Eso es un proceso peligroso

"Parece que Estados Unidos se convierte en una sociedad cada vez más hermética: allí aíslan hábil y eficazmente a la gente de la información objetiva. A veces se crea la impresión que se inclinan, en general, a sustituir la política exterior por la propaganda. El pueblo norteamericano debe saber la verdad de lo que ocurre en Venezuela, de la verdadera de la política en lo social contenido de nuestros propósitos verdaderos. Han llegado incluso a tergiversar los hechos".

Da las condiciones para que el hombre pueda en lo técnico poner fin a su propia existencia. A su vez, la acumulación en el mundo de materia explosivo de carácter social y el querer seguir resolviendo los problemas por la fuerza, por procedimientos propios de la Edad de Piedra, en un mundo totalmente cambiado, hacen posible la hecatombe en lo político. La militarización de las mentes, del modo de vida, debilita, y hasta podría eliminar, los frenos que en lo moral impiden el derrape hacia el suicidio.

Sí, efectivamente, la cuestión se plantea así: o las mentes políticas se ponen a tono con las exigencias de la época, o la civilización, y la vida misma en la Tierra, estarán en peligro de desaparecer. No se puede perder de vista la contradicción que hoy se impone a todo: entre la guerra y la paz, entre la existencia de la Humanidad y la extinción. Hay que hacer todos los esfuerzos para resolverlo a tiempo, a favor de la paz.

No se trata de adoptar la actitud de un impostor juez supremo que dicta sentencias al mundo entero, sino de respetar a los demás, combinándolo con un enfoque objetivo y autocrítico sobre la propia sociedad: eso es lo que más necesitan hoy las relaciones internacionales. Precisamente de que no se puede dejar exclusivamente en manos de los políticos los destinos del más candente problema de la época. El asunto no es solamente de políticos. Somos testigos del auge que va tomando el enorme movimiento social en el mundo.

Pero, ¿qué aspecto tienen esas mismas personas desde el punto de vista de la más normal ética de hoy? Están convencidas, y no lo ocultan, de que sólo en base a las amenazas, a la fuerza y a la constante posibilidad de usar esa fuerza se puede mantener el diálogo y las relaciones con los demás pueblos. (La posición de fuerza, está calculada para subordinar la voluntad ajena, para menoscabar los intereses de otros, y a veces, simplemente, para aplastar a los desafectos). A no ser que se quiera vivir en ese mundo que nunca existió, pero donde se decía, en nombre de supuestas ciencias, que todo estaba de una manera u otra determinado (por la historia, la economía, la secularización, el pueblo…)

La obsoleta mentalidad relacionada con la fuerza armada como medio de conseguir objetivos políticos, con la práctica de presentar a otros pueblos "como enemigos". Se nos declara fuera de la democracia y la ley; sin embargo, defendemos la práctica de la justicia. Se nos perseguirá hasta el exterminio, a fin de que esta justa y culta sociedad viva y los privilegiados puedan gozar tranquilamente de las rapacidades llevadas a cabo con los infelices trabajadores venezolanos.

La independencia de nuestra América es tal que los pueblos juntos semejan en la ladera de la montaña. Juntos pueden ascender a la cumbre o caer juntos en el abismo. Para que esto no suceda, los políticos deben situarse por encima de intereses estrechos, tomar conciencia del dramatismo de la situación actual.

¡La Lucha sigue!



Esta nota ha sido leída aproximadamente 903 veces.



Manuel Taibo


Visite el perfil de Manuel Taibo para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes: