Hay un encuestador opositor con voz de niña que no pega una en materia de elecciones. Lo describo así sin ánimo de ofender sino de identificarlo suficientemente a través de su característica más notoria.
A diferencia de opositores extremistas en redes sociales, que precalifican como homosexual a cualquier chavista sobre la base de calumnias o suposiciones, yo no incurriré en igual bajeza. Además si este fuere el caso del personaje a quien hoy aludo, tiene derecho a ser como quiera y no me inmiscuyo en su vida privada.
Ahora bien, este señor dijo en 1998 que Henrique Salas Roemer derrotaría a Hugo Chávez en elecciones presidenciales y ya sabemos cuál fue el resultado apabullante a favor nuestro candidato revolucionario.
Extrañamente periodistas opositores en TV le dedican largas entrevistas para que este eufemista vocifere sus erráticos cálculos y encuestas electorales. Pero así es la oposición, no importa cuan mediocre y desacertado seas, serás bien recibido en canales de TV opositora y te alabarán como fueras importante y acertado, aunque seas un mamarracho.
A todas luces "voz de niña" no es nadie políticamente en Venezuela (intelectualmente tampoco), él es sólo un producto mediático artificial del lobby en la TV opositora. Nunca un chavista de a pie recibirá tales caricias de parte de la TV antichavista (ni siquiera de los medios que se dicen chavistas, pero ese es otro cuento).
"Voz de niña" ha ido de error en error en asuntos electorales y con ellos contribuyó a crear mi frase: la oposición gana todas las encuestas pero pierde todas las elecciones.
Este desatinado personaje le ha hecho mucho daño a la MUD y de paso cobra caro sus encuestas (probalemente en dos o más taquilla). Él fue uno de los que dijo que con la victoria electoral parlamentaria de 2015, el chavismo había muerto y que la derecha estaba predestinada a conquistar la Presidencia de Venezuela en corto plazo.
Engolosinados jefes de la MUD creyeron las reflexiones de "vocecita" y se lanzaron por un barranco de golpes parlamentarios que fueron aplastados. Más tarde ese triunfalismo opositor, alentado por el mismo sujeto encuestador, hizo detonar 4 meses de terrorismo guarimbero y eso le causó daño político a la MUD que está hoy más lejos del poder que nunca frente a una todopoderosa Asamblea Constituyente y una reciente victoria socialista en 18 de 23 gobernaciones.
Con su voz exótica, no sé si por progesterona, este parlanchín y desorientado "experto" seguramente fabricará un escenario donde la MUD arrasará en las elecciones municipales de 2017. Lo lógico y probable es que dichos comicios se conviertan en la tercera derrota electoral de la MUD en un mismo año, quizás ahora sea peor debido a la división y choque entre los caprilistas leopolderos contra los viejos zorros de AD.
En resumen voz de niña nos ilustra la doble moral de los medios y "periodistas" opositores: si una bosta es opositora, dirán que es un fino abono de altísima calidad; y si un diamante es chavista, dirán que es una vulgar pieza de acrílico sin valor.
