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Billetes verdes no llegan al pueblo y la comida se dolariza por oligarquía y neoliberalismo

En su inquietud de mantener sus propios intereses personales e individualidad, el género humano se ha concretado en formar sus propias potencialidades, olvidándose de su prójimo. En su sentimiento de aislamiento y de impotencia ha creado sus propias máquinas, lo mismo, que sus manos han forjado para fomentar una ilusión de constituirse en el centro del mismo, y de allí, salta a un carácter asumido por todas sus relaciones y redes sociales. Hemos sido manipulados en América Latina por años, haciéndonos ver que el espíritu del socialismo era o es su benefactor al cumplimiento de las leyes del mercado y el establecimiento de unas empatías colectivas y personales que nos llevan a entablar una lucha con los demás. Haciéndonos olvidar, mediante una manipulación atroz, quien era y es, el verdadero dueño del capital.

De esta manera, la relación entre los seres humanos es relativa e instrumental, lo que nos lleva a una mutua utilidad hasta finalizar a la destrucción masiva,

De Alemania, heredamos un carácter sadomasoquista que se viene caracterizando en estar sometido a una autoridad y las pseudopolíticas nos indican que debemos estar sometidos a ella. Esta dominación nos lleva a nuevos desafíos hasta tener impulsos sádicos que nos hacen ver que tales hechos es una aplicación de nuestros deberes, por lo tanto, tales reflejos actúan en las capas más profundas de nuestra personalidad.

Canadá, Estados Unidos de Norteamérica, India, Francia, Alemania y Reino Unido son los países que tienen los programas de inteligencia artificial y Europa, es el Continente poseedor de la estructura industrial más utilizada y, hoy es hostigada por España bajo el control de ciertos sectores de la izquierda, impulsada por José Luis Rodríguez Zapatero y Pablo Iglesias. Los cuales desean controlar esta fuerza popular que incluye Venezuela y Argentina, pero, su instrumentación se encuentra escondida en Alemania, un país que le dio entrada a la migración musulmana mediante la influencia de Angela Merkel.

Hay un rango autoritario en la nueva izquierda, que es, la tendencia a desafiar la autoridad ya establecida e indignarse por toda intromisión desde arriba, pero, el desafío desfigura todo el cuadro político, de modo que las tendencias al sometimiento y el solo recordar que esa rebeldía popular es falsa, porque son atacadas como masas y dominadas y humilladas. Pareciese, como si las autoridades externas e internas ejercieran ya funciones de algún significado en la vida del individuo.

Los hombres que ejercen funciones políticas en este tiempo contemporáneo se convierten en egoístas, buscan su propia libertad y, por ende, la naturaleza siempre nos expresa que el agua estancada se corrompe, mientras la que corre se mantiene fresca y buena para el uso común. Tengamos cuidado que el campo religioso llegó para engañar al género y la denominan espiritual, es falso, la Palabra de Jesús son de conocimiento, porque el hablo de una relación con el Padre, porque, tenía certeza de la creación y hablaba conforme a cada cosa es.

La reciente entrevista del presidente Duque es ejemplarizante. Al comienzo de la invasión española al continente americano, los recién llegados no trajeron mujeres blancas para calmar la libido (el deseo sexual). Acudieron por tanto a las indígenas durante las primeras décadas y los primeros siglos. Era inapelable. Tampoco traían edulcorante alguno para su dieta alimenticia a la que estaban acostumbrados allá en España. Al principio su vida acá en América fue simple y sin sabor a pesar de que en su bagaje genético portaban el gusto por el dulce de los jugos o guarapos de la caña de azúcar madura, solidificados después de su cocción a punto en pailas y calderos con altas temperaturas y enfriados al aire natural en forma de panelas y de bloques o panes de mieles cristalizadas, hábito juiciosamente practicado durante los mil años de haberlo recibido en Málaga y Motril de manos de los moros, y estos de los romanos, los cuales a su vez los habían también heredado desde los confines de la India y Nueva Guinea, dos mil años más atrás.

Así era la cronología de la caña de azúcar hasta cuando fue llevada por los navegantes españoles a las islas de Madeira y Canarias. Allí esperaron pacientemente a que Cristóbal Colón convenciera a los Reyes de Castilla y Aragón para navegar a Occidente y llegar a las Antillas Mayores del caribe, donde los colonos la sembraron en La Española hoy República Dominicana y convirtieron su cultivo en factor importante de la invasión europea a la América tropical. De esta manera lograron endulzar sus vidas.

Entró entonces la caña de azúcar en franca competencia con las especies del reino animal: bovinas, ovinas, equinas, porcinas y caprinas y con otras del reino vegetal, entre ellas, leguminosas y gramíneas que llegaron con los españoles. En los sitios de recría y en los viveros levantados en La Española, Puerto Rico, Cuba y Jamaica, la caña fue preponderante. De inmediato se constituyó en fuente de alimento por su contenido en carbohidratos esenciales para los humanos, en forma de panelas y mieles, lo mismo que en proteína y fibra con el forraje verde (cogollos) que proporciona a los herbívoros.

Se preparó así la caña dulce durante dos décadas, después de la llegada de Colón a las Antillas Mayores, para dar su salto final al continente americano y comenzar el heroico camino de cinco siglos hasta hoy, acompañando a españoles, aborígenes americanos y africanos en la colonización y consolidación de la Gran Colombia.

La primera expedición al interior del país desde el Atlántico, la organizó Gonzalo Jiménez de Quesada en el puerto de Santa Marta en 1536 con 800 hombres de a pie, 170 caballos y un tanto de indígenas como cargueros. Su propósito era explorar aguas arriba el río Grande de la Magdalena en busca de oro y más oro hasta el Perú. ¡Qué ilusos! La conquista del Perú ya la había logrado Francisco Pizarro cuatro años antes por mar y los expedicionarios samarios se encontraban a enorme distancia de aquel país. Ni Jiménez de Quesada ni su gente tenían la menor idea que el oro buscado lo llevaban sus indios cargueros a cuestas sobre los hombros en forma de estolones (tallos) de caña miel o caña de azúcar que ya habían aprendido a sembrar con esquejes en los primeros cultivos efectuados en el puerto atlanticense.

En el recorrido de la expedición, en los sitios de descanso donde se detenían para reponer su andar, sembraban matas de caña como mojones señaladores del sendero de regreso que encontrarían meses después ya crecidos para proveerlos con el dulce de sus jugos. Así al menos lo practicaron hasta donde les alcanzó la semilla en ese primer viaje por las sabanas del Cesar.

Así, sucedió con Hugo Chávez Frías, les abrió el camino a los militares y le entregó los depósitos de alimentos y las tierras expropiadas, en un dos por tres quedamos en la miseria, porque vino el control mayor de nuestra riqueza que era el campo agrícola, desde los tiempos de Juan Vicente Gómez hasta llegar al oro y el petróleo.

Ahora, estamos en una era digital y los chinos se apresuraron en descubrir los secretos de su sinergia a quienes le proporcionan riquezas y, están pagando las consecuencias por novatos. La guerra contemporánea es cibernética y de virus, una guerra bacteriológica oculta y que Julián Assange lo informó quince años atrás y Stephen Hawkins poco tiempo antes de morir lo demás es ignorancia.

Hay que dejar de ofender a los jefes imperialistas y respetar. Los rusos son los que le cuidan y desforestan las siembras de uva para producir vino a Trump, el único que se disgusto con Trump fueron Los Clinton. Perdieron todo, hasta jugar en los campos de golf del presidente norteamericano.

No hay que ser tan imbéciles, quien maneja la tecnología y el tránsito del petróleo domina el mundo. Los españoles caminaron nuestras tierras, bajo de ellas estaba las riquezas.

Los de izquierda, pregonan, que la economía, es un fenómeno, que en sus avances exitosos debe tener como resultado el beneficio de la humanidad, tomado como un bloque y también como un desarrollo individual. Con base en este postulado, los súbditos pagan sus tributos, y el estado recompensa estos valores, con servicios de subsidios, haciendo del ser, la felicidad de vivir. Toda una propaganda

Contrario a esto, en Colombia, parece ser que la felicidad económica, solo la tienen el puñado de personas que ostentan el poder político con la concentración de riqueza material llevada en sus manos. Y a esto le agrego, que los Ministros de Hacienda, están mandados a hacer, para que lleven sus finanzas hacia el aparato oficial, y poder caminar sobre unos millones, sin que poco importe el sufrimiento del común de los ciudadanos. Mientras, asesinan a los guerrilleros igual que en la época de Eliécer Gaitán, luego de abrirles el camino de la montaña

Un desprendimiento filosófico, llevado con alto índice de moralidad, que consiste en dar, entregar, servir, obtiene resultados maravillosos, que, desde luego, llenan todas las necesidades de ofrecimiento capitalista y el espíritu de toda una "maloca" nacional, haciendo, que la sociedad sea más próspera, y, por lo tanto, con menos índices de mortalidad y de maleficios, como robos o crímenes. Tendríamos menos presupuestos para levantar cárceles y más obras de techos de familia con lindos paisajes que adornen un ecosistema bien cuidado.

De ese beneficio, solamente se benefician un diez por ciento de la población que controlan los dólares, los demás que se mueran de hambre, porque el capitalismo y el neoliberalismo son el Arco de la nueva economía motivada por los chicos burgueses del socialismo.

El régimen de nuestra patria Venezuela, lo combina la directriz nacional, con su presidente y sus ministros, con la federal democracia de la elección popular de gobernadores y alcaldes, que dan un marco teórico para poner en buena marcha planes y programas de orden social, sin mucho papeleo centralista. Pero para desgracia, lo más descentralizado, ha sido el PAE, (Plan de Alimentación Escolar) y es allí en donde más han caído en horrores los mandatarios locales en un alto porcentaje a nivel nacional. Sin olvidar las cajas CLAPS que en Carabobo son entregadas abiertas y son controladas por un eje político adverso al presidente y son revendidas en los mercados periféricos de la región

Si la ética económica no sale del ejecutivo, si debe darse en los medios de control, llamase contraloría, fiscalía, jueces y fuerza pública de control. Muchas veces hasta hay que cortar cabezas, como en otros países, para que se dé la sagrada utilización de los bienes públicos. Los chinos, lo hacen.

No funcionamos como una manada que se mueva en conjunto, tras un liderazgo absoluto, con la entrega incondicional cada uno de sus miembros bajo la convicción de que todo el esfuerzo necesario a nivel individual redundará en beneficio de todos.

Aquí cada uno vela por sus intereses y a nivel gremial sucede lo mismo; los profesores se manifiestan por sus necesidades y aspiraciones particulares; poco o nada importan las de los otros colectivos, ni siquiera las de los propios estudiantes a los que siempre usan como carne de sacrificio para alcanzar sus prerrogativas. Los sindicatos marchan normalmente solos y se unen eventualmente a movilizaciones generales en fechas señaladas. Ni qué decir de las comunidades indígenas que siempre han elevado su voz de protesta para pedir reivindicaciones, generando muchas veces daños colaterales en las comunidades hermanas como las campesinas, por ejemplo.

El ciudadano de a pie, el desempleado, el informal, el trabajador del sector privado, el pequeño empresario no tiene representación en las movilizaciones sociales.
Por este fenómeno de dispersión, las huelgas nacionales no les generan grandes traumas a los gobiernos y las cosas siguen funcionando como siempre.
El escepticismo es el producto de los pobres resultados de las movilizaciones que se han hecho en términos generales.



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Emiro Vera Suárez

Profesor en Ciencias Políticas. Orientador Escolar y Filósofo. Especialista en Semántica del Lenguaje jurídico. Escritor. Miembro activo de la Asociación de Escritores del Estado Carabobo. AESCA. Trabajó en los diarios Espectador, Tribuna Popular de Puerto Cabello, y La Calle como coordinador de cultura. ex columnista del Aragüeño

 emvesua@gmail.com

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