No pasarán, no pasarán…. Y pasaron

Una de la más importante lectura que se debe hacer sobre las elecciones del 26S, es precisar con claridad, cual fue el resultado  para el proceso revolucionario. Si bien es cierto que, los 166 diputados que conforman el cuerpo legislativo de nuestra Asamblea Nacional, para el período 2006-2011, obtuvieron sus curules sustentando una alianza en un supuesto apoyo al presidente de la república y también porque la llamada “oposición” no postuló candidatos retirándose de la contienda electoral, dejando así el camino libre a todos aquellos que supuestamente apoyaban el proceso revolucionario, no todos los diputados entendieron el rumbo planteado por el presidente y le retiraron el apoyo al líder de la revolución pasando a formar parte de la oposición un porcentaje cercano al 10 u 11% de ellos.

Tomando como referente este porcentaje, los diputados oposicionistas en la Asamblea, entre todos los grupos y corrientes oscilaban entre 16 y 20 aproximadamente.  Si comparamos esta cantidad con los resultados del 26S, en las que la oposición obtuvo 65 diputados, la diferencia en cuanto a los que estaban y los que tomarán posesión de sus curules en enero del 2011, en el menor de los casos es de 45 asambleístas, esto en realidad  no puede prestarse a eufemismos tales como “victoria de la revolución”. Es desde todo punto de vista un avance de la oposición y siempre que la contrarrevolución avanza aunque sea un centímetro, es un centímetro de espacio que pierden las fuerzas revolucionarias, por lo tanto llamemos las cosas por su nombre, ganó mucho espacio la contrarrevolución.

Pero debemos también, aparte de los resultados, analizar sus causas y consecuencias. Entre una y otra opinión se puede escuchar que, fue por culpa de las instituciones que no supieron dar respuestas a las necesidades de la población, esto incluye gobernadores, alcaldes, ministerios, misiones, Etc. De lo cual se puede deducir que estamos ante un proceso eminentemente asistencialista, donde se plantea un intercambio estrictamente mercantilista del hecho político. Esto evidenciaría el atraso ideológico de nuestro pueblo.

En este sentido, sería interesante releer algunas prácticas, por ejemplo: si el gobernador de un estado, además de ser el encargado de dar respuestas a parte de las necesidades de la población y no sabe, no pudo o no lo quiso hacer, es también el jefe del partido en la región y a la vez el coordinador de la campaña electoral, ¿Cuántas cosas más no supo, no quiso o dejó  de hacer?¿Sería esta una de las causas principales del avance de la contrarrevolución?.

Otros consideran que los dólares aportados por el imperio a través de la USAID y de la NED, permitieron a los partidos de derecha hacer una poderosa campaña basándose en el proselitismo al mejor estilo cuartorepublicano, y trabajar conciencias de mercaderes del voto, de resentidos políticos y sociales, explotando algunas situaciones coyunturales como la falla energética y la inseguridad entre otras, además de permitirle construir una fuerte maquinaria que nunca se vio en grandes eventos, pero que estuvo haciendo campaña bajo perfil apoyada vigorosamente no en los liderazgos de los políticos, sino en la fuerza de los medios de comunicación. Incluso que la CIA participó más allá de los aportes a las ONG´s,  haciéndolo también de manera directa utilizando agentes infiltrados en las comunidades, penetrando estructuras sociales como los Consejos Comunales y movimientos sociales y religiosos aparentemente no definidos políticamente, (hecho nada nuevo en estos últimos por cuanto algunos de ellos son creación de centro de inteligencia imperial).

Si a todas estas posibles causas le sumamos algunos datos producto del análisis hecho a los resultados de varios intentos de consolidar realmente un poder revolucionario, tenemos: en primer lugar, el referéndum revocatorio a los diputados de la oposición, supuestamente nunca se recogieron las firmas, todos sabemos que no fue así, que desde adentro las escamotearon. En segundo lugar,  la reforma planteada por el presidente Hugo Chávez, es de conocimiento general el resultado electoral de ésta y también se sabe que igualmente se jugó desde adentro para perderla. En tercer lugar la actual conformación de nuestra Asamblea Nacional no fue el producto de los liderazgos consolidados regionalmente por su claridad ideológica, al final no fue sino una masa gris de la que apenas el país conoce unos veinte o treinta de los nombres de los sentados en esos curules y a la que el presidente se vio en la obligación de solicitarle poderes extraordinarios, en un intento por que se aprobaran las leyes que facilitaran y sirvieran de basamento jurídico a la construcción de un poder popular y a una nueva geometría del poder que abrieran el camino, para la formulación de un nuevo modelo de país. Estos detalles pudieran decirnos que lo que no se pudo, no se supo o no  se quiso hacer, no fue por simple casualidad

Si seguimos añadiendo causas, podríamos preguntarnos ¿Dónde está el tercer motor? el que supuestamente convertiría a toda la patria en una escuela para la formación política, ¿En qué parte se extravió el Plan Nacional de Lectura?, con que el que se generaría la necesidad y el gusto por la lectura o como preguntaría el panita Alí ¿En qué traste se perdió la escuela de formación sociopolítica del partido?, con la que se fortalecería y se consolidaría una verdadera consciencia revolucionaria en los militantes del PSUV. En todos estos últimos  casos se evidencia el intento sostenido por negar la formación política de la militancia, de manera que las fuerzas internas que intentan evitar la construcción y fortalecimiento del poder popular, se mantengan en los espacios de dirección del partido, lo que les permite seguir sosteniendo las viejas estructuras de las que sacan provecho personal. Estas fuerzas reaccionarias enquistadas en el corazón del PSUV, bloquearán permanente la transferencia del poder al pueblo y la consolidación del socialismo. De todos es sabido que quien se dedica a construirse un capital, no hará esfuerzos por construir el socialismo.

En todo caso el avance de las fuerzas reaccionarias de la oposición fascista en nuestro país, al obtener tal cantidad de diputados, hecho que no permitió el logro del objetivo planteado no sólo por el presidente Chávez, sino también por la necesidad histórica del proceso revolucionario de mantener una mayoría calificada en la Asamblea Nacional, nos obliga a una nueva lectura de nuestra Constitución, en ella se lee con claridad en  el Artículo203, que:

Son leyes orgánicas las que así denomina esta Constitución; las que se dicten para organizar los poderes públicos o para desarrollar los derechos constitucionales y las que sirvan de marco normativo a otras leyes.

Todo proyecto de ley orgánica, salvo aquel que esta Constitución califique como tal, será previamente admitido por la Asamblea Nacional, por el voto de las dos terceras partes de los o las integrantes presentes antes de iniciarse la discusión del respectivo proyecto de ley. Esta votación calificada se aplicará también para la modificación de las leyes orgánicas…

…Son leyes habilitantes las sancionadas por la Asamblea Nacional por las tres quintas partes de sus integrantes, a fin de establecer las directrices, propósitos y marco de las materias que se delegan al Presidente o Presidenta de la República, con rango y valor de ley. Las leyes habilitantes deben fijar el plazo de su ejercicio.

También dice textualmente la constitución en su Artículo 265.

Los magistrados o magistradas del Tribunal Supremo de Justicia podrán ser removidos o removidas por la Asamblea Nacional mediante una mayoría calificada de las dos terceras partes de sus integrantes, previa audiencia concedida al interesado o interesada, en caso de faltas graves ya calificadas por el Poder Ciudadano, en los términos que la ley establezca.

En el Artículo 296, nuestra Constitución establece que:

El Consejo Nacional Electoral estará integrado por cinco personas no vinculadas a organizaciones con fines políticos; tres de ellos o ellas serán postulados o postuladas por la sociedad civil, uno o una por las facultades de ciencias jurídicas y políticas de las universidades nacionales y uno o una por el Poder Ciudadano…

…Los o las integrantes del Consejo Nacional Electoral serán designados o designadas por la Asamblea Nacional con el voto de las dos terceras partes de sus integrantes. Los o las integrantes del Consejo Nacional Electoral escogerán de su seno a su Presidente o Presidenta, de conformidad con la ley.

Los o las integrantes del Consejo Nacional Electoral serán removidos o removidas por la Asamblea previo pronunciamiento del Tribunal Supremo de Justicia.

De la lectura realizada a estos tres artículos, se puede vislumbrar lo nefasto de los resultados de las elecciones del 26S para las fuerzas revolucionarias, en las no se lograron ni las dos terceras partes, ni las tres quintas partes necesarias para lo que está planteado en nuestra Constitución.  Se necesitará mucha fortaleza por parte del pueblo para no permitir retrocesos en nuestros logros alcanzados y menos aún cuando este pueblo sencillo humilde y militante hizo todo lo posible por que los resultados no nos fueran más adversos, parafraseando nuevamente al camarada Alí Primera… A pesar de sus enemigos, los de adentro y los de afuera. 

PATRIA SOCIALISTA O MUERTE

(*) Activador de Misión Cultura

Movimiento Cultural Revolucionario de Aragua 

 luissrrojas@hotmail.com

 


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