemplo de expulsar a sus colonialistas, volveremos a vencer con las ideas de los predecesores esclavos haitianos comandados por Vincent Ogé, Alejandro Petión y en Venezuela Simón Bolívar, que en sus ideas independentistas y de liberación de la esclavitud, contó con la ayuda de las y los haitianos que eran mayoría y sin embargo apartados en el reconocimiento de sus derechos.

A quienes están propalando como medida de expulsión al gobierno revolucionario bolivariano, la unión de la delincuencia organizada con los directivos ladrones redomados pillos de la politiquería nacional amparada por capital robado a Venezuela, con respaldo de gobernantes pro gringos, la recomendación es nutrirse un poco de las raíces de nuestra gesta emancipadora, se darán cuenta que tenemos patria y por algo lo decía extrayendo pensamientos bolivarianos, el sin par venezolano nacido en 1954 Chávez. Hasta un sacerdote intervino en la historia de Haití, Dutty Boukman, organizador de un movimiento insurreccional que determinaría el inicio de la revolución haitiana, antes que la nuestra.

Es tan excluyente con los haitianos la sociedad "representativa" que NO HAN APLICADO NINGUNA VACUNA ANTI COVID 19 en esa nación de 11 millones de martirizados, donde el 20 % se lleva el dinero, entrega el país y le sabe a casabe que dos millones de niños no tengan escuela y estén desnutridos, y que 59 de cada cien habitantes vivan en condiciones de pobreza prácticamente extrema. La ONU y la Unión Europea, no pueden esta vez dejarle Haití a los del FBI y la DEA que, según los gobiernos de Washington y Bogotá, van a "colaborar" con la detención de los asesinos del Presidente, a esos criminales ya los atrapó el pueblo haitiano. Y no serán los "salvadores" del dueto Batman y Robin, Biden y Duque, los que pretendan representar a la justicia internacional.



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Luis Sánchez Ibarra


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