El miedo del poder

Sigo desarrollando una propuesta que insisto debería ser tomada en cuenta; no lo he olvidado y nuestros dirigentes deberían seguirla apoyando: estoy tercamente proponiendo aunque nadie me pare bolas: Abocarnos a atender lo que es necesario y se convirtió en urgencia, no para más tarde cuando pase lo que no queremos, sino ahora mismo para evitarlo.

El llamado no es mediático; ni para que se diga a lo interno que se está haciendo bien; cuando todos los que hemos estado en política de verdad y es la mayoría del PUEBLO hoy Chavista; sabemos que lo económico esta arropando lo social y llevándonos por caminos que a la larga si no le aplicamos el contenido revolucionario, nos volverán a repetir lo que la IV aun mantiene en esta V. Aunque algunos nos hagamos los locos, para ocultar lo que no se puede esconder más.

Una revolución, tiene que estar sustentada en la formación del ser; es decir, de su combatiente, militante, o como lo queramos llamar y no en el fantasma creado por la influencia mediática que los pone como forma en una batalla, donde saldríamos en desventaja de darse un combate, porque defender lo que estamos construyendo, no se puede hacer si la conciencia no está fortalecida en el fondo.

Hay situaciones que conocemos y no queremos atacar, por un miedo que se está haciendo costumbre: De creer que vamos a perder votos; ignorando el monstruo que estamos construyendo, desvaneciendo nuestros esfuerzos revolucionarios; me refiero a un ejemplo, porque hay más: a la entrega de viviendas sin construir el hábitat, para tratar de garantizar un mínimo de apoyo en los lugares que estamos entregando a la deformación y reforzamos hábitos que proporcionan beneficios partidistas solo a la derecha, porque los adjudicados, después que reciben el beneficio, se creen que ya no son de nosotros.

Estamos haciendo ferias, festivales y una cantidad de palabras que podemos nombrar y ninguna encierra significado socialista, no hay nada para fortalecer lo que necesitamos, aunque tengamos confusión; que una feria o festival en capitalismo, tiene un sentido y en revolución otro.

No sé escribir ni decir con gran elocuencia ni parafernalia, lo que quiero que entendamos, pero tampoco me hago el pendejo cuando se que la mayoría sabe de qué estoy hablando y se están haciendo los locos; solo los que tienen intereses distintos a los del legado pueden seguir metiendo la cabeza como el avestruz, sobre este planteamiento: La alienación nos está penetrando la juventud y con una generación alienada no podremos cambiar lo que no termina de morir, para que nazca lo que todos sabemos que sigue y es parte de la consigna que no inventé pero conozco, PATRIA O MUERTE, VENCEREMOS Y HASTA LA VICTORIA SIEMPRE.

SIN PATRIA NO QUIERO VIDA.

HAZTE CONCIENCIA.


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Antonio Machuca

Actor y militante revolucionario

 machucamelo@cantv.net

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