La firma del Acuerdo alcanzado entre representantes del Ejecutivo Nacional y de las fuerzas opositoras, cuyo texto establece el reconocimiento a las disposiciones constitucionales como instrumento para resolver las diferencias políticas, tesis sostenida desde el inicio de las conversaciones por la delegación del Ejecutivo Nacional, más que un triunfo político para el Gobierno, representa un respaldo al sistema democrático venezolano, pues con esa firma ganamos todos.

De acuerdo a ello todos debemos hacer votos por el cumplimiento de los compromisos alcanzados, en lugar de colocar el acento en especulaciones sobre quien no cumplirá. En esta práctica se encuentran especialmente los medios comerciales de difusión masiva, cuyos titulares destacan en estos días, las dudas que algunos actores políticos manifiestan sobre el cumplimiento de este compromiso por parte del Gobierno.

Se considera conveniente, en atención a esos titulares, elaborar una breve síntesis de los más importantes hechos ocurridos durante el último año.

Después del golpe de Estado, en abril del año pasado, el Presidente Chávez invitó a toda la sociedad a realizar un diálogo que permitiera un mínimo de consenso en el funcionamiento de las diversas instancias del país, para proporcionar de ese modo la ansiada paz reclamada por la mayoría de la población. Para reforzar esta intención le solicitó al ex presidente de Estados Unidos y Premio Nóbel de la Paz, Jimmy Carter visitar Venezuela.

La iniciativa del Presidente fue acogida en principio por diversos sectores de las fuerzas opositoras, desafortunadamente a muy pocos días de haberse iniciado los encuentros, algunos representantes de esos grupos comenzaron a retirarse del diálogo, entre ellos los representantes de los medios comerciales de difusión masiva.

Las fuerzas opositoras eligieron el camino del enfrentamiento en lugar del diálogo, declarando los días 11 de cada mes como día de luto nacional, fecha en las cuales realizaban manifestaciones, algunas de ellas con signos de violencia. Al acercarse el 11 de cada mes toda la sociedad vivía días de angustia ante el temor de lo que pudiera ocurrir ese día en las manifestaciones. Así llegó el mes de octubre, se cumplían seis meses del golpe de Estado.

Considerando que una cronología contribuye a visualizar de una manera más óptima, se entregan algunas fechas:

10 de octubre:

Concentración Avenida Bolívar - “Elecciones ya” consigna central, Recolección de firmas para solicitar un referéndum consultivo. Ultimátum al Gobierno Nacional

21 de octubre:

PARO NACIONAL
Continúa la recolección de firmas para solicitar el referéndum consultivo.

4 de noviembre:

Entrega de las firmas a la Directiva del Consejo Nacional Electoral, exigencia para la realización del referéndum consultivo en 30 días.

1° de diciembre:

PARO NACIONAL, convocado antes de que se cumpliera la fecha dada como plazo para la realización del referéndum. La continuación del PARO se anuncia cada día.

6 de diciembre:

Inicio del SABOTAJE PETROLERO

enero 2003:

Para presionar la realización del referendo consultivo, la Coordinadora Democrática decide unilateralmente incorporar a un miembro a la directiva del Consejo Nacional Electoral.

2 de febrero:

FIRMAZO

Se considera conveniente recordar que a la directiva del CNE a la que se designa un miembro más, es la misma que había sido cuestionada anteriormente, por representantes de diversos sectores de los grupos opositores al Gobierno. Así como recordar que mientras se exigía la realización de elecciones o de un referéndum consultivo con carácter revocatorio, eventos no establecidos en la Constitución Nacional, se entorpecía la aprobación de la Ley del Poder Electoral, instrumento indispensable para designar la nueva directiva del Consejo Nacional Electoral.

Mientras las fuerzas opositoras realizaban las acciones antes mencionadas, el Gobierno Nacional trataba de mantener el orden público y buscar salidas al conflicto político planteado. Una de las iniciativas del Ejecutivo Nacional fue invitar al Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), doctor César Gaviria, con el objetivo de que su presencia sumada a la de representantes de otras instancias, Centro Carter y el Programa de la Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) facilitaran la instalación de una Mesa de Diálogo, en la cual los actores participantes en el juego político intercambiaran opiniones con el firme propósito de llegar a acuerdos.

En un comienzo la reacción de algunos sectores de las fuerzas opositoras fue de oposición a la presencia del doctor César Gaviria, señalando que su participación no sería imparcial. Anteriormente en el mes de abril se había sostenido una reacción similar hacia el ex presidente Jimmy Carter.

Afortunadamente la Mesa se instaló el 8 de noviembre. Al iniciar su trabajo ya tenía una condición, se le exigía que debía llegar a un acuerdo antes del 4 de diciembre fecha fijada por la fuerzas opositoras para realización de un referéndum consultivo.

Como se puede observar, después de realizar el recuento presentado, desde el comienzo la propuesta gubernamental estuvo sustentada en el pleno y absoluto respeto a las disposiciones de la Constitución Nacional vigente y a la institucionalidad democrática, en cambio, el camino recorrido por las fuerzas opositoras fue de franca violación a las disposiciones de nuestra Carta Magna. Por lo expuesto anteriormente es posible afirmar sin duda alguna que no será precisamente el Gobierno Nacional quien pueda no cumplir el acuerdo firmado hoy jueves 29 de mayo.