Mi sueldo: dos canillas y una torta burrera

Este jueves le llegó al celular de mi esposa el mensaje del banco Venezuela indicándole que le habían depositado su quincena de la jubilación, 100.800, bs. Me quedé mirando la cifra reflejada en la pantallita del aparato pensando que se podía hacer con eso; ¿comprar un pollo? Imposible, si acaso serian unas alitas, pero ahora no las venden, te llevas el pollo completo que cuesta un ojo de la cara o no lo llevas. ¿Carne?, muchísimo menos, te venden es el kilo y ahí si es verdad que te sacan los dos ojos con parpados y todo. ¿Queso?, si consigo que me vendan 100.000bs eso es una hispitica que no me alcanzará ni para echarle a los espaguetis que, a Dios gracias, tengo en la alacena tratando de estirarlos como chicles. ¿Huevos? Me llego al bachaquero de la esquina a ver si me vende unos cuatro, porque en el supermercado el medio cartón está en 130.000bs.pero el bachaquero me dice que no tiene punto, quiere es efectivo, del cual carezco, entonces no me queda más que seguir adelante a ver que consigo.

Entro a la panadería y recuerdo que el día anterior compre una canilla en 25,000bs y me digo que con dos y unos 50.000bs de mortadela resuelvo el problema de la merienda de la tarde. Pero cuando le pregunto a la despachadora a como está la canilla, algo que hago cada vez que voy a comprar sabiendo que todos los días aumentan los precios, casi me da un mareo cuando me dice que cada canilla, que apenas mide menos de dos cuartas, están a 35.000bs, le pregunto que porque si el día anterior estaba a 25.000 y me da la misma repuesta de antes:"es que compraron la harina más cara" y me enseña una factura pegada en la vidriera. Le pregunto si ellos compran harina todos los días y me responde con una sonrisa de yo no fui. No me queda sino comprarme dos canillas y una torta burrera, todo por los 100.000bs. La jubilación de mi mujer, que tengo que administrar yo debido a la desgraciada enfermedad que padece y que lleva el nombre de un alemán.

Llego a Casa y escucho en la radio: EL DÓLAR REBASÔ LOS DOSCIENTOS SESENTA MIL BS. Y pienso lo que ya todo el mundo sabe, estos comerciantes de mierda esperan que el maldito Dólar criminal suba para fijar sus precios y echarle la culpa al gobierno. Y me hago la misma pregunta de todos los días ¿QUE COÑO ESPERA EL GOBIERNO PARA ACABAR CON ESTA GUERRA QUE NOS ESTÀ AHOGANDO? SEÑORES, ACABEN DE TOMAR EL TORO POR LOS CACHOS, LA VAINA SE ESTA PONIENDO MUY FEA Y LA EL PUEBLO TIENE UN LIMITE Y SABE PARA DONDE AGARRAR SI SE PRESENTA UN VAINERO Y NO SERÀ PARA MIRAFLORES.

 

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Hermo Rosales

Comunicador social, poeta, cuentista, escritor, autor entre otros de los libros, “Evocaciones”, “El jardín de las Dalias”, “Mi abuelo el cazador”. Sus trabajos han sido publicados por los diarios “Provincia”, “SigloXXl”, “El Norte” y la revista “Síntesis”, es cofundador del semanario “Anzoátegui hoy”

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