Crítica ácida

Inductores magna cumlaude en roboeconomía y disimulo

La cifra más reciente que se conoce en torno a las importaciones que hace Venezuela, indica que son 77,5% menores que en 2012 cuando empezó la guerra económica, estadística insertada en uno de los estupendos artículos de la Profesora Pascualina Curcio, a quien no veo entrevistada en canales de la TV privada, donde no han salido del hoyo inmerso que fabrica la desestabilización del país, y se lava las manos cazándole goteras al rrrreeeeeégimen, sin aceptar responsabilidad de la prensa opositora en la desazón colectiva. Entretanto y sin perder la cordura, la mayoría hábil e inteligente, popular y alegre de quienes habitamos esta nación liberadora, superamos lo desagradable y observamos en qué lado de la polarización, que es naturalmente en el de la oposición, se ubican los desestabilizadores violentos.

En efecto muy por encima de las dificultades, el colectivo nacional prosigue despertando ante las bastardías y enfrentando a los afectos al supremacismo extranjero y nacional, algunos jefes políticos contras que sustentan a conversos cual esclavos, a esa masa minoritaria pero que tiene derecho a hacer oposición, suelo aplicarles por su descuido, la frase "conchabados por desconocimiento", ya que sin detenerse a estudiar o cuando menos averiguar sin fanatismos los orígenes recientes de la situación, con pasmosa impericia poco o nada les importa hacer el ridículo, acostumbrados a hablar golpeado, mirar con odio reconcentrado, gritar vulgaridades y entregarse al fragor inútil de terrorismo, bajo el disimulo de "guarimbas por la libertad".

La dirección opositora hoy robando ganancias del pueblo venezolano por el petróleo y sus derivados luce incapaz de comprender 7 años que se cumplen de las primeras desapariciones de productos en vida del Comandante Chávez. En punta la incapacidad mental para la política, capitalismo salvaje nulo que ni siquiera comprende que flotan al máximo los errores e intenciones peligrosas. Desconocen lo inducido, se niegan a dialogar, y respaldan hasta "asesinar la paz", comprometiéndonos a una guerra que pase de económica a bélica, (intervención extranjera incluida), actitud que merece consulta psiquiátrica. Sé de muchos casos en los cuales deben darse cuenta que ya ni su familia los aguanta.

Manipulados por conocidos medios privados sin el buen sentido informativo ético, intentan cambiar su radicalismo televisivo, radial y de prensa escrita, sin abandonar la sesgada complicidad elaborada al amparo de desaguisados anticonstitucionales. Cada vez son menos quienes respaldan concentraciones y llamados opositores desaliñados, persiste un doble rasero moral y mucho arribismo "demócrata", encabezado por turbados directores de altisonantes, clasistas y despreciativas actitudes, en las que aseguraron que contaban con fuerza armada y desarmada suficiente, burbuja mental que los alejó de la credibilidad necesaria para ejercer la política con bienaventuranza.

En la cobertura a las guarimbas venezolanas, justificaron terrorismo y satanizaron a policías y militares que no respondieron con represión brutal, con funcionarios muertos, heridos, y discapacitados de por vida. En Ecuador ocultan la rebelión del pueblo agotado, sometido por la derecha a medidas del FMI. Disimulan la arremetida bestial a manifestantes ecuatorianos, ocultando muertes, detenciones, y cierre de vías, (sin quemar gente viva ni propiedades como acá). Grave momento social en todo Ecuador, bajo un gobierno de derecha.



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Luis Sánchez Ibarra


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