El conflicto entre democracia (neo) liberal, neopopulismo y socialismo

"La democracia es una de las grandes conquistas de la humanidad. Si bien sus orígenes están en la Grecia antigua, su universalización como la menos mala entre las formas de gobierno, Churchill dixit, tiene, si acaso, menos de tres siglos". (1) ¿De qué democracia estamos hablando? ¿De la clásica, de la democracia esclavista, de la democracia de las minorías, de élites?, ¿Que sabemos de la democracia indígena latinoamericana, de aquella que surge con los derechos comunitarios, con la participación colectiva?.

Hemos olvidados nuestras raíces, cuando volteamos la vista hacia el mundo, ni nos damos cuenta de que tuvimos experiencias sociales en nuestro continente, aún antes de la llega de los europeos, transculturizados por estos, despreciamos las practicas ancestrales de democracia originarias, de la indigenistas, solo nos quedó el legado europeo impuesto por modelo, la democracia burguesa, aquella que nace con la revolución francesa, el capitalismo, la democracia como forma de gobierno burgués, el régimen universal más desigual de la historia dominante y legitimada unas veces por elecciones y otras a sangre y fuego, es decir a fuerza de la "zanahoria y palo".

Por esta causa, la de la democracia capitalista, de una minoría, democracia de elites, tenemos una confrontación en el Planeta, aquella que representa los intereses de las libertades económicas, de los negocios privados en nombre de una democracia autoritaria, el neoliberalismo, comprometido con la libertad económica y política de los capitalistas frente a la otra democracia incipiente, la democracia popular, llamada también despectivamente neopopulismo, para asociarla al populismo de la democracia capitalista, de la distribución rentista, específica de sociedades subdesarrolladas, aunque tenga orientación estatista, vicia las prácticas de la gestión del Estado y el desarrollo.

De manera más concreta, existen dos corrientes de la democracia contemporánea que se debaten según Carlos A. Montagner, de un lado de "la esquina liberal se encuentran, el padre Adam Smith, Mises, Hayek y los Austriacos, Milton Friedman y el mercado, James Buchanan y la Escuela de Elección Pública, Douglass North y los institucionalistas, la responsabilidad individual, la empresa privada, el estado de derecho, la ALCA, el comercio libre y global, los Tigres de Asia, la exitosa reforma chilena, Ronald Reagan, Margaret Thatcher, Mario Vargas Llosa, el estado pequeño y eficiente y del otro de "la esquina neo populista el ring comparecen, a la izquierda, el padre Marx, el estatismo, el clientelismo, la Teología de la liberación, la Teoría de la Dependencia, Eduardo Galeano, Che Guevara, Ernesto Laclau, Hugo Chávez, Evo Morales, Fidel Castro, (…), el gasto público desbordado, la ALBA, el Socialismo del siglo XXI, el Foro de Sao Paulo y un tenso etcétera con el puño cerrado y la consigna callejera a flor de labio" (2).

En Latinoamérica se ha desvirtuado la democracia originaria, el mismo estado de derecho para el capitalismo ha desgastado el discurso de los derechos humanos y la democracia, primero con el populismo y luego con el neoliberalismo, con un neopopulismo selectivo, también apelando al expediente del estatismo y el clientelismo para sostener la base de apoyo social, el neopopulismo sin embargo; éste último ha sobrevivido con la izquierda en el Poder en nombre del socialismo, contraponiendo eficiencia versus bienestar social, responsabilidad individual versus colectiva, libertad versus dependencia, empresa privada versus explotación social del trabajo, en todo caso, no se puede hablar en el capitalismo liberal de democracia participativa, solo democracia representativa.

Son sandeces hablar de democracia sin participación social del soberano, sin sustentabilidad en la voluntad popular, sin tomar en cuenta los intereses sociales de ser así, significa "carecer de ideología democrática", la democracia no es un invento de la cabeza de nadie, sino el producto del esfuerzos de hombres y mujeres para ejercer las libertades sociales, los derechos de los ciudadanos (as) y no para justificar el orden desigual, el orden social a nombre de un supuesta democracia, de un dogma liberal representativa de democracia capitalista, que justifica la desigualdad y la explotación social del trabajo.

Debemos decir que esta confrontación planetaria adquiere significación, si la confrontación ---parafraseando a Montagner-- por el poder en el siglo XIX fue entre liberales y conservadores, terminando por imponerse los liberales, en el siglo XX, entre liberales, socialista y fascista, derrotados esto últimos, abriéndose camino hacia la libertad, en el siglo XXI la confrontación es y será entre demócratas liberales conservadurístas con el socialismo, tratándose de imponer la participación popular, así fue durante la Gran Guerra Patria, la revolución cubana sentó un precedente de lucha democrática en América Latina en esa dirección el derrocamiento de la dictadura de Baptista, en medio de un continente plagado de dictaduras militares encubriendo su lucha contra el comunismo a nombre de la democracia, con Allende en 1970 se renuevan la esperanza social, ya sabemos cómo terminó todo aquello, los neofascista liberales impusieron "el peligroso juego de la democracia autoritaria" (3), es decir el neo autoritarismo.

Según Montagner "Era la primera vez que en América Latina se oyó hablar de Friedrich Hayek (Premio Nobel en 1974), o de Milton Friedman (1976). A mediados de los años ochenta era evidente que el populismo había hundido a América Latina en un charco de corrupción, inflación y gasto público irrefrenable bajo la orientación populista de Maynard Keynes, la región había fracasado. Se habló entonces de la "década perdida" (4). En resultas, las democracias liberales representativas y populistas y neo autoritarias neoliberales fracasaron ya nada tienen que aportar a la democracia real, se anclaron en la vieja visión clásica, minoritaria, representativa de la antigüedad, no son capaces de dar un paso adelante y profundo, fracasaron con la Reforma del Estado, el Estado Benefactor, la Distribución de la Renta Nacional, el Redimensionamiento del Estado, la Racionalización del Gasto, el Control de la Inflación, la Dolarización e inclusive con la Privatización.

Es entonces cuando insurge Hugo Chávez Frías, rescatando la cualidad participativa de la democracia, un nuevo aporte se genera en el umbral del siglo XXI, el espíritu del papel de las masas populares en la historia, el ideal del socialismo, dando respuesta al problema de la democracia y el Estado, de la democracia y el gobierno, la cual pasa por que ningún Poder del Estado sea derivado o tal vez originario pueda estar por encima de la voluntad popular, esas instituciones representativas creadas y sancionadas legalmente para ejercer la democracia no pueden colocarse de espalda a los intereses populares bajo un supuesto de defender la libertad, el ordenamiento jurídico mostrando fidelidad a los dogmas sacrosantos de la democracia liberal solo para justificar el orden desigual social. Así pues; no puede haber Poder por institucional que sea, Legislativo, Ejecutivo o derivados por encima del poder popular, democráticamente, a este no solo se le transfiere recursos, sino también capacidad de gobernar, capacidad de hacer, de transformar.

¿Pero qué ocurre en la democracia venezolana, la democracia participativa, después de la muerte de Chávez? La caída de los precios del petróleo ha erosionado las políticas de redistribución de la renta, (¿el neopopulismo socialista?). Ha colocado en la palestra de la democracia una clara diferencia entre neo-populismo y socialismo y no se trata de la distribución de la renta, sino de la participación en la gestión pública, en los asuntos del Poder, en las cuestiones del bien común, por lo que la eficacia del bienestar social se ha impuesto por encima de la efectiva libertad económica, la independencia y la soberanía se ha colocado el acento por sobre la dependencia y la democracia autoritaria, dominando el interés general, el interés colectivo, la deuda social, solo que el socialismo para que sea real y verdadero necesita de la democracia económica y ésta no se ha consolidado, la democratización social de los medios de producción, sin ello, no podríamos hablar de libertad económica, igualdad social y de socialismo.

Mientras que en Argentina se impone la democracia autoritaria, Macri como Poder Ejecutivo impone el neo autoritarismo, el proceso de reforma neoliberal del Estado lo más rápido posible, arremete contra los derechos de los ciudadanos, el rescate de capitalismo vía fast track. Antes de que la población tome consciencia de la redependencia, de la pérdida de los derechos sociales, en Venezuela en las condiciones actuales de Venezuela, el Poder Legislativo pretenden erguirse como un Supra Poder, realizar actos de gobiernos contrarios a los intereses populares, a la voluntad popular, tales son los proyectos de Ley de Propiedad de la Gran Misión Vivienda forjada por Julio Borges así como la Ley de Amnistía, dichos proyectos de Ley riñen con el interés popular, por lo que amenaza a la democracia, al estado social de derecho y justicia, ni que decir cuando sus actos legislativos están enfilados contra el interés popular.

Surge la pregunta de la democracia, "¿los poderes derivados tienen más poder que los elegidos en forma universal y secreta por el pueblo? En absoluto, pero tampoco un Poder Legislativo puede colocarse por encima del Poder Popular aunque haya sido electo directamente por el pueblo, su mandato no le autoriza elaborar leyes de espalda a la Constitución que el pueblo se dio de forma libérrima, por lo que la máxima autoridad es el pueblo, el poder popular organizado y los proyectos de ley deben estar en correspondencia con el interés y la voluntad popular.

En la era Post Chávez, el conflicto entre la democracia, el neoliberalismo y el socialismo luego como ya hemos dicho del debilitamiento de los ingresos del Estado, la caída de la economía rentista ha puesto en evidencia la fragilidad del modelo neo populista de orientación socialista, lo que unos han llamado "el fracaso del modelo socialista", de las bases sobre la cual se soportaban sus políticas públicas, por eso se habla de crisis, y es natural, las bases rentista petrolera se agotaron, el neopopulismo dependiente de la renta del mercado capitalista se acabó, Marx decía que el socialismo nace de la madurez de las contradicciones entre las fuerzas productivas y las relaciones sociales de producción, pues bien, la base material del socialismo en Venezuela no ha madurado, mal podríamos hablar de fracaso, el trabajador como fuerza productiva social no se ha hecho libre, el país no reproduce las condiciones de su propia existencia de vida, las relaciones capitalistas de explotación impide el desarrollo social, el orden mundial de la división del trabajo del capitalismo inhibe el desarrollo del socialismo, priva en la base económica, parasitario y rentista mientras que Gobierno no ha logrado trascender el rentísmo petrolero, el socialismo espera su hora.

1.-Analitica, "La curiosa interpretación judicial de la democracia", 1-1-2016.

2.- Montagner, Carlos A., "La guerra nuestra de cada día", Analítica, 21-2-2016

3.-Idem

4.-Idem.



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Alexander Kórdan Acosta R.

Economista. Magíster en Gerencia de Servicios Administrativos. Doctor en Ciencias Estratégicas para el Desarrollo. Profesor de la Universidad Bolivariana de Venezuela (UBV). Instructor de Cooperativismo Comunitario.

 kordankovki@gmail.com

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