“Jorobar: Molestar o fastidiar: no me jorobes y déjame en paz.”

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Esta muy bien que  se defienda la libertad política y económica plasmada en la CRBV, con el argumento de que fomenta la diversidad comercial y contribuye, por lo tanto, a su fortalecimiento. Los impulsos del empresariado honesto y trabajador, que tengan alguna importancia, parten de un principio central de crecimiento, que los guía en una cierta dirección, como los árboles buscan la luz. Cada quien tiende instintivamente a lo que le conviene mejor. Y hay que dejarle en plena libertad para ello, porque, en general, los impulsos y los deseos dañinos de enriquecerse “robando” a los trabajadores como se lo espetó una alta funcionaria de la Inspectoría del Trabajo en El Tigre/Anzoátegui a los “jurisconsultos” de Transcombam, por el tumbe de los salarios reales, a estos vigilantes, ante el procedimiento abierto a esa empresa en la semana del 28/03/ al 01/04 2011, que procede para impedir el enriquecimiento anormal de estos empresarios. De ahí, por ejemplo, la proverbial malignidad de los jorobados. Los deseos de explotar, no son sino impulsos contenidos. Cuando no es satisfecho un impulso en el momento mismo de surgir, nace el deseo de las consecuencias esperadas de la satisfacción del impulso. La vida ha de regirse principalmente por impulsos. Si se trabaja por deseos se agota y se cansa al hombre, haciéndole indiferente a los mismos propósitos que había trazado para vivir. Pero los impulsos revolucionarios que deben fomentarse son los que tienden a dar calidad de vida, a la creatividad en general. 

Las denuncias contra esta empresa desde enero de 2011 en www.aporrea.org; y el diario Mundo Oriental, hechas por este columnista. No esta motivada por impulsos de envidia, destrucción, etc., porque así auto refutaría mi propia doctrina. Me contenta con saber que en estos empresarios no procede el principio central del legal crecimiento económico. No lo han podido probar. No pueden probarlo.                                          

Un árbol extiende sus raíces a la tierra de otro árbol y se apropia de su savia. No logran demostrar que sus impulsos dañinos de explotación sean menos "socialistas" que los benéficos. Tampoco que sea perjudicial la contención de sus pacatos alegatos. Hay seres humanos desvitalizados precisamente porque se entregan sin reserva a la satisfacción de sus contratantes. La doctrina socialista y cristiana no es sino una tentativa de justificar científicamente la afirmación romántica de que el hombre es naturalmente bueno y está libre del pecado original. Pero el capitalismo tiene ya dos siglos de experiencia histórica. Hasta han ido ensayando en países nuevos, donde no coartan su desarrollo los recuerdos y las tradiciones del socialismo cristiano, fundado precisamente en el dogma del pecado original. 

Las miradas de la opinión pública, en esta entidad federal están vueltas, en estos meses, hacia esta empresa por su cualidad “fascinadora”. Es verdad que en los inicios de la revolución bolivariana fueron unos tiempos oscuros, y que sus costumbres, y no sus leyes, obligaban a sus ciudadanos a permanecer  callados ante una instancia determinada. Pero el borreguismo ya pasó, por lo menos en algunas autoridades; los verdaderos revolucionarios no están obligados a profesar dogmatismo alguno.         

Muchos no profesan públicamente doctrina alguna. Son libres. La extensión del territorio les hace más libres de lo que muchos revolucionarios podemos serlo a veces en nuestras estrechas mentes.                  

Y el resultado de dejar pasar todo esto es una forma de elevar el índice de criminalidad laboral y social, la disolución de los contratos a estos buitres se nota ya en puerta, que han aumentado tan tremenda crisis económica y política en sus trabajadores, la representación de los trabajadores han podido reclamar recientemente sus derechos, en medio de la atónita representación de Transcombam, ya que no pueden encontrar su salvación, solamente posible en un régimen fascista y dictatorial, que restablezca la disciplina social con mano dura. 

Sólo se ve ahora, que ya las autoridades del trabajo van a citar  a las autoridades de las Empresa mixtas de pdvsa: Petrooritupano, petrozumano, petrosiven, bielovenezolana entre otras. Ellos mejor que nadie podrán explicar sin rodeos: ¿el porqué en plena revolución bolivariana se permite esto? ¿Será nuestra doctrina? 

“No hay más que dos confrontaciones posibles: una interior y otra exterior, la religiosa y la política. Estas son de tal naturaleza, que cuando el termómetro religioso está subido, el termómetro de la represión está bajo, y cuando el termómetro religioso está bajo, el termómetro político, la represión política, la tiranía, está alta. Esta es una ley de la humanidad, una ley de la historia." 

A la historia los grandes teóricos y filósofos de la política han  apelado para evidenciar la exactitud de sus parábolas. No era, sin embargo, muy necesaria. En el pecho todo hombre siempre ha tenido escrito que la práctica del bien exige libertad, pero la del mal, exige cárceles y pesados grillos.

Percasita11@yahoo.es