Vamos a gozar de nuestra ignorancia en materia parlamentaria

Que fácil ha sido para los neoespartanos seleccionar por votos a nuestros cuatro dignos representantes, tres de la oposición adeca-copeyana y uno de las filas del Psuv que serán los encargados de representarnos como diputados electos a la Asamblea Nacional y quienes llevarán la voz desgarradora de subsanar por iniciativa propia la plataforma convencional anudado de problemas que nos rodea como Isla salpicada de sol y arena en la cresta de la esperanza del coloquio mundial

Y en ese destacamento de habilidades de nuestros defensores a tiempo completo, tenemos a un tal Tobías Bolívar –no sé de qué generación, Orlando Nano Avíla,  Morelitos Rodríguez y el nuestro –William Fariñas- bien comido y de estancia agradecida como cumanés que nos llegó desorientado como cuarto bate en la línea, esposo de la madrina y a su placer ha tenido toda la costa margariteña a sus pies, quien lideriza los terraplenes de inquietudes que abundan y, como buen catador de especies marinas está bien saturado en el comer de ostras en crema de ponsigué.

Como queda al descubierto: son tres autóctonos nada vegetarianos y, el cuarto un navegado que nos prestó sus servicios para su propia conveniencia, es decir, vino a trabajar por lo suyo y lo logró.

Ése es el cuarteto de voces que nos representará en el tumulto vivencial de desatar ideas en provecho del pueblo isleño de margariteños y cochenses, y llegado el momento harán estremecer la tribuna del recinto de los curules de la Asamblea Nacional con la verborrea que se han encaletado por años y, que Morel Rodríguez con su savia tristeza de inculto ha heredado a su hijo y a los dos adecos que, deberán escupir frases de odio salino o si no vomitar palabras multivitamínicas recubiertas de contenidos ufanos que suelden las entrecubiertas de las redes ocultas que suben y bajan con la marea baja de la votación cuando, sea preciso contarse y, el nuestro podrá de vez en cuando cantar un galerón florido que recorra el oriente cercano de sus aspiraciones entre las penínsulas cercanas y no vaya a dormirse bajo el calor de la tertulia sofocante de las mentiras opositoras.

Tobías Bolívar nos prometió en su campaña que quería llegar a la Asamblea como nuevo demócrata de la democracia adeca a destruir el maluco comunismo que nos viene de Cuba y, si había que acabar con todo lo que se importa de Cuba y desprenderse de los  médicos infiltrados en la Isla también lo haría. Su puñal de oraciones intactas comenzaría a tumbar cabezas de norte a sur cuando se requiera. En cambio Nano Avíla, trepó más alto y dijo, que iba a desnudar en vivo a los chavistas en pleno Hemiclico caraqueño, con la furia de un vendaval caribeño cargado de brutalidad insipiente. No así Morelitos que desde que se lanzó dijo, que iba a pelear con todo el enredo de su alma y con los reales de su corazón a que Caracas deje de ser la Capital de Venezuela que, ya es hora de la provincia y como tal a Nueva Esparta debe designársele, por ser Isla del encanto caribeño sin deslave, cobijada con un mar azul profundo sin comparación alguna, donde su ilustre papá gobierna desde que Adán se separó de Eva del Paraíso y, que eso parte y viene de la creatividad del gobernador Morel Rodríguez desde que, el Gobierno Nacional lo dejó sin el Aeropuerto y los Puertos que como margariteño pobre, le recordaba cuando tomó café en totuma y agua en tapara dentro de la atarraya de la miseria pasada y, ahora es gallero de reconocida solvencia guabinosa de los mejores  del Universo, no cesaría en su empeño, lo que para Fariñas es un maremoto que recorre las diatribas falsas dentro del porvenir y él se opondrá con su voz afónica cuando las circunstancias y el líder lo crean conveniente y, que también tratará de estar despierto para lo que haya que a atajar con su guante de paciencia y que aunque llueva, truene o relampaguee el será rojo-rojito sin pelos en la lengua.

Y en ese altibajos de frecuencias fonéticas, los cuatro caballeros embestidos de príncipes de la verborrea incansable, serán los héroes de fundar el nuevo parlamentarismo por empezar con las dificultades por vencer y, se encargarán de poner a la legislación venezolana a nivel mundial y a la orden del día con su risa y con sus sueños, pesados y livianos como ellos mismos y ariscos como chochos margariteños que la bola alta la batean fácilmente y para meterles gatos por liebres en la capital, habrá que emborracharlos con ron destilado de trampas.

Lo cierto es que, cada uno de ellos llevará en atención de paz en los debates a desarrollarse en la cámara para repartir, una talega repleta de gofio cumanés y de piñonate sanjuanero que endulce las sesiones amargas de rabia.

estebanrr2008@hotmail.com



Esta nota ha sido leída aproximadamente 1896 veces.



Esteban Rojas


Visite el perfil de Esteban Rojas para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes: