El presidente de Siria Bashar al Assad y el presidente de Yemen Ali Abdullah Saleh, son los que faltan por asesinar en la lista de la OTAN para la nueva geoestratégia que persigue EEUU, Europa y la Liga Árabe en África y Medio Oriente, los cambios en Túnez, Egipto y Libia, les permitirá controlar a la nueva clase media africana calculada en unos 800 millones de personas con poder adquisitivo para que impulsen la economía neoliberal y el control de las materias primas.
La continuidad o no de Bashar al Assad, está supeditada a lo que decidan EEUU con Israel respecto a Palestina por la frontera de antes de 1967, por lo pronto el presidente sirio conto con el apoyo de Francia y de la Liga Árabe a más de la complicidad de EEUU, no les importa la represión que deja más de 3000 muertes con Siria, la violencia no es el caso tiene mucho que ver con el Golán en poder de Israel.
Lo que pudo empezar como una protesta social (primavera árabe) fue dibujando en Washington, una oportunidad que no se podía desaprovechar para un nuevo orden en África, destronando gobernantes que habían ayudado a conservar por décadas. Entre Siria y Yemen, este último país es el más importante para el nuevo orden no solo por Al Qaeda, por su ubicación geográfica le permite a EEUU y Europa dibujar con Egipto, Libia, un total control económico-energético del área por donde transita el 6% del comercio mundial; la muerte de Gadafi abre el camino a sociedades petroleras y bancarias mundiales Exxon, Chevron, BP, Barclays, JP Morgan, Bank of América, hacen fila para explotar la masa de gente como las materias primas para que el G7 no dependa tanto de los BRICS o del G20.
La crisis económica de EEUU y Europa afectan las economías emergentes en China, Brasil e Indonesia, desde las ventas minoristas menguantes en Brasil hasta menores pedidos para productos fabriles en Sudáfrica, además de las gestiones chinas para posicionar sus bancos en diferentes regiones del mundo algo que a estadounidenses y europeos no conviene en crisis como están.
China se mueve en base a tres grandes factores: inversión, exportación y consumo, Beijing tiene más de 800000 millones de euros en reservas si esta moneda se devalúa los chinos pierden mucha plata, con los europeos China comercializa un 17-18% cantidad similar con los estadounidenses, pero, la política estratégica de China es invertir más en Asia, América Latina y África, con estos últimos dos continentes viene la disputa con los europeos y estadounidenses; África es el continente de moda en estos momentos para establecer una nueva geopolítica liderada por EEUU y Europa.
A estadounidenses y europeos no les interesa para nada que el yuan gane terreno en el Norte de África y Medio Oriente, la pugna comercial entre China y EEUU se agudiza y son los mayores socios económicos del mundo, Beijing compro papeles del tesoro estadounidense por más de 750000 millones de dólares, sin embargo, es acusada por el Congreso estadounidense de sostener al yuan devaluado y de ofrecer subsidios a su producción, respuesta China a la intromisión estadounidense en Taiwán y el Tíbet.
Washington y Beijing llevan años acusándose mutuamente de tener al dólar y al yuan devaluado, las importaciones entre los dos están a la baja y son las dos primeras economías del planeta. Asia es una de las regiones más afectadas por la recesión dice Anoop Singh director del Departamento de Asia-Pacifico del FMI, el mejor pronostico a la baja del fondo para Asia incluida China e India, es de un crecimiento del 7.6% para el año que viene para que el resto del mundo pueda tener su ritmo de crecimiento para salir de la crisis es, que los chinos y el resto de los BRICS crezcan alrededor del 8.5% del PIB.
EEUU sabía que la inyección de más de 1 billón de dólares como capital especulativo incrementaría la inflación en Asia y Latinoamérica perjudicando la capacidad exportadora y los países recortarían las tasas de interés para detener las caídas de sus monedas conforme la crisis de deuda de Europa promueve la huida hacia el dólar, ese manejo económico dejo expedito la estrategia económica-militar por África; había que deshacerse de Gadafi, era un tremendo escollo por su liderazgo en la región.
Se calcula que América Latina invirtió unos 35000 millones de dólares en reservas en septiembre para detener los descensos de sus divisas; los gobiernos quieren evitar se repita lo del 2008 cuando los mercados emergentes crecieron en el momento que el mundo desarrollado caía, sin embargo, cuando Lehman Brother se desmorono las economías emergentes se congelaron obligando a los gobiernos a intervenir con planes de estimulo.
Desde el punto de vista estratégico Sudamérica representa para Washington, hoy, una paradoja que se mueve entre el poder de las naciones desarrolladas la de sus gobernantes y los derechos de sus pueblos y entre la soberanía de los países bolivarianos, esta es una excusa de dominación y la supuesta responsabilidad para Washington de su seguridad nacional en donde Venezuela, ocupa el primer lugar de la región para intervenir.
El retiro de las tropas de Irak, no solo contempla ganar votos para el alicaído candidato Obama, persigue también una presión para Caracas, ahora que más de 160000 soldados veteranos se encuentran en la desocupación, el pentágono no puede darse el lujo de tener esas tropas sin hacer nada con las bases estadounidenses en Colombia, ahora sí, cierran la pinza sobre Venezuela, el año 2012 es de mucha importancia para la región, porque Obama ni la OTAN cometerán el error de una guerra con Irán, en momentos que la economía está en crisis y los persas llevan años preparándose para una intervención extranjera, además, disponen de tecnología militar de punta. Venezuela es el país candidato para devolver el honor al imperio.
Con el desenlace de Libia que se veía venir, no es secreto para nadie, que lo que EEUU y Europa buscan es continuar con la dependencia mientras más poder energético, tecnológico y militar tenga menos patrimonio de derechos existirá para el resto de países, mientras más potestades menos espacios de autonomía y mientras más intervención militar-económica menos imaginación y creatividad, así se explica la titularidad de la política exterior de EEUU, ella no garantiza autonomía ni soberanía indispensable para los Estados críticos, libres y pensantes.
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