El país vió cómo un grupo de "delincuentes" en Mérida armaron una guarimba violenta universitaria, hiriendo a varios funcionarios policiales y casi violando a una mujer, sea policia ó no. Estaban bien armados. La denuncia que Robiro Quintana hizo en su artículo de hoy en aporrea.org, dónde explica: "Un estudiante, de nombre Agustín García, del Movimiento 13, en declaraciones a la TV expresó que “lo que está ocurriendo el 24 y 25 de mayo en la ULA se iba a extender a los barrios y a otras zonas de la Ciudad para acabar por la fuerza con este Gobierno…" destapa, devela, desenmascara a éstos malandros, a sus grupos y a William Brownfield, quienes pretendían comenzar un TSUNAMI de violencia desde ese estado hacia el resto del país.
Hasta en esto está metido Mr. Campomarrón (brown: marrón, field: campo). Y encima, declara ayer ó anteayer, apoyando a "su" gobierno, de que "Chávez no colabora contra el terrorismo".
¿Cuál terrorismo, Campomarrón?. ¿Tiras la piedra y escondes la mano?. Quítate primero, no la paja, si no la maleza que tienes en el ojo para poder quitársela a los demás y abrir la boca.
Este "ario personaje diplómático", insiste visiblemente en formar parte de la oposición local, visceral y golpista. No siga equivocándose Mr. Campomarrón. La próxima vez no serán huevos ó tomates lo que le lance el pueblo. Serán excrementos. Del color de su nombre. No se meta con nuestras universidades porque reaccionaremos orgánicamente.
