Muchas son las personas que teniendo una póliza de HCM o de seguro de su vehiculo viven una odisea para ser favorecidos con la atención de este.
Si llegas a una clínica muriéndote te dejan sentado en una silla aguantando el dolor, en otros casos gritando de su intensidad, y te dicen muy cortésmente “tiene que esperar porque hasta que no nos den la clave no se le puede atender”, nuestros familiares ponen caras de pocos amigos y al enfermo lo que menos le pasa por la mente es recordarle todo su árbol genealógico a quien le da la información. Al darle la clave, le dan ingreso, le ponen un suero para el dolor, sin sabor que tiene y sin ningún estudio previo. Si por casualidad fue un simple cólico, le dicen “tiene que bajarse de la mula porque el seguro cubre es a partir de 500 bolívares y la factura son 350 (200 por el suero y 150 para el médico), si el pobre diablo no tiene dinero comienza a gastar el saldito del celular llamando a un amigo o a un comodín, a ver quien le presta los realitos. Pero si la cuestión es de operación enseguida lo pasan pare el pabellón, que no es que le van a dar un pabellón con baranda, sino que le comienzan a echar cuquillo, manifestándole que el dolor es producto de una apendicitis, en algunos de los casos resultó un simple cólico, pero igualito le cobran los gastos incluido el médico principal mas dos ayudantes que nunca están, pero por acuerdo entre ellos los colocan para “ayudarse” en cada operación. Pero lo peor no ha pasado, luego que esta persona es dada de alta viene una chica muy bonita de la administración y le dice “mire, sabe que tiene que pagar una diferencia que no cubre el seguro”, al paciente le vuelven los dolores mas fuertes y se retuerce manifestando "hay mi madre cómo pago eso dos mil de diferencia".
Los casos de emergencia son de obligatoria atención y los servicios básicos de primeros auxilios deben brindarlo sin espera ni dilaciones.
El caso de los seguros de vehículos es otra odisea, luego que usted hace una cola enorme en una agencia para poder comprar un carro, resulta que tiene un siniestro o simplemente le roban una pieza automotriz, se cansa de ir una y otra vez al seguro buscando la orden de reparación, entonces le dicen que no tienen convenio sino con dos o tres talleres en la zona, y la cola en esos talleres es de espanto y brinco para que le llegue el turno que le reciban su vehículo, cuando esto sucede no hay el repuesto y entonces se la cala seis meses, un año o hasta mas tiempo andando en el carrito de Fernando (un ratico a pie y otro caminando) porque su vehículo está en el taller.
A todas estas ¿quién responde?; pienso que el INDECU debe tomar cartas en el asunto y obligar a que se cumpla con un servicio que se ofreció en una póliza de seguro, que de paso asegurar un carrito cuesta un ojo y parte del otro que no muchos están en condiciones de sufragar, menos aún un seguro de HCM, por lo que se deben revisar estas tarifas el pro del beneficio de todos los ciudadanos.
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